El “Halcón dolarizador” de Estados Unidos, Steve Hanke, defendió el esquema que promueve Javier Milei para la economía argentina y dijo que lo está ayudando a construir argumentos en contra de sus críticos.
Hanke, profesor de Economía Aplicada en la Universidad Johns Hopkins y asesor del presidente argentino Carlos Menem, explicó en una entrevista con Infobae que la idea de Milei de eliminar el Banco Central es “muy buena” y afirmó que la dolarización reducirá el déficit fiscal.
— ¿Cree que la Argentina puede evitar una hiperinflación?
— Cuando se trata de Argentina, realizo dos actividades. En primer lugar, mido las hiperinflaciones. Ese programa de investigación ha dado como resultado la Tabla de Hiperinflación Mundial Hanke-Krus. Ahora incluye 66 episodios de hiperinflación. Uno de esos 66 episodios corresponde a Argentina (mayo de 1989 - marzo de 1990). En segundo lugar, he diseñado y aplicado reformas monetarias que han detenido hiperinflaciones. Lo único que no hago es pronosticar hiperinflaciones. Eso es porque las hiperinflaciones son relativamente raras y extremadamente difíciles de predecir.
— ¿Qué opina del buen resultado que obtuvo Javier Milei en las elecciones primarias?
— Es bastante obvio que Milei engañó a los encuestadores. En Argentina, predecir el resultado de las elecciones podría ser casi tan difícil como predecir cuándo se producirá la próxima hiperinflación.
— ¿Asesora a Milei?
— No estoy en contacto directo con Milei; sin embargo, estoy en contacto con algunos de sus asesores en lo que se refiere al tema de la dolarización. Actualmente estamos trabajando en un libro blanco que aborda las objeciones a la dolarización y los tópicos que esgrimen sus oponentes.
— ¿Qué condiciones necesita el país para dolarizarse?
— En mis estudios de los 33 países y jurisdicciones que se han “dolarizado”, así como en mi participación como asesor en las “dolarizaciones” de Montenegro (1999), Ecuador (2000) y Zimbabue (2008), he descubierto que las “dolarizaciones” se han producido con éxito en circunstancias muy diferentes y con diversos tipos de modelos de dolarización. No hay condiciones previas para la dolarización. Los críticos de la dolarización a menudo sacan a relucir una larga lista de condiciones previas que deben cumplirse antes de introducir la dolarización. Sin embargo, tanto por principio como en la práctica, no hay condiciones previas para el éxito de las “dolarizaciones”.
— Si dolariza pero no termina con el déficit fiscal crónico de la Argentina. ¿Sirve dolarizar?
— En primer lugar, su premisa sobre los déficits no es, con toda probabilidad, correcta. Con la dolarización, se impone una dura restricción presupuestaria a las autoridades fiscales porque ya no hay un banco central que pueda conceder créditos al gobierno. Como resultado, los gobiernos se ven sometidos a restricciones monetarias y fiscales, se controlan la inflación y los déficits fiscales, se eliminan las crisis cambiarias y las crisis bancarias son mucho menos frecuentes que en países comparables que operan con bancos centrales que emiten sus propias monedas nacionales. Pero, en un sistema dolarizado, como el que se impone a los estados de los Estados Unidos de América, algunas ciudades y estados que no tienen bancos centrales que puedan concederles créditos registran déficits de vez en cuando. Si los mercados consideran que esos déficits son excesivos, los gobiernos estatales y locales acaban pagando tasas de interés más altas que las que pagarían por los bonos que emiten para financiar sus déficits. Al mismo tiempo, las tasas de interés del sector privado en los estados y municipios con déficits excesivos no se ven afectadas. Eso sería precisamente lo que ocurriría en Argentina si los mercados consideran que los déficits del Gobierno son excesivos.
— ¿Debería eliminarse el Banco Central como propone Milei?
— No conozco las modalidades exactas de lo que propone Milei, pero, en principio, la eliminación de la capacidad del Banco Central de la República Argentina (BCRA) para crear dinero es una gran idea. Para librar a Argentina de su problema del peso, Argentina debe eliminar el peso y la capacidad del Banco Central de producir pesos. La eliminación de los poderes monetarios discrecionales del BCRA es una excelente idea, ya que la inestabilidad económica creada por el BCRA es la fuente de muchos, si no la mayoría, de los problemas económicos de Argentina.
Bancos y apoyos
— ¿Qué tipo de sistema bancario hay que crear en una economía dolarizada?
— En cuanto a la estructura del sistema bancario en un país dolarizado, hay muchas posibilidades. Una que ha funcionado bien es la de Panamá, país dolarizado desde 1903. Para integrar su sistema bancario en los mercados financieros mundiales basados en el dólar, Panamá cambió sus leyes bancarias en 1970. Como resultado, los bancos internacionales han estado deseosos de participar en la revolución financiera extraterritorial. El crecimiento del sistema bancario panameño demuestra que las reformas bancarias de 1970 permitieron a Panamá aprovechar las tendencias de la globalización y la libre circulación de capitales. El sistema monetario dolarizado de Panamá elimina sus riesgos cambiarios y la posibilidad de una crisis monetaria frente al dólar estadounidense. Y la posibilidad de crisis bancarias se mitiga en gran medida porque el sistema bancario de Panamá está integrado en el sistema financiero internacional.
— ¿Cree que un presidente de EE.UU. apoyaría esta dolarización de la Argentina?
— El presidente de Estados Unidos no está obligado a aprobar la dolarización. De hecho, la dolarización de facto ya se ha producido a gran escala en Argentina sin ninguna aprobación de la Casa Blanca. Nada cambiaría si Argentina se dolarizara oficialmente. De hecho, en Ecuador, donde fui asesor del ministro de Economía y Finanzas cuando se dolarizó en 2000, no se requería la aprobación de la Casa Blanca, y no se produjo ninguna.
— ¿Milei o Bullrich deben renegociar el acuerdo con el FMI?
— Si el próximo presidente de Argentina cree que puede obtener un mejor acuerdo del FMI a través de renegociaciones, entonces que lo renegocie.
— ¿Qué opina de la decisión del FMI de girarle al Gobierno actual unos USD 11.000 millones?
— Su pregunta me trae recuerdos de 2001, cuando, en noviembre, el FMI suspendió el programa de Argentina a pesar de que este país había cumplido los objetivos fiscales del programa para el tercer trimestre de 2001. Como resultado, gracias a la suspensión del FMI, se produjo un caos financiero. Ahora, el FMI acaba de hacer lo contrario. Acaba de aprobar el desembolso de 11.000 millones de dólares, a pesar de que Argentina no ha cumplido sus objetivos con el FMI. La moraleja de esta historia es una vieja moraleja: si debes al banco 1 dólar, es tu problema. Si debes mil millones, es problema del banco.
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