Las “personas humanas”compraron en junio dólares por USD 161 millones, lo que resultó un 3% menos en relación a igual mes del año pasado, pero un 4% más que el mes anterior, según informó ayer el Banco Central. Ese aumento se dio en la previa a las medidas que, desde la semana pasada, encarecieron el tipo de cambio para unas 900.000 personas habilitadas a comprar hasta ese momento el también llamado “dólar solidario”.
De acuerdo a las estadísticas de la autoridad monetaria publicadas en su habitual informe sobre Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario, la cantidad de personas que operaron en esa plaza en junio ascendió a 778.000 individuos que compraron billetes, mientras que unas 19.000 vendieron, resultando así en compras y ventas per cápita por unos USD 200 y USD 160, respectivamente.
La cifra seguramente disminuirá a partir de julio, cuando el Gobierno impuso nuevas condiciones cambiarias también para los pequeños ahorristas. En el marco de las nuevas decisiones impositivas para las importaciones de bienes y servicios, el Ministerio de Economía y la AFIP también resolvieron hacer extensivo el sobrecargo que rige sobre el dólar para los consumos en dólares en el exterior menores a USD 300, conocido como dólar tarjeta. Esa cotización se ubicó ayer en $500.
Las medidas adoptadas hacia fines del mes pasado, que implicaron también un aumento de 7,5% sobre el precio del dólar mayorista para la importación de bienes y de 25% sobre los servicios, se enmarcaron en un dato clave que incluyó el informe del BCRA. Hacia fin del primer semestre -hoy son incluso menores- las reservas internacionales del BCRA se ubicaron en USD 27.926 millones, tras caer en junio USD 5.000 millones. Esa baja fue explicada principalmente por los pagos de capital al Fondo Monetario Internacional por unos USD 2.683 millones, equivalentes a 2.014 millones de Derechos Especiales de Giro (DEG) la unidad de cuenta que maneja el organismo.
A esto se le sumó la disminución de USD 717 millones en las tenencias en moneda extranjera por parte de las entidades, y otros USD 445 millones por las ventas netas del BCRA en el mercado de cambios y por los pagos netos liquidados del BCRA a través del Sistema de Pagos de Moneda Local.
En tanto, el “Sector Privado no Financiero” fue comprador neto por USD 1.365 millones en el mercado de cambios.Dentro de ese grupo, el principal sector en términos de ventas netas, resultó el de “Oleaginosas y cereales”, que registró ingresos netos por USD 791 millones, un 79% menos que en el mismo mes de 2022.
Los menores ingresos netos por bienes del sector durante junio respondieron, en primer lugar a los efectos de la sequía sobre el producto exportable y, en segundo lugar, a la cancelación parcial del endeudamiento comercial que el sector tuvo en mayo, el marco de la tercera edición del “Programa de Incremento Exportador”.
El “Sector Real excluyendo Oleaginosas y Cereales” fue comprador neto de divisas por un total de USD 1.629 millones, exhibiendo una reducción interanual del 38% de sus compras. En el semestre, el ingreso neto de dólares del sector oleaginosos y cereales cayó USD 10.889 millones durante el primer semestre del año, Esa caída, destacó el economista Nadin Argañaraz, impactó también en la recaudación de derechos de exportación cayó un 60% real en igual periodo “Conocido el balance cambiario del BCRA, se tiene que el sector de oleaginosos y cereales pasó de un saldo neto de USD 20.000 millones en el primer semestre de 2022, a uno de USD 9.100 millones en igual periodo de 2023. La diferencia efectiva fue de USD 10.900 millones, lo que en términos relativos significa un 54 por ciento”, analizó el experto, quien agregó que las menores exportaciones, explicadas esencialmente por la gran sequía, derivaron en menor recaudación directa por derechos de exportación.
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