La inflación, el precio de los alquileres y la caída del consumo generaron un fuerte cierre de supermercados de origen chino

En el canal de autoservicios, comercios de cercanía y locales de origen asiático del Área Metropolitana la caída en ventas fue de 10,2% durante el mes de febrero, según relevamientos privados. Más de 200 locales se fueron de CABA

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"Buscamos nichos para subsistir y bajamos márgenes porque hace 34 años que estamos en la Argentina, pero el Gobierno nos dejó afuera de Precios Justos", aseguran desde la cámara que nuclea a locales chinos (EFE/Juan Ignacio Roncoroni/Archivo)
"Buscamos nichos para subsistir y bajamos márgenes porque hace 34 años que estamos en la Argentina, pero el Gobierno nos dejó afuera de Precios Justos", aseguran desde la cámara que nuclea a locales chinos (EFE/Juan Ignacio Roncoroni/Archivo)

La combinación de caída en el consumo en un a contexto de alta inflación y la brecha de precios con las grandes cadenas de supermercados hacen cada vez más compleja la supervivencia de los autoservicios de origen chino.

Según datos del sector, unos 200 habrían cerrado en lo que va del año en distintos puntos del AMBA.

Muchos de ellos se trasladan a otras zonas del país o incluso a otros países de la región, como Paraguay, Bolivia, Perú, Chile y Ecuador. Los cierres en el sector comenzaron en la época de la pandemia pero la tendencia se mantuvo.

“Hay 200 cierres, es verdad, aunque muchos de ellos se están tratando de reubicar”, confirmó Yolanda Durán, presidenta de Cedeapsa, la Cámara Empresarial de Desarrollo Argentino y Países del Sudeste Asiático.

“De esa cifra, un poco más del 10% ya son cierres definitivos. Con el resto estamos trabajando para que traten mudarse. La inflación y los alquileres altísimos en CABA generaron estos cierres. Vamos a las fronteras porque nuestros productos están baratos y viene gente de los países vecinos a comprar. El cambio les conviene. Buscamos nichos para subsistir y bajamos márgenes porque hace 34 años que estamos en la Argentina, pero el Gobierno nos dejó afuera de Precios Justos”, agregó la representante de los comercios chinos.

“Hay 200 cierres, es verdad, aunque muchos de ellos se están reubicando” (Durán)

Los números de febrero para la venta de productos de consumo masivo -alimentos, bebidas, higiene y limpieza del hogar- mostraron una tendencia a la baja. El mes pasado, la caída fue de 1,1% y como resultado el acumulado del año quedó con un descenso de 1,4%, según los datos de la consultora Scentia que releva precios tanto en grandes cadenas como en los pequeños comercios de cercanía.

Pero la caída no fue pareja: las ventas en los autoservicios y supermercados de origen asiático cayeron un 8,9% en comparación con febrero del año pasado, mientras que los grandes supermercados mantuvieron su tendencia positiva con un crecimiento de 8,3% en el mismo período. Si se toman sólo los autoservicios y supermercados de origen asiático de la zona del AMBA la caída fue de 10,2 por ciento.

Este fenómeno con una amplia brecha con comercios en alza y otros en caída se explica por las bases de comparación con respecto a febrero del año pasado -cuando la situación era inversa- y también, en gran medida, por la acentuada diferencia de precios, según el informe de Scentia.

Una de las explicaciones por la mayor caída en los comercios de cercanía es la aplicación del acuerdo de Precios Justos, el programa oficial de precios que solo abarca a las principales cadenas de supermercados, que según fuentes del sector representan un 30% del mercado total.

Además de la lista de casi 2.000 productos con precios fijos hasta junio que forman parte del acuerdo, también hay un tope de 3,2% mensual para los aumentos del resto de los productos comercializados por las empresas y cadenas que firmaron el convenio.

En cambio, en los comercios de cercanía, los aumentos que aplican las empresas pueden ser más altos, lo que incrementa el nivel de diferencia de precios. En la Secretaría de Comercio analizan que puede existir una “rentabilidad cruzada” de las compañías, que suben por fuera del acuerdo para obtener la rentabilidad que pierden por participar del programa.

“La captación de consumidores por parte del canal supermercados, provenientes de otros canales, también da más claridad a este contexto”, señalaron en Scentia.

Las ventas en los autoservicios y supermercados de origen asiático cayeron un 8,9% en comparación con febrero del año pasado

Por rubros, las principales caídas en febrero se dieron en las categorías de limpieza de la ropa y del hogar (8,6%) y productos impulsivos, como golosinas y snacks (5,5%). En tanto, los únicos rubros que registraron números positivos fueron bebidas sin alcohol, con 7,9%, y congelados, con 0,6 por ciento. Si se toma solo a los autoservicios, hay caídas de 15,8% para productos para la limpieza de la ropa y el hogar, de 14,4% para higiene y cosmética y 13,9% para bebidas con alcohol.

Según un análisis de la consultora Ecolatina, desde la puesta en marcha del programa de Precios Justos, la diferencia entre los aumentos de precios en los distintos canales -suerpermercados o autoservicios- es notable: por ejemplo, en el canal tradicional (comercios pequeños) el agua creció 10 puntos porcentuales por encima del canal moderno (super e hipermercados); los fideos, 9 puntos; la leche, 7 puntos y los yogures, 6 puntos.

“Esta brecha entre los aumentos de productos de consumo masivo incluidos en Precios Justos que se venden en supermercados y los que se consiguen en comercios de cercanía o pequeños autoservicios implica un impacto más severo sobre los sectores más vulnerables”, explicaron desde la consultora.

Según la última Encuesta de Gasto de los Hogares los hogares del 10% de menores ingresos destinan sólo el 15% de sus gastos en alimentos y bebidas al canal moderno (grandes cadenas), mientras que ese porcentaje crece a 45% en los hogares del 10% de mayores ingresos.

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