El dólar libre volvió a estar ofrecido y este viernes recortó un peso para la venta, a $483, con lo que regresó al precio del 15 de mayo último, casi un mes atrás. Esta calma para el dólar paralelo, que viene “lateralizando” desde finales de abril, contrastó claramente con el estatus vendedor del Banco Central, que apenas pudo capitalizar la bonanza del dólar soja 3, vigente hasta la semana anterior.
El dólar libre amplió a siete pesos o 1,4% la baja de junio. Con un dólar mayorista que ganó 50 centavos a $244,95, la brecha cambiaria quedó en el 97,2 por ciento.
En una rueda mayorista con un monto operado de USD 318,5 millones en el segmento de contado (spot), las liquidaciones por el dólar agro (a $300 por unidad), a partir de esta semana limitadas a producciones regionales, se redujeron a 13,8 millones de dólares.
“El BCRA terminó la última rueda de la semana con ventas por USD 48 millones para atender la demanda en el mercado”, consignó Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio. La entidad monetaria completó la semana con ventas netas por USD 228 millones, tras resultado negativo en las últimas cuatro sesiones.
El Banco Central registra en lo que va de junio un saldo vendedor de USD 143 millones, que se amplía a USD 2.270 millones en el acumulado de 2023.
El Gobierno negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) la reprogramación de las metas y adelantar desembolsos, luego de renovar y ampliar una línea de “swap” de monedas con China, con la idea de dar margen al banco central (BCRA) para contener la cotización del peso y frenar la pérdida diaria de reservas.
La ronda bursátil de Argentina mostró sesgo alcista este viernes, en sintonía con otras plazas internacionales dada la creciente expectativa de que la Reserva Federal estadounidense haga una pausa en su ciclo de aumentos de tasas de interés en su próxima reunión.
El índice líder S&P Merval porteño ganó un leve 0,2%, a 381.763 puntos, cerca de su máximo histórico intradiario de 388.548 unidades alcanzado durante la sesión previa.
“Con un Merval sin freno, si se busca un motivo claro para el aumento obtenido en el sector financiero en el comienzo de semana principalmente se destacarán los rumores. Cabe recordar que si bien las empresas del sector no presentaron malos balances, el hecho de que sean los mayores tenedores de deuda en nuestro país en un momento en el cual hay escasez de dólares y grandes vencimientos en pesos, deriva en que no sea el sector más elegido por los inversores en busca de disipar ese riesgo”, explicó Ayelen Romero, ejecutiva de Cuentas de Rava Bursátil.
El Gobierno argentino anunció el jueves una aceptación del 78% en su conversión voluntaria de deuda en pesos, con lo que logra desahogar las finanzas públicas en medio de una severa crisis financiera con alta inflación y diaria devaluación.
Los bonos en dólares finalizaron negociados con marginal tendencia bajista del 0,1% en promedio, mientras que el riesgo país de JP Morgan retrocedía cuatro enteros para la Argentina, en los 2.378 puntos básicos a las 17:40 horas.
Los bonos operados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) descendieron un 0,2% en su promedio en pesos, tras recompras lideradas por las nominaciones ligadas a inflación y devaluación, para ganar en la semana un 1,7 por ciento.
S&P Global dijo que con esta operatoria de deuda, Argentina recibía una rebaja de calificación a ”default selectivo”. El país tiene cerrada la financiación con el exterior por los riesgos de su macroeconomía.
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