A tres años de la vigencia de la Ley de Alquileres sancionada en 2020, un informe de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA) confirmó que en julio vencen 12.800 contratos en la ciudad de Buenos Aires y que el 50% de los propietarios que recibirán la devolución de su inmueble no volverán a destinarlo al mercado del alquiler tradicional.
Del análisis se desprenden que unos 6.400 dueños aceptarán renovar el contrato con el actual inquilino o una extensión del pacto hasta que la persona o familia encuentre otra vivienda para alquilar.
Y las otras 6.400 serán puestas en venta, se adaptarían para alquileres temporarios o directamente permanecerán vacías hasta que los dueños observen que ocurra con el futuro Gobierno nacional. Sobre todo si se avanza en una modificación de la normativa o su derogación y se impulse a través del Congreso nacional otra ley a partir del 10 de diciembre próximo.
Alejandro Bennazar, presidente de la CIA, dijo a Infobae que “la ley complicó a propietarios, inquilinos e inmobiliarios que deben tratar de acercar las partes para poder hacer un contrato de alquiler. Cuesta mucho que se pongan de acuerdo. Antes de la ley había propiedades durante 60 o 90 días esperando un inquilino, hoy es viceversa, los inquilinos deben esperar que aparezca una propiedad y además con un precio razonable”.
Actualmente en CABA, un tres ambientes trepó a más de $200.000 en algunos barrios, pero en ninguno de la ciudad se consiguen por menos de $170.000 más expensas.
El panorama empeoraría
Y desde el Colegio Profesional Inmobiliario (CPI) porteño argumentan que en el segundo semestre del año este cuadro se agravaría porque en CABA seguirán venciendo más de 12.000 acuerdos por mes y cientos de propietarios no van a volver a alquilar si es que la ley no se reformula antes de fin de año.
Por lo cual habrá más gente aún en la búsqueda y en espera para inmuebles que no existen lamentablemente. Esto se da en todo el país, no es un tema local de CABA.
“Es decir que todos los meses habrá una porción importante de inmuebles que dejaran de estar en oferta para alquilar de manera tradicional, lo que contribuye a que sigan aumentando los precios y las dificultades para que miles de personas y familias consigan un techo”, dijo a Infobae Marta Liotto, presidenta del CPI.
Otras situaciones complejas
Agrupaciones de inquilinos también están preocupadas por esta situación que atraviesan miles de argentinos que buscan con desesperación una vivienda para alquilar.
Magalí Zirulnikoff, cofundadora de la Comunidad Federal Inquilina y No Propietaria, destacó que el principal tema de consulta es el precio inicial del alquiler y los requisitos para ingresar que superan las posibilidades económicas de las personas. En algunos casos hay propietarios que piden más del 70% del valor del último mes de alquiler (que ya estaba indexado) para hacer la extensión”.
Representantes de inquilinos recomiendan no busquen alquiler por Internet porque se detectaron muchas estafas.
Algunos propietarios decidieron hace tiempo vender sus propiedades, otros en buenas localizaciones con unidades equipadas optan por destinarlas al alquiler temporario
“La segunda recomendación es que 3 meses antes de la finalización del contrato empiecen la búsqueda y pidan conocer las condiciones de renovación, así tienen tiempo para evaluar qué es más conveniente”, aconsejó Zirulnikoff.
En el sector hay cierto descontrol y, de hecho, hay propietarios que exigen aumentos cuatrimestrales por fuera de ley, algo que es ilegal.
“Además hay otros inconvenientes porque las extensiones de los contratos también influyen en otros rubros que giran en torno al ámbito inmobiliario, como gasistas, electricistas, pintores y albañiles, entre otros. Los dueños no los llaman para hacer arreglos. Nadie invierte, todo se precariza. Hay que modificar la ley cuanto antes”, concluyó Bennazar.
Seguir leyendo: