El Banco Central terminó su participación cambiaria del día con ventas netas por USD 56 millones, la mitad de ellas en dólares norteamericanos -USD 28 millones- y la otra mitad en yuanes -198 millones de yuanes a una tasa de cambio de 7,176 yuanes por dólares-, equivalentes a otros 28 millones de dólares.
A solo una hora de que se abrieran las puertas de la 135° Exposición Rural de Palermo, el campo dejó en claro que es lo que quiere: un cambio del actual modelo productivo. Una docena de entidades, organizaciones e instituciones del sector agropecuario y agroindustrial confeccionaron un documento, al cual después tuvo más de medio centenar de adhesiones, en el cual se propone un cambio de rumbo económico y de políticas aplicadas hacia el agro, que permitirá no solo el despegue de la actividad, sino también transformar la matriz productiva del país “hacia un nuevo modelo de desarrollo” que aumente la producción de granos en un 43%, la de carnes en un 57% y las exportaciones sumen USD 48.800 millones adicionales en solo una década.
El Gobierno adoptará algunas medidas en un contexto de caída de la recaudación tributaria y de las reservas del Banco Central, a la espera del demorado acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La divisa es negociada sin variantes en la plaza informal, a $525 para la venta. El dólar libre sondea esta semana valores récord, tras haber tocado los $527 al promediar la rueda del miércoles.
El déficit comercial ascendió en junio a USD 1.727 millones, el nivel mensual más alto desde que se releva ese indicador clave, informó la consultora Abeceb. En el primer semestre del año ya se computa un desequilibrio de USD 4.387 millones. Es la mayor caída desde agosto de 2009, cuando la Argentina sufría los embates de la caída de precios y la crisis mundial subprime.
Las reservas internacionales brutas del Banco Central restaron USD 264 millones o un 1% el miércoles, a USD 25.498 millones, un mínimo desde el 28 de enero de 2016. En el transcurso de 2023 este stock se desplomó en USD 19.100 millones o un 42,8% desde los USD 44.598 millones del cierre de 2022. Esta pérdida de divisas es comparable a la caída de todo el año 2001, cuando las reservas brutas cayeron en USD 19.002 millones o un 55,5%, desde los 34.234 millones a los 15.232 millones de dólares.
El dólar mayorista gana 85 centavos este jueves, a $268,80 por unidad, unos 85 centavos por encima del cierre anterior. En el último año, el tipo de cambio oficial subió un 107,8% desde los 129,38 del 20 de julio del año pasado. Desde la asunción de Sergio Massa como ministro de Economía, el pasado 3 de agosto, este incremento fue de 103,2%, desde los 132,40 pesos. “El candidato a presidente Sergio Massa devaluó el peso un 50% en menos de un año de gestión”, comentó el analista financiero Christian Buteler.
El Gobierno hizo gala ayer de un nivel de disociación tan llamativo que no es posible descartar que la movida haya sido premeditada. Treinta minutos antes de que el INDEC informara con puntualidad suiza, a las cuatro de la tarde como es habitual, el resultado de la balanza comercial del mes pasado, el Banco Central emitió un comunicado anticipando un abultadísimo resultado positivo…en 2030. Según proyecciones propias, la entidad anunció que desde el próximo año y hasta esa fecha, el superávit comercial se duplicará hasta alcanzar los USD 41.800 millones.
Las negociaciones en Washington se aceleran, pero nada indica que el acuerdo esté a punto de cerrarse esta semana, como había dejado trascender el equipo económico. Las discusiones por estas horas giran en torno a la capacidad de intervención que le quedaría al Gobierno para evitar un salto cambiario, en medio de la continua caída de reservas (ayer fueron otros USD 264 millones) y mayor presión en las cotizaciones de los dólares financieros. Ayer el dólar libre llegó a un récord nominal de $ 525, es decir 5 pesos por encima del cierre anterior.
En los últimos días el Gobierno informó, en base a datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), un salto de la Inversión Extranjera Directa (IED) del 123% en 2022 con ingresos totales por USD 15.408 millones, un monto que superó el récord previo de 2012. Pese a ese dato alentador, un informe privado advirtió que los dólares efectivamente ingresados al país fueron menos de USD 1.000 millones y que el dato difundido se basa en una metodología estadística que, aún sin caer en la manipulación, permite “inflar” los números para mostrar dólares que en realidad no entraron al país. Por el contrario, lo que sucedió fue que los controles cambiarios les impidieron salir.