Las empresas y los expertos creen que los impuestos a las importaciones de servicios provocarán un aumento en los precios de los productos alcanzados por las medidas anunciadas por el Gobierno para tratar de llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El tributarista Sebastián Domínguez indicó que “el Gobierno eligió aplicar el Impuesto PAIS por Decreto en lugar de aumentar el tipo de cambio y devaluar el peso. El problema es que la inconstitucionalidad del Decreto podría llevar a que existan empresas decidan judicializar su aplicación”.
“La aplicación del Impuesto PAIS golpeará sobre los costos de las empresas y se terminará trasladando a precios con la correspondiente aceleración de la inflación que golpeará sobre los bolsillos de los argentinos”, indicó Domínguez.
Además, sostuvo que “se genera otro problema que puede poner en riesgo la economía de muchas empresas. Son aquellas a las que se les ha generado una deuda por importaciones de bienes y servicios que no han podido pagar ante la falta de aprobación de las Declaraciones SIRA y/o SIRASE”.
“Esto implica que las empresas deberán asumir el costo adicional del Impuesto PAIS, en general 25% para servicios y 7,5% para bienes, es un costo que no habían considerado en sus precios al momento de vender bienes y prestar servicios. Este mayor costo, incluso se da en empresas que colocaban los pesos en instrumentos Dólar Link esperando que, si había una devaluación, el ajuste del valor de las inversiones acompañara la misma”, indicó Domínguez.
“El tema es que el Gobierno mantiene el tipo de cambio oficial y esos instrumentos Dólar Link no se ajustarán al nuevo valor del Dólar Importación”, indicó.
Su par Mariano Ghirardotti dijo que “las medidas de hoy, sumada al enojo de los empresarios (que además de las noticias de hoy llevan mas de cuarenta días esperando que se aprueben nuevas SIRAS), sin duda tendrán impacto en precios, si bien muchos importadores ya habían cambiado sus precios a valor dólar MEP, dado que desconocían el dólar al que deberían cancelar a proveedores del exterior, este mayor valor ya fue trasladado al consumidor, o bien lo será de ahora en mas”.
“En definitiva quien pagará este aumento de los costos es sin duda el consumidor (el argentino de a pie), dado que le impuesto se traslada a precios, y el que termina pagando un mayor importe es el que consume, sin duda esto implicara una retracción de la demanda, lo cual implicara profundizar la recesión, y quien no pueda trasladar hacia adelante (precios) lo hará hacia atrás (reduciendo sueldos, honorarios, compras e inversiones)”, indicó.
Por otro lado “es de destacar la incertidumbre reinante en cuando a los vencimientos con el FMI de esta semana, y el cuestionamiento jurídico desde la doctrina a la validez de incorporar un hecho imponible al impuesto país por decreto. Lo mas importante es que rompe los contratos económicos que dan previsibilidad al funcionamiento de las empresas, hasta hoy los contratos de Rofex y los bonos dólar link (tanto del estado como de emisiones privadas, le daban a las empresas la posibilidad de seguro de cambio, caro o barato, pero eran contratos entre privados ) , tanto para exportadores como para importadores. Sin contratos no hay economía viable”.
La visión de la industria
Si bien se la mencionaba desde hace varias semanas como una alternativa concreta, la medida fue recibida con relativa sorpresa en el sector de electrónica y celulares. Hoy fue una mañana de intensas reuniones destinadas a analizar los anuncios y estimar el real impacto que tendrán en el sector; en concreto, si habrá traslados a los precios de los productos.
“Estamos con una serie de reuniones para determinar a qué tipos de insumos alcanza. Lo estamos analizando”, dijeron en la Asociación de Fabricantes Argentinos de Terminales de Electrónica (Afarte), que nuclea a las empresas que fabrican en Tierra del Fuego.
“No tenemos comentarios”, destacaron desde uno de los principales fabricantes de celulares del país. “Es lógico si hay traslado a precios, aunque no podría decir desde cuándo, lo estamos definiendo. Por ahora, hay Precios Justos hasta agosto”, dijeron desde otro de los grandes del mercado móvil en referencia al plan oficial que sumó este año nuevamente a los smartphones. “Quizás alguna fabricante puede aguantar un poco y no trasladar tanto, es un sector competitivo al que no le gusta tanto subir los precios. Claro, a veces no queda otra”, destacó otro jugador del sector, esta vez vinculado al retail.
“Estamos analizando el impacto”, detallaron desde otra de las empresas que están instaladas en la isla. “Hay que ver si es para bienes de consumo y qué pasa cuando se exportan al continente. También hay resta saber si la medida será para los despachos nuevos y impacta también en los despachos ya ingresados, pendientes de pago por los plazos de las Sira. Lo cierto es que hoy está todo paralizado, en todos los sistemas, no se están haciendo transacciones. El 7,5% no parece tan grave, nos lo tomamos casi con alegría”, ironizó el CEO de la compañía. “En rigor no es una cifra que deja a nadie afuera del juego. Lo que sí pasará que irá todo a precio. ¿Cuánto? Estimamos que un 5 por ciento, que en este contexto inflacionario no parece cambiar mucho”, dijo.
“Por lo que se sabe, se aplicaría el impuesto a las importaciones para Tierra del Fuego. Si es así, lógicamente que subirán los costos y, previsiblemente, los precios. No parece algo de vida o muerte para la producción allí. Quizás hagan traslado parcial inicialmente: no sería un 7,5% directo sobre el costo final, sino sólo sobre los costos en dólares”, aseguró el analista y consultor Enrique Carrier.
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