Los economistas de la oposición negaron haberle pedido al FMI que no le preste dinero al Gobierno

Los economistas referentes de Juntos cruzaron al ministro de Economía y candidato presidencial del oficialismo, Sergio Massa, quien los había acusado de pedirle al Fondo Monetario Internacional (FMI) de que no le girara más dólares al Gobierno.

Los referentes de los precandidatos Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta negaron estas conversaciones, mientras que el FMI se mantuvo en silencio, aunque fuentes en Washington también las relativizaron. Importantes empresarios tampoco se sumaron a la versión de Massa y consideraron que habrá algún acuerdo “light” con el apoyo de EEUU, sin dinero fresco, si el Gobierno accede a algún tipo de devaluación.

Este jueves, Massa afirmó en un acto: “Les voy a contar una intimidad: un funcionario del Fondo en un zoom de la mañana me contaba que hubo economistas de la oposición que en los últimos días se comunicaron y les decían ‘no les den nada’, ‘pídanle todo’, ‘exíjanles al máximo’, ‘esto tiene que estallar’”.

El ministro afirmó que el funcionario del Fondo le dijo: “Qué poco patriotas son tus colegas de la oposición”. Y agregó que se sorprendió ante la idea de que esos políticos, en medio de la campaña, “están dispuestos a que la gente la pase mal”.

Como réplica, en Twitter Hernán Lacunza indicó: “Manual K de política económica Capítulo I: FMI 1. Incumplir todas las metas del acuerdo: déficit fiscal, emisión, reservas 2. Entretener con relatos fantásticos: acuerdos inminentes con fondos frescos millonarios 3. Culpar a la oposición cuando el humo se disipa”.

Luego, el coordinador de los equipos de Rodríguez Larreta indicó: “Capítulo II: dólar 1. Atrasar el dólar para reprimir inflación 2. Entretener con dólar soja, swaps chinos, préstamos BRICS, moneda común con Brasil, 16 tipos de cambio 3. Culpar a especuladores cuando reservas negativas y blue se dispara”.

A continuación, el último ex ministro de Economía de Mauricio Macri indicó: “Capítulo III: inflación 1. Gastar mucho y financiar con maquinita 2. Simular acuerdos de precios cambiando el adjetivo (cuidados, justos, etc.) 3. Culpar a monopolios cuando la inflación se triplica”.

“Capítulo IV: energía 1. Congelar tarifas 2. Sacar fotos a maquetas de gasoductos 3. Culpar a Edesur cuando se corta la luz”, agregó Lacunza.

“Encuentre el patrón en su propio capítulo: transporte, salud, vivienda (alquiler o hipotecario) 1. Incumpla reglas y distorsione precios 2. Entretenga con relato 3. Busque culpables cuando las papas quemen. Tenga a mano sequías, guerras o pandemias”.

Por su parte, el economista líder de Bullrich, Luciano Laspina, disparó: “El ministro Sergio Massa acusa a la oposición de conspirar contra el acuerdo con el FMI. La misma oposición que le dio los votos en 2022 mientras su primer candidato a diputado, Máximo K, y su jefa política, CFK, votaba en contra. Miente, como mintió con el gasoducto”.

“Espero que no haya un solo argentino que vote un candidato a Presidente que miente arteramente y destruye la (poca) reputación de la Argentina en el mundo. La culminación del gasoducto estaba explícitamente prevista en todas las revisiones del FMI”, indicó el diputado nacional por Santa Fe.

En forma anónima, los economistas de la oposición consultados por Infobae negaron las versiones vertidas por Massa y afirmaron que todavía no hubo contactos formales entre Juntos por el Cambio y el staff del organismo que lidera Kristalina Georgieva. En los años electorales, los funcionarios del Fondo se comunican tanto con los candidatos como con sus referentes económicos, pero en ese espacio afirman que por ahora no recibieron una convocatoria del staff para conocer su opinión sobre la continuidad del programa firmado en 2022.

“Es normal que el Fondo hable con la oposición además de hacerlo con el gobierno cuando se acercan las elecciones. Hablaban con Alberto y sus economistas antes de las PASO 2019 quienes en ese entonces pedían que se suspendan los desembolsos”, afirmó un ex funcionario de Macri.

En esta sintonía, Héctor Torres, ex representante de la Argentina en el Fondo, dijo a Infobae: “Que el staff habla con los economistas de la oposición, no tengo dudas”.

“No podría ser de otro modo ya que el staff tiene que recabar distintas opiniones, más aún antes de las elecciones. Pero que el staff no va a informarle al ministro sobre el tenor de esos diálogos tampoco tengo ninguna duda y mucho menos en un zoom”, afirmó el ex funcionario de los gobiernos de Néstor Kirchner y Mauricio Macri.

Otra calificada fuente al tanto de las negociaciones con el FMI explicó desde Washington a Infobae que “el staff no utiliza este tono en conversaciones con un ministro y, en este caso particular, tampoco hay una relación de suficiente confianza como para pensar en algo así”.

Más allá de esta polémica, tanto los economistas locales como en Washington consideraron que el FMI está dispuesto a un acuerdo que le asegure al país un roll over de sus vencimientos del 2023, pero “sin fondos frescos y a cambio de una devaluación, fiscal o monetaria”. Además, indicaron que el gobierno de Estados Unidos avala esta refinanciación, aunque habrá que ver la postura de sus socios europeos y Japón.

Dos empresarios de compañías norteamericanas confirmaron que el gobierno de Joe Biden esta perspectiva. “El acuerdo va a salir y, pese a lo que dice Massa, la oposición lo que pide cuando habla con nosotros es una corrección, no que estalle todo”, indicó uno de ellos.

“Nos consta el apoyo del gobierno de Estados Unidos a la Argentina en la negociación con el FMI, más allá de las cuestiones técnicas que se están discutiendo”, sentenció otro.

Cabe recordar que en 2018, luego de que se firmara el programa entre la Argentina y el FMI, el PJ realizó formalmente este pedido con una carta firmada por el economista y ex secretario de Comercio Guillermo Moreno.

“En mi carácter de presidente de la Comisión de Economía del Partido Justicialista de la República Argentina, tengo el honor de comunicarme con usted para transmitirle la preocupación por la propuesta recientemente hecha pública por el Sr. Presidente de la Nación, Ingeniero Mauricio Macri, manifestando que pretendía negociar con el Fondo Monetario Internacional la posibilidad de que los desembolsos del acuerdo Stand-By oportunamente firmado, correspondientes a los años 2020 y 2021, se adelanten a 2019″, comienza la carta firmada por el ex funcionario, que está acusado por la manipulación de estadísticas en una causa judicial que irá a juicio oral.

La misiva continúa: “Como no escapa a su conocimiento, el año entrante habrá elecciones generales para un nuevo período presidencial. Va de suyo que, de acuerdo con el contrato de mutuo oportunamente firmado, luego ratificado en la exposición presidencial, el actual gobierno sólo se propone alcanzar el equilibrio fiscal en el ítem correspondiente a los ingresos y gastos operativos, manteniendo en las cuentas públicas el déficit que representa el pago de intereses de la deuda soberana”.

“Si a su vez se mantuvieran, como al presente, los mercados internacionales de crédito cerrados, la administración de una sana política económica, por un nuevo gobierno, se verá dificultada al extremo”, agrega.

Por este motivo, Moreno indicaba que designaba al licenciado “Pablo Challú, al Dr. Rafael Perelmiter y al Lic. Guillermo Nielsen, miembros del cuerpo que presido, para que tomen contacto con los integrantes de su staff que usted amablemente designe, a fin de reflexionar sobre la problemática ut supra señalada y su posible resolución”.

En 2019, Alberto Fernández y sus referentes económicos criticaron duramente este acuerdo y anticiparon que lo desconocerían. En junio de ese año Fernández expresó: “El programa económico vigente no es nuestro programa” y consideró que “compromete a nuestro país muy por encima de sus propias posibilidades. Argentina vive desde hace tiempo en un default encubierto que no asoma solo por la ‘asistencia’ del FMI en favor de la continuidad de políticas muy nocivas para el desarrollo argentino”. Luego del triunfo de la fórmula Fernández-Fernández en las primarias, hace casi cuatro años, los activos argentinos se pulverizaron y el dólar se disparó.

Con estas afirmaciones de la fórmula justicialista, el FMI decidió suspender el desembolso que tenía previsto para la Argentina en septiembre del 2019 y esa carencia obligó al gobierno de Macri a adoptar controles de capitales y a dejar de pagar la deuda en pesos. El resto, es historia conocida.

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