Con una reacción más positiva, los agentes financieros siguieron acomodándose este martes al nuevo esquema cambiario que rige a partir de esta semana. Mientras los activos bursátiles sostuvieron sus precios, el dólar libre cayó casi 3% y el Banco Central volvió a comprar divisas en el mercado por segunda rueda seguida.
En el marco de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno lanzó un tipo de cambio especial de 340 pesos por dólar para fomentar las exportaciones de las economías regionales hasta fin de agosto, con el maíz incluido, con la idea de reforzar las golpeadas reservas.
Además, incrementó en 10 puntos porcentuales del precio al público del dólar en los bancos, por el incremento de la percepción a cuenta de Ganancias y Bienes Personales, la cual pasó del 35% al 45%, lo que llevó al recargo para la compra de billetes del 65% que regía hasta la semana pasada al 75% actual. Entre las medidas oficiales que presionan al tipo de cambio está el un nuevo Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) que encarece las importaciones de servicios en 25% y de bienes en 7,5 por ciento.
Al salto inicial de 24 pesos o 4,5% que registró el dólar libre el lunes le siguió este martes una fuerte baja que devolvió la mayor parte de esa suba y reacomodó al billete en un valor más cercano a las paridades bursátiles.
El dólar libre amplío la caída sobre el cierre de las operaciones informales de este martes y cerró ofrecido a $536 para la venta, con una baja de 16 pesos o 2,9% en el día, desde su récord de $552 del lunes. Con un dólar mayorista que subió 60 centavos a $271,60, la brecha cambiaria se redujo al 97,3%, tras haber superado el 103% en la rueda anterior.
“Con el ‘combo’ de medidas de nuevos tipos de cambio sobre la mesa, los operadores monitorean los efectos que tendrá a corto plazo sobre el saldo de las intervenciones, ya que frenar la sangría de divisas se convierte en una urgencia para evitar mayores deterioros en las expectativas. Esta adversa dinámica es la que continúa manteniendo sostenidos a los dólares financieros y libre, toda vez que los agentes económicos siguen inclinados a la dolarización, tal como sucede históricamente en períodos preelectorales, pero en esta ocasión frente a una crítica escasez de divisas y un amplio exceso de pesos”, evaluó el economista Gustavo Ber.
El dólar libre cayó fuerte y quedó alineado con el “contado con liqui”, el dólar bursátil con el que converge desde junio
El dólar libre quedó así más alineado con los dólares bursátiles, que terminaron con leves alzas. Con negocios mínimos, el “contado con liquidación” en el segmento PPT (Prioridad Precio-Tiempo) de ByMA (Bolsas y Mercados Argentinos) quedó a $529,41 con el Bonar 2030 (AL30C), mientras que el “contado con liqui” entre privados en el Senebi (Segmento de Negociación Bilateral), donde no hay intervención oficial, cerró a $535,35 con el AL30C.
El dólar MEP cerró a $499,67 a través del bono Bonar 2030 (AL30D). Ahora esta paridad queda a un nivel similar al “dólar ahorro” en bancos, que con un cupo mensual de USD 200 promedió $498,14 para la venta.
“Hubo intervención oficial en el contado con liqui, MEP y mercado secundario”, comentó un operador a Reuters. Destacó el muy elevado monto operado en dólar MEP, por unos USD 60 millones en bonos en PPT. Con el Bonar 2030 (AL30D) se transaron USD 39,2 millones, más USD 20,4 millones con el Global 2030 (GD30D).
Compras para el BCRA en el MULC
El nuevo esquema cambiario -principalmente por los mayores impuestos para importar- permitió por segunda rueda seguida compras a manos del Banco Central en la plaza cambiaria.
“El BCRA terminó la jornada con compras por USD 85 millones en la rueda de dólares y con ventas por 176 millones en la rueda de yuanes, consolidando un resultado de USD 61 millones de compras netas, aproximadamente”, sintetizó Gustavo Quintana, agente de PR Corredores de Cambio.
Las operaciones por el llamado “dólar agro IV”, extensión del Programa de Incremento Exportador (PIE), aportaron liquidaciones del sector del orden de los USD 68,5 millones en el mercado mayorista, que se suman a los USD 4,6 millones del lunes.
Un informe de la Consultora PxQ, que dirige el ex viceministro de Economía Emmanuel Álvarez Agis, indicó que “la actualización del tipo de cambio del Programa de Incremento Exportador y la inclusión de nuevos cultivos busca fortalecer las reservas. Según el Gobierno, se esperan USD 2.000 millones en agosto de 2023. Esto serviría, por lo menos, para que el BCRA deje de vender divisas en el mercado cambiario. El desembolso del FMI, por su parte, engrosará las reservas brutas, pero no será un alivio para las netas, dado que los fondos están calzados con vencimientos con el organismo”.
El Tesoro nacional enfrenta vencimientos con el FMI por unos USD 3.400 millones entre el 31 de julio y el 1 de agosto, en momentos en que las reservas netas BCRA se encuentran en rojo muy cerca de los USD 7.500 millones, de acuerdo al cálculo de operadores.
La Bolsa volvió a subir
En tanto, los títulos bursátiles cotizaron con ligero sesgo alcista, por recompras de carteras ante proyecciones de una mayor inflación, luego de que el Gobierno adoptara nuevas decisiones para cerrar un acuerdo con el FMI.
El índice accionario S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires borró una inicial toma de utilidades y finalizó con una ganancia de 1%, a 471.449 puntos, un día después de marcar un récord intradiario en 479.111 unidades. En Wall Street, donde los principales índices subieron en un rango de 0,1% a 0,6%, las aciones y ADR de Argentina operaron con números mixtos y variantes de poca relevancia, encabezados por Telecom (+2,2%).
“Hay compras especulativas, porque con más inflación se ajustan los bonos ligados a ese fenómeno y beneficia a las firmas exportadoras por la devaluación implícita, por eso suben bonos y acciones en un rally que se mantendrá con toma de ganancias a corto plazo”, explicó a Reuters un agente de la banca privada.
En Wall Street los bonos Globales -en dólares con ley extranjera- cerraron estables, con un riesgo país de JP Morgan que recortaba dos enteros para la Argentina, en los 1.951 puntos básicos a las 17:45 horas.
Los bonos operados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) mejoraron un 0,6% en su promedio en pesos, con un nuevo aliento entre títulos dolarizados ante jugosos rendimientos, luego de ganar 3% en las anteriores tres sesiones.
Las medidas cambiarias podrían impulsar más la inflación de tres dígitos, según analistas, desestabilizar la macroeconomía a corto plazo, mellando las perspectivas electorales del gobierno del Frente de Todos en las primarias presidenciales de agosto.
“La inflación de agosto se acelerará”, adelantó la consultora EcoGo, principalmente debido a que el tipo de cambio preferencial del dólar se extenderá a los cereales, por lo que encarecerá la alimentación animal para los productores de carne.
La poderosa Unión Industrial Argentina (UIA) sostuvo que “las últimas medidas adoptadas por el Gobierno nacional impactan negativamente en la producción, limitando aún más el acceso a insumos necesarios para la industria. Los anuncios de estos últimos días, que esperamos sean de carácter transitorio producto de la escasez de divisas, afectarán la actividad”.
El FMI comunicó que prevé que la economía de Argentina se contraerá un 2,5% en 2023, con una tasa de inflación cercana al 120% hacia fin de año, en gran parte debido a una severa sequía que recortó la producción agrícola. El organismo crediticio estima que llegará a un acuerdo con Argentina a nivel staff en los próximos días por los objetivos de la próxima revisión.
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