La cúpula de la Asociación Empresaria Argentina se reunió con Patricia Bullrich

La precandidata de Juntos por el Cambio habló de seguridad jurídica y la necesidad de un ordenamiento macroeconómico. Los referentes del sector privado reclamaron por la inflación y la alta presión tributaria

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"Es necesaria una restauración inmediata del equilibrio fiscal para bajar rápidamente la inflación,” señaló Bullrich ante los directivos de AEA
"Es necesaria una restauración inmediata del equilibrio fiscal para bajar rápidamente la inflación,” señaló Bullrich ante los directivos de AEA

En el marco de un programa de reuniones con precandidatos, empresarios integrantes de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) se reunieron con Patricia Bullrich, precandidata presidencial de Juntos por el Cambio, para conocer sus propuestas e intercambiar opiniones.

Durante el encuentro, Bullrich destacó: “Creemos en un capitalismo de reglas, en la seguridad jurídica, en que la actividad privada tiene que ser mucho más importante que la pública; creemos en las empresas grandes, medianas y pequeñas. Necesitamos tener un país que despliegue sus capacidades de inversión, que defienda lo privado. Hay que desarmar la trampa de las leyes que traban la producción”.

Por otro lado, la dirigente de Juntos por el Cambio consideró que se necesita orden en la economía, sobre todo en los precios, las importaciones y las tarifas, entre otros puntos, para poder entrar en un programa de estabilización cuyo primer objetivo sea la seguridad jurídica, la baja de la inflación y la posibilidad de pensar en el largo plazo. “Necesitamos orden en la educación, en la salud, en las calles, en la seguridad, en la lucha contra el narcotráfico. La extorsión no puede ser la regla. Es necesaria una restauración inmediata del equilibrio fiscal para bajar rápidamente la inflación”, comentó ante los empresarios presentes.

Desde la AEA, su presidente, Jaime Campos, destacó la relevancia de las próximas elecciones a la luz de los 40 años de la democracia recuperada. Además, destacó la importancia de respetar las instituciones de la República y de generar las condiciones para la expansión del sector privado en el país.

Los empresarios nucleados en AEA aspiran a que se implementen políticas que dejen atrás las anomalías que significan la alta inflación y la presión tributaria excesiva sobre el sector formal. A esto sumaron la necesidad de generar medidas contra “la carencia de una moneda respetada, la vigencia de varios tipos de cambio, las restricciones arbitrarias en el comercio exterior y los controles de precios, entre otros temas relevantes”. Campos subrayó que “más desarrollo del sector privado conducirá a más desarrollo económico y social del país”.

En esta oportunidad acompañaron a Patricia Bullrich, Enrique Cristofani, ex presidente de Santander Argentina, Alejandro Föhrig, asesor político y Luciano Laspina, diputado nacional.

Estuvieron presentes por parte de la Asociación Empresaria Argentina: Jaime Campos, Luis A. Pagani, Paolo Rocca, Héctor Magnetto, Sebastián Bagó, Carlos Miguens, Cristiano Rattazzi, Federico Braun, Luis Perez Companc, Eduardo Elsztain, Alberto Hojman, Jorge Aufiero, Charlie Blaquier, Miguel Acevedo, Roberto Alexander, Claudia Álvarez Argüelles, Martín Brandi, Martín Castelli, Claudio Cunha, Enrique Duhau, Teófilo Lacroze, Santiago Mignone, Aldo Roggio, Gustavo Salinas, Amadeo Vázquez, Guadalupe Mazulo y Cecilia Pasman.

Reclamos de largo plazo

Durante su primera reunión del año, la Asociación Empresaria Argentina había destacado la importancia de la división de poderes y la necesidad de contar con una Justicia independiente. Además, ya habían mostrado preocupación por los altos niveles de inflación.

“Es inevitable que Argentina para desarrollarse pretenda alcanzar la normalidad en lo que se refiere a sus políticas económicas. Durante largos años hemos convivido con el flagelo de la alta inflación, con déficits permanentes en las cuentas públicas, con la ausencia de una moneda doméstica respetada, con una muy elevada y distorsionada presión tributaria sobre el sector formal, con cambios permanentes en las reglas de juego, con varios tipos de cambio, con injerencias indebidas en el ámbito propio de las empresas como son los controles de precios, o las múltiples restricciones vinculadas al comercio exterior; por solo nombrar algunas anomalías”, señalaron desde la entidad, a través de un comunicado.

Para resolver esos problemas, aseguraron, se requerirá de un trabajo político y técnico muy arduo y riguroso que no admitirá improvisaciones. “Los beneficios para la Argentina de avanzar decididamente en esta dirección son evidentes, ya que posibilitarán la movilización de las energías del sector privado generando más ingresos, empleos y reduciendo la pobreza”, indicaron.

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