La protesta de los trabajadores del Registro de la Propiedad Inmueble de la provincia de Buenos Aires sigue activa. Se cumplieron más de dos meses de reclamos por lo cual el mercado inmobiliario bonaerense sigue sufriendo la demora en la expedición de informes, certificados e inscripción de las escrituras. Lo peor es que, por ahora, está lejos de resolverse.
Inquilinos, propietarios, quienes venden su inmueble y quienes los compran ven demorados sus pactos porque desde la entidad ubicada en Avenida 44 entre calles 4 y 5 de La Plata entregan en cuenta gotas los trámites que requieren escribanos e inmobiliarios de los 135 distritos de la provincia para avanzar en los contratos de alquiler y las escrituras por compraventa de propiedades.
Se estima actualmente que hay más de 1.500 alquileres en espera -en momentos que está difícil acceder a una vivienda por la escasez existente- y más de 4.000 operaciones donde deben firmarse las ventas. En marzo se hicieron 6.635 escrituras en territorio bonaerense, y podrían haber sido más porque el conflicto ya estaba en marcha y se agravó a partir de abril.
También hay problemas con los informes de inhibición o anotaciones personales, que señalan si el titular del inmueble está libre de restricciones para disponer de sus bienes y con la documentación de los inmuebles ofrecido en garantía
Las medidas de fuerza que realizan los trabajadores aplazan la entrega de informes de dominio que reflejan el estado del inmueble en cuanto a su disponibilidad, si tiene alguna medida cautelar, como puede podría ser un embargo, o si está hipotecado, quienes son sus titulares, si hay alguna limitación que tener en cuenta.
El por qué del conflicto
Actualmente hay 1.000 trabajadores en el Registro y tres gremios intervinientes: Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Asociación Empleados de Rentas e Inmobiliaria (AERI), y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN).
Las protestas no son sólo por la recomposición salarial sino también los trabajadores exigen el respeto a la jerarquización. Además, reclaman un mayor porcentaje que debe deducirse por la llamada Ley Convenio, porque el Registro es un ente recaudador y de lo que embolse este organismo una comisión se destina hacia los trabajadores y entienden que esa suma debería ser mayor a la que reciben actualmente ya que, aducen, que está desactualizada. Esta dependencia depende del Ministerio de Hacienda de la gobernación.
En más de 70 días que lleva el conflicto las distintas acciones de los trabajadores incluyeron retenciones de tareas y protestas en la vía pública.
Por otro lado, una gran parte de los trabajadores rechazan el accionar de los gremios porque sienten que no representan sus intereses y por asambleas pidieron ser recibidos por la dirección del Registro, y sólo una vez lo lograron. “Luego recibimos un comunicado interno diciéndonos que todo estaba bien y que las negociaciones salariales marchaban por su carril normal”, dijo a Infobae una vocera de los trabajadores.
A través de un comunicado, la Cámara Inmobiliaria de la Provincia de Buenos Aires (CIBA) expresó su preocupación y llama a reveer la actitud del personal de todas las Delegaciones del Registro de la Propiedad Inmueble. “Son múltiples los casos en los 135 partidos de la amplia geografía de nuestra provincia, en los que hay inquilinos que por diversos motivos debían haber restituido los inmuebles que alquilaban e ingresado ya a los nuevos domicilios, viéndose impedidos por la actitud del personal de Registro que tiene cautivos y rehenes a miles de personas que nada tienen que ver su problema”, dijo a Infobae Mirta Líbera, titular de la entidad.
Similares inconvenientes padecen otros profesionales como los escribanos públicos y los abogados, junto con sus clientes. Juan Carlos Donsanto, presidente del Colegio Público de Martilleros y Corredores de la Provincia de Buenos Aires, explicó a Infobae que “la demora es grave sobre todo en los alquileres. Cuando solicitamos informes hay una gran atraso y el plazo máximo es de 15 días para que se venzan. Eso perjudica a los inquilinos que deben hacer malabares para acceder a una vivienda por la escasez de oferta”.
Opinión notarial
Las medidas que dificultan el funcionamiento de la dependencia y afectan de manera importante la prestación del servicio registral, son motivo de preocupación por parte de las autoridades del Colegio de Escribanos bonaerense, desde donde continúan realizando un seguimiento permanente de los hechos.
El Registro de la Propiedad Inmueble tiene como función principal inscribir los títulos por la transmisión de derechos reales a los efectos de su publicidad frente a terceros. También se inscriben allí las medidas cautelares judiciales. Esto además se complementa con el servicio de publicidad registral. Es decir, se lleva el registro jurídico en lo que se refiere a todos los inmuebles de la provincia de Buenos Aires.
Diego Leandro Molina, presidente del Colegio que nuclea a los escribanos bonaerenses, dijo a Infobae que “este tipo de medidas afecta tanto la venta de inmuebles como el mercado de alquileres y sus respectivas garantías. Hay una caída en el mercado de alquileres, boletos de compraventa y escrituras correspondientes”.
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