La divisa de EEUU operada en el reducido mercado informal estiró la ganancia en la última hora de los negocios a cuatro pesos, para finalizar a $574 para la venta. El dólar libre había registrado un máximo intradiario de $577 por la tarde del jueves. A lo largo de la semana, el dólar libre se encareció en 23 pesos o un 4,2 por ciento.
El contado con liquidación, la modalidad que suelen usar las empresas para sacar divisas del país, cerró a 585 pesos por dólar.
Con un dólar mayorista que terminó ofrecido a $279,35, la brecha cambiaria quedó en el 105,5 por ciento. El tipo de cambio oficial acumuló en cinco ruedas una suba de 5,65 pesos o un 2,1 por ciento.
Fuertes ingresos de divisas aportados por más de USD 300 millones a manos de YPF, más unos USD 99,2 millones liquidados por el programa de dólar agro, les permitieron al Banco Central terminar la semana con amplio saldo comprador en el mercado mayorista.
“El BCRA terminó la última rueda de la semana con saldo consolidado positivo por unos USD 221 millones. Como se había adelantado, YPF realizó ingresos por USD 345 millones”, explicó Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio.
La cotización “blue” del dólar pasa a subir dos pesos esta tarde, a $572 para la venta en la reducida plaza informal. La divisa de EEUU acumula una ganancia de 21 pesos o 3,8% en la última semana.
Sobre la hora, y con las reservas del Banco Central (BCRA) en situación crítica, el último pago que debía hacer la Argentina al Fondo Monetario Internacional (FMI) antes de las cruciales primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) presidenciales del 13 de agosto fue girado en tiempo y forma. Fueron el equivalente a USD 775 millones los que llegaron a las cuentas del organismo internacional este viernes y que evitaron que el país cayera en un retraso, el temido estado de arrears que hubiera enviado la señal de emergencia a las terminales con las que operan inversores de todo el mundo respecto a que el barco argentino, una vez más, estaba desplegando los botes salvavidas.
La divisa informal revierte la baja de un peso que experimentó por la mañana y otra vez está cotizada a $570 para la venta. El dólar “blue” registró un récord intradiario de $577 por la tarde del jueves, y un máximo de cierre de 570 pesos.
Fue una disparada y se concentró en muy poco tiempo. El Mercado de Cañuelas, que tomó el lugar que antes ocupaba el de Liniers, fue el primero en experimentarlo. Tras meses de precios de la hacienda deprimidos por la sequía, que fuerza a sacrificar animales antes de terminar de engordarlos, los valores dieron un salto.
El dólar negociado en el mercado paralelo recorta un peso en el día, a $569 para la venta. De esta forma reduce el alza de la última semana a 18 pesos o un 3,3 por ciento. Con un dólar mayorista que gana al mediodía 1,30 peso a $279,40, la brecha cambiaria alcanza el 103,7 por ciento.
Las primeras posturas de venta en el segmento mayorista del dólar marcan un precio de $279,35 por unidad, o sea 1,25 peso por encima del cierre anterior. A lo largo de la última semana el tipo de cambio oficial acumuló un incremento de 5,65 pesos o un 2,1 por ciento. En el último mes el dólar mayorista sube 20 pesos o un 7,7% respecto de los $259,35 del 4 de julio último.
La inflación de agosto viene con un piso muy alto, pero que va en aumento a medida que pasan los primeros días del mes. La suba del dólar libre y de las cotizaciones financieras agranda la brecha cambiaria y las expectativas de devaluación. El traspaso a precios es cada vez más rápido, como quedó demostrado en la última crisis cambiaria de abril y en el salto de la última semana de julio.
El Gobierno Nacional cubrió este viernes el último vencimiento con el Fondo Monetario Internacional antes de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) presidenciales, unos USD 775 millones que se suman a los USD 2.700 millones que ya giró el lunes pasado, gracias a un préstamo de último momento pactado con el Estado de Qatar. El ministro de Economía, Sergio Massa, recurrió a este muy poco habitual mecanismo para acceder a financiamiento sin resentir aún más la situación de las reservas del Banco Central.