Las liquidaciones de dólar soja a un tipo de cambio de $300 se incrementaron este jueves a USD 162,9 millones, un 68% más que el miércoles, aunque el Banco Central pudo retener solo USD 11 millones por su intervención cambiaria. Sucede que la entidad compró en su totalidad el stock a ese tipo de cambio preferencial, pero revendió unos USD 153 millones (al tipo de cambio oficial de $229,05) en la plaza mayorista, con lo que consumió el saldo a favor.
En línea con el empeoramiento de las expectativas de inflación recabadas en el relevamiento que realiza mensualmente el Banco Central entre analistas locales, que se difundió el viernes pasado y marcó un aumento de 16 puntos porcentuales respecto a la medición anterior, también entre los bancos de Wall Street dan cuenta del deterioro de las perspectivas para la economía argentina. No sólo pronostican una aceleración de la inflación, en la que la corrida cambiaria de fines de abril sumaría hasta 3 puntos porcentuales al indicador de este mes, sino también un claro retroceso de la actividad económica.
La divisa “blue” amplía a tres pesos el alza diaria en el reducido mercado paralelo, a $475 para la venta. Se trata del precio más alto para el billete informal desde el 25 de abril.
De cara a las elecciones, y con el objetivo de dar solución a los problemas económicos que sufre la Argentina, Martín Redrado explicó cuál debería ser la estrategia a utilizar por el próximo gobierno para sacar al país de la crisis: “Ni la dolarización ni el control de precios, un programa económico responsable. La dolarización es irrealista, le doy la bienvenida al debate de ideas, pero preguntémonos si resuelve los problemas de la argentina”.
La cotización “blue” gana un peso en el día a $473 , con lo que regresa a precios del 2 de mayo. También avanzan los dólares alternativos negociados en la Bolsa: el “contado con liqui” gana dos pesos, a $443, y el dólar MEP sube tres pesos a $436, en ambos casos a través del Global 2030 (GD30) en sus especies “C” y “D”, respectivamente, en el segmento PPT (Prioridad Precio-Tiempo) de ByMA, donde interviene el Banco Central.
El analista Salvador Di Stefano señaló que “el Gobierno se alinea con el FMI, la tasa de devaluación aumenta más que la tasa de interés y la inflación. La economía real versus las expectativas de mercado”. Y detalló que “el Ministerio de Economía cambió el orden de prioridades, mientras que en enero y febrero del año 2023 el peso se devaluó a un ritmo del 5,5% mensual, en marzo al 6,0% mensual y en abril al 6,5% mensual, en el mes de mayo se está devaluando a un ritmo del 8,3% mensual, esto habla a las claras que el gobierno cambió las preferencias y ahora busca un tipo de cambio más alto”.
Aunque el pronóstico respecto del dato de inflación que mañana dará a conocer el INDEC es malo, el Banco Central no tomará ninguna medida de relevancia hoy en su habitual reunión de directorio. Al menos, no avanzará en modificaciones en la tasa de interés de referencia, que se ubica en 91% tras una suba de 13 puntos porcentuales el mes pasado para contener la disparada de los dólares financieros.
El dólar sube 50 centavos en el mercado mayorista, donde se cursan las operaciones del comercio exterior, a 229 pesos. En lo que va de 2023, el tipo de cambio oficial sube 51,48 pesos o un 29,3 por ciento.
Tras la firma del acuerdo que permitió a la Argentina utilizar yuanes para pagar importaciones provenientes de ese país, son cada vez más empresas que ya están gestionando operaciones en esa moneda y/o averiguando en distintos bancos comerciales cómo es el mecanismo.
Poco después de asumir al frente del Ministerio de Economía, Sergio Massa, anunció que no iba a hacer más uso de la asistencia monetaria del Banco Central para financiar el déficit fiscal. Y si bien la emisión volvió en 2023, la realidad es que se trata de montos que no son lo suficientemente relevantes para expandir en demasía la Base Monetaria, que es la cantidad de dinero con la que funciona la economía.