Para evitar sumar presión a la inflación, el Gobierno volvió a postergar la suba del impuesto a los combustibles

Por decreto, los incrementos impactarán en el mes de julio. El Poder Ejecutivo justificó la decisión “con el fin de asegurar una necesaria estabilización y una adecuada evolución de los precios”

El Gobierno volvió a postergar la suba del impuesto a los combustibles

La inflación de febrero fue del 6,6% y las proyecciones para marzo indican que sería aún más alta, rondando el 7%. La escalada de precios se visibiliza de la peor manera en el aumento de la pobreza al 39,2% que comunicó ayer el Indec. Comenzando la campaña electoral, el Gobierno necesita poner paños fríos a la situación y para no sumar mayor presión a la inflación, decidió volver a postergar la suba de un impuesto a los combustibles.

A través del Decreto 168/2023, publicado este viernes en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo Nacional resolvió que el aumento del impuesto a la nafta y el gasoil que debía aplicarse en los próximos días se posterga hasta julio.

“Establécese que los incrementos en los montos de los impuestos fijados en el primer párrafo del artículo 4°, en el inciso d) del artículo 7°, ambos del Capítulo I, y en el primer párrafo del artículo 11 del Capítulo II, todos ellos del Título III de la Ley N° 23.966, texto ordenado en 1998 y sus modificaciones, que resulten de las actualizaciones correspondientes al tercer y cuarto trimestres calendario del año 2021, al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres calendario del año 2022 y al primer trimestre calendario del año 2023, en los términos del artículo 7° del Anexo del Decreto N° 501/18, surtirán efectos para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil a partir del 1° de julio de 2023, inclusive”, reza el artículo 1 del decreto que lleva la firma del presidente Alberto Fernández; el jefe de Gabinete, Agustín Rossi; y del ministro de Transporte, Diego Giuliano.

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La norma, sancionada en 1998, a la que se hace referencia, creó un tributo que se suma al precio de los combustibles líquidos y el gas natural, con el argumento de financiar fondos de Viviendas e infraestructura en todo el país. Impone montos fijos que se calculan sobre unidades de medida de los productos derivados de petróleo y que se van actualizando en función de la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide INDEC.

Desde el primer trimestre de 2021, el gobierno nacional tomó la decisión de suspender la aplicación de ese tributo, observando que de esta forma se podía aminorar el aumento sistemático de los combustibles en un marco de inflación generalizada. La crisis se fue agudizando.

La modificación regirá hasta el 1 de julio (EFE/David Fernández)

Pese a que el precio de las naftas, el gasoil y otros derivados tienen previstos nuevos aumentos, la aplicación del impuesto de la ley 23.966 haría que la suba sea mayor. Eso es lo que busca evitar el Gobierno Nacional con las prorrogas establecidas.

En diciembre se postergó el último incremento hasta el 31 de marzo, por lo que a partir de mañana -si el Poder Ejecutivo no intervenía- podía aplicarse. “Debe tenerse en cuenta que tratándose de impuestos al consumo, y dado que la demanda de los combustibles líquidos es altamente inelástica, las variaciones en los impuestos se trasladan en forma prácticamente directa a los precios finales de los combustibles”, se planteó en los considerando del decreto publicado esta madrugada y se justificó la medida “con el fin de asegurar una necesaria estabilización y una adecuada evolución de los precios”.

¿A cuánto podrían aumentar los precios en el surtidor si en el mes de julio el Gobierno decide no postergar más la suba de los impuestos? Según un cálculo realizado semanas atrás por la consultora Energy Consilium entre ICL e IDC se podría incrementar $37 por litro en el caso de las naftas y $23 por litro en el caso del gasoil. El porcentaje dependerá del tipo de combustible (premium o normal) y del lugar del país.

Por su parte, la consultora Economía & Energía, estimó que la aplicación del impuesto implica un 12% de incremento en naftas y 8% en gasoil.

Más allá de la postergación de los impuestos, aún hay incertidumbre sobre qué pasará con los precios de la nafta y el gasoil a partir de abril y durante el resto del año. La expectativa del Gobierno es que haya una renovación del acuerdo de Precios Justos, que se había firmado por cuatro meses. Una versión, aun no confirmada, es que haya una renovación del acuerdo por cinco meses y un 3,5% de aumento mensual.

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