En sendos operativos realizados en Puerto Iguazú y en Clorinda, localidades de la frontera argentina con Paraguay, la Aduana desbarató operaciones que involucraban el contrabando de vehículos robados y con documentos falsos o ingresados de modo fraudulento. Multas millonarias
En Puerto Iguazú la acción de los agentes aduaneros llevó al secuestro de una camioneta Nissan Frontier robada, valuada en $19.000.000, cuyo conductor intentó cruzar el rodado hacia Paraguay presentando papeles falsos y fue detenido.
En Clorinda, se trató de la detección del uso fraudulento del Régimen de Importación Temporal de Vehículos, lo que permitió la incautación de un Mini Cooper valuado en $14.000.000 y una moto KTM valuada en nada menos $16.000.000. La multa total podría ser de $9.300.000.
Incómodo y nervioso
En Iguazú, agentes especializados que estaban realizando controles de rutina en el Puente Tancredo Neves advirtieron la incomodidad y nerviosismo del conductor argentino de la camioneta de lujo y de alta cotización.
El conductor provenía de la provincia de Buenos Aires y, según declaró, se dirigía a Paraguay. A raíz de la sospecha de los agentes, la consiguiente verificación permitió detectar que la documentación del vehículo era falsa y la patente no era la original, pues su número difería con el grabado de los cristales. El cruce de datos confirmó que el vehículo era robado y tenía un pedido de secuestro, lo que se realizó inmediatamente. Tras lo cual la Aduana informó a la fiscalía y al juzgado Federal de Eldorado, que ordenó la detención del conductor y el secuestro de la camioneta valuada en $19 millones. El caso de robo y contrabando quedó así en manos de la Justicia.
Ingreso fraudulento
En Clorinda, en tanto, en controles en la frontera entre Clorinda y la localidad paraguaya de Falcón, los agentes aduaneros detectaron irregularidades en un auto y una moto de alta gama cuyos conductores intentaban pasar a Paraguay.
Un hombre se presentó en el sector salida de la Argentina en un Mini Cooper modelo Sport 2017, con matrícula paraguaya. Los agentes de la Aduana le solicitaron documentación al conductor del vehículo y constataron que era ciudadano argentino, con residencia en el país, por lo cual había adquirido el vehículo mediante un uso indebido del Régimen de Importación Temporal. Se labró un acto y al hombre le cabría una multa de $4,5 millones.
En el mismo paso fronterizo también fue detectado el caso de una moto de alta gama, marca KTM, modelo Super Adventure 1290/2021, también con matrícula paraguaya y conducida por un ciudadano argentino. La consulta a las bases de datos del organismo permitió constatar que se trataba de otro caso de uso fraudulente del Régimen de Importación Temporal de Vehículos. Al tratarse de una motocicleta valuada en $16.000.000, la multa podría escalar hasta $4,8 millones.
Para qué
Sucede que quien ingresa una mercadería a la Argentina por un plazo determinado y, vencido ese término, no la reexporta, incurre en una falta incumple el régimen de “destinación suspensiva”, tipificada en el código aduanero. La importación temporaria es para agregar valor local y reexportar el bien importado, no para adquirirlo más barato y usarlo como bien final.
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