El Gobierno lanzó este jueves una nueva versión del programa Precios Justos, que estará disponible para los comercios de cercanía, que incluyen almacenes, autoservicios y supermercados chinos. Con el nombre de Precios Justos Barriales, incluye una canasta de productos de consumo básico -alimentos, bebidas, productos de higiene personal y limpieza- que se comercializarán en los comercios más chicos con un precio fijo hasta el 15 de julio y luego un sendero de aumentos de 3,8% mensual.
Si bien el acuerdo está vigente desde hoy para proveedores y mayoristas, la llegada a los pequeños comercios dependerá de temas logísticos de cada sector, pero fuentes oficiales estimaron que deberían estar disponibles para los consumidores a partir de la semana que viene.
En la página web de la Secretaría de Comercio se puede consultar la lista de productos, que tiene variaciones según las distintas zonas del país. En el caso del AMBA, la lista incluye 95 artículos, entre los que se encuentran artículos de almacén como aceite, arroz, cacao, fideos, galletitas, harina, pan rallado, mermelada, cacao, café y té. También hay bebidas (gaseosas, cerveza y agua mineral), lácteos (leche y yogur), productos de limpieza (papel higiénico y jabón líquido), perfumería (champú, desodorante, toallas) y para bebés (pañales descapotables).
“Esta medida tiene por objetivo reactivar el consumo en almacenes y autoservicios y recuperar el poder de compra de los salarios. Además, busca acortar la brecha de precios existente entre los distintos canales de ventas (autoservicios y almacenes barriales versus cadenas de supermercados) que ronda el 34% en el último mes”, destacaron desde la Secretaría.
En este caso, a diferencia de otros acuerdos, los comercios mayoristas -que abastecen a los minoristas- serán una pieza clave. En general, los supermercados más chicos, almacenes y autoservicios no tienen acceso a los proveedores directos de fábrica como sucede con las grandes cadenas.
En tanto, los mayoristas aseguran que el éxito del programa depende del abastecimiento de los productos, que falló en los intentos anteriores de acuerdos de precios para comercios de proximidad. Los comercios más chicos podrán abastecerse a través de las cadenas de supermercados mayoristas a un precio acordado y también a través de algunos proveedores directos. Participan del acuerdo de Precios Justos Barriales las cadenas Diarco, Makro, Maxiconsumo, Micropack, NINI, Parodi, Vital y Yaguar. Y también empresas con distribución directa como Mastellone, Papelera Samseng, Danone y La Virginia, entre otras.
Por eso, hay distintas listas de precios: una que deberán cumplir los mayoristas y otra -donde se incluye un porcentaje o margen de ganancia para el comercio minorista- con los precios de venta sugeridos para el público. Esos precios se van a mantener desde el 1° de junio hasta el 15 de julio y después tendrán un sendero de 3,8% de aumento mensual.
Por ejemplo, el aceite de girasol Cañuelas por 900 ml tiene un precio de salida de fábrica de $202,14; de venta en mayoristas de $325,48 y de venta al público de $376. O el arroz largo fino Molinos Ala por un kilo, que tiene un precio de $249,25 en mayoristas y $332,33 de venta al público.
Este no es el primer intento de lanzar una canasta para comercios de proximidad. Ya hubo uno durante la gestión de Paula Español, con precios fijos impresos en los mismos envases de los productos (Super Cerca), y luego otro con la llegada de Roberto Feletti al frente de la Secretaría de Comercio y el lanzamiento de una lista de 60 productos, con el nombre de “+ Precios Cuidados”. En ese caso, solo estaban disponibles para la zona del AMBA y al poco tiempo los comercios minoristas aseguraban que no podían acceder a la mercadería.
Uno de los fines de la medida es achicar la actual brecha de precios entre las grandes cadenas de supermercados -que están dentro del programa Precios Justos- y los comercios más chicos que hoy no acceden a los acuerdos de precios. Hace tiempo que los relevamientos del mercado advierten que mientras las grandes cadenas de supermercados mantienen números positivos en la comparación interanual, se profundiza la caída de ventas en los comercios más chicos.
El último informe de la consultora Scentia, que releva precios a través de los escáneres de los comercios, mostró que, durante abril, las ventas de consumo masivo tuvieron una caída de 0,3% en comparación con igual mes del año previo. Sin embargo, las ventas de las grandes cadenas de supermercados crecieron 9,4% mientras que las de los comercios de cercanía disminuyeron 8,7% en todo el país.
Ahora, si se toma solo a los autoservicios independientes de la zona del AMBA las ventas se desplomaron un 21% durante el mes pasado, con fuertes caídas en productos perecederos (donde se incluyen los congelados) y productos de limpieza para la ropa y el hogar.
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