De Barwa Barahat a “Barrio Argentino”: la transformación del lugar que albergó 17.000 hinchas albicelestes durante el Mundial de Qatar

Los qataríes quedaron tan asombrados y maravillados con los hinchas argentinos que asistieron a Qatar a alentar a la selección y fueron testigos de su consagraciónen la Copa del Mundo, que las autoridades de Doha decidieron nombrar la zona de Barwa Barahat, en donde se hospedaron 17.000 personas mientras duró el Mundial, que en homenaje a los seguidores del equipo liderado por Leonel Messi pasó a denominarse “Barrio Argentino”.

Fue construido exclusivamente para el mundial para alojar turistas extranjeros mientras que dentro del complejo hay restaurantes y supermercados. Se hicieron al estilo construcción modular. Cada cluster cuenta con 12 departamentos cada uno mientras que los edificios están desarrollados en planta baja y dos pisos de escalera. Son unidades de un dormitorio con aire acondicionado y placar.

Para el mundial no contaban con cocina pero sí con microondas y termotanque eléctrico. El barrio se ubica a una hora del centro de Doha y a 20 minutos de micro de la última estación de la red de subte llamado Al Wakra.

Diego Ferreyra, corredor inmobiliario titular de Diego Ferreyra Bienes Raíces, quien estuvo 18 días en Qatar durante la realización de la Copa del Mundo, destacó que la Argentina y México fueron los países que más hinchas llevaron al Mundial y fueron las naciones más representativas en el Barwa. “A diferencia de otros mundiales, en este certamen tanto el país organizador como la FIFA obligaban la contratación previa de un hospedaje como condición para poder obtener la Visa que permitía ingresar al país de Asia”, dijo a Infobae.

La escasez de viviendas, hoteles y hospedajes para recibir un evento de tal envergadura obligó la construcción de ese tipo de viviendas al igual que carpas y contenedores para alojar turistas.

“Seguramente el destino que tendrá el Barrio Argentino será el de albergar a inmigrantes, muchos de ellos llegan al Qatar en búsqueda de trabajo en la construcción. Sólo el 23% de la población que vive en Doha es de origen qatarí, el resto son extranjeros”, dijo Ferreyra. “Este es el quinto mundial que viajo y en ningún otro anterior se vio la construcción de viviendas para albergar hinchas”, agregó.

Por las características de las viviendas y ubicación seguramente será ocupado por los trabajadores del tipo golondrina que concurren al desarrollo de actividades puntuales.

El mercado inmobiliario qatarí está sostenido por el desarrollo y amplio crecimiento de Doha, la capital, en los últimos 15 años y más aún desde que en 2010 Qatar fue designada como nación organizadora de la Copa del Mundo 2022. La fuerte transformación abarcó la construcción de una gran cantidad de edificios de vivienda nuevos, así como así la de centros comerciales donde se desarrollaron gran cantidad de oficinas Premium muchas de ellas hoy vacías a la espera del desembarco de grandes empresas multinacionales tras la organización de la copa del mundo.

Ferreyra amplió que “uno de los ejes más interesantes del crecimiento de Qatar tuvo que ver entre otras grandes obras de infraestructuras con la creación de su red de Metro subterráneo y la ágil conexión que ofrece el transporte público a todos sus habitantes. Fue inaugurado en 2019 y cubre una distancia de 76 kilómetros”.

El valor de las propiedades en Doha cambia según los barrios y zonas. Un ejemplo en las zonas más buscadas por los extranjeros (incluso los argentinos que viven en Qatar) es La Perla, proyecto insignia de la United Development Company, la principal constructora pública qatarí.

“La isla fue hecha artificialmente por el hombre y para ella se ganaron millones de metros cuadrados al mar. Fue el proyecto urbano modelo, ya que permitió comprar propiedades a los expatriados en Qatar. Los valores de venta allí arrancan desde los USD 300.000 un departamento de 50 metros cuadrados mientras que el alquiler ronda los USD 2.500 mensuales”, detalló Ferreyra.

Ladislao Maciejowski, de 50 años, arquitecto de profesión y oriundo de Rosario llegó a Qatar a principios de 2008. Su esposa se instaló allí a mediados de ese año y los hijos nacieron en Doha. Festejaron mucho la conquista de la Scaloneta, cuyos ecos todavía resuenan en las calles de Doha.

“El mercado de alquileres es muy activo y amplio, ya que la mayoría, por no decir todos, los extranjeros viven en alquiler. Como referencia, el precio varía mucho de acuerdo a los ingresos. Los profesionales que viven en la Perla pueden pagar por un departamento USD 4.000 por mes por 3 habitaciones. Pero, hay posibilidades de encontrar viviendas mas baratas, en el caso del Barrio Argentino una vivienda podría estar por los USD 1.300 al mes por 3 habitaciones”, detalló Ladislao quien tiene una empresa de arquitectura e interiorismo especializada en hotelería y mercado residencial.

El mercado inmobiliario es casi exclusivo para los qataries, solo algunas zonas son libres a extranjeros para comprar. Esto es menos del 0,5% del mercado, aunque está aumentando.

Las zonas de compra para extranjeros están bien definidas, quizás las conocidas son el Lusail y la Perla. Sin embargo, son pocas las viviendas ofrecidas y también muy caras.

Ladislao señaló que “aunque su precio varia de acuerdo con las calidades de cada vivienda, se pude decir que el precio en la zona de La Perla se empieza en USD 4.500 m2 y pude llegar a USD 8.000 por m2”.

Para que una vivienda sea identificada para extranjeros tiene que cumplir requisitos como:

- 2 habitaciones - Igual o mayor a 120 m2 cubiertos para familias de no mas de 2 hijos.s)

- 2 habitaciones - Igual o mayor a 120 m² cubiertos para familias de no mas de 2 hijos.

- 3 habitaciones - Igual o mayor a 135 m2 cubiertos para familias de no más de 4 hijos.

Y en Qatar hay distintos tipos de contratos de alquileres pero lo normal es que duren entre 1 y 2 años.

Ladislao, dijo que la intención es poder regresar a la Argentina algún día. “Siempre se quiere volver, pero en esta etapa de vida Qatar es nuestro hogar”, señaló.

Doha no es solo viviendas de lujo también hay para clase media y estándar, para ello el Estado juega un rol fundamental con su política de fomento de créditos hipotecarios. Cualquier extranjero con empleo y residencia puede acceder a un plan de hasta USD 500.000, el mismo puede variar para construcción o bien la compra de un inmueble usado.

“Los extranjeros que van por trabajos temporales o específicos son principalmente inquilinos, ahora aquellos que viven en países limítrofes y cuentan con la residencia terminan siendo propietarios a través de las herramientas crediticias que ofrecen los bancos”, concluyó Ferreyra.

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