Las acciones y los bonos de Argentina operaron este lunes con fuertes quebrantos, afectados por la aversión al riesgo global derivada en las dudas sobre el sistema bancario estadounidense luego de la quiebra del Silicon Valley Bank (SVC).
Los precios del petróleo cayeron más de un 2% en una sesión volátil el lunes, ya que el colapso de Silicon Valley Bank (SVB) sacudió los mercados de acciones y generó temor a una nueva crisis financiera, aunque la recuperación de la demanda china brindó cierto apoyo.
Los futuros del crudo Brent descendieron 2,01 dólares, o un 2,43%, a 80,77 dólares el barril. El contrato de referencia mundial tocó un mínimo de sesión de 78,34 dólares, su precio más bajo desde principios de enero.
Los futuros de crudo del West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos cedieron 1,88 dólares, o un 2,45%, a 74,80 dólares el barril. El WTI cayó previamente a 72,30 dólares, un mínimo desde diciembre.
Las autoridades de Estados Unidos tomaron medidas de emergencia el domingo para reforzar la confianza en el sistema bancario por el temor a que la quiebra de Silicon Valley Bank provocara un contagio y una venta masiva de activos estadounidenses a fines de la semana pasada.
Con información de Reuters
La mayoría de la bolsas anotaban pérdidas el lunes, en medio de una mayor aversión a los activos de riesgo, ante preocupaciones por las repercusiones que pueda tener en el sistema financiero la quiebra del Silicon Valley Bank (SVB).
Las bolsas europeas registraron el lunes su mayor caída diaria del año, arrastradas por los valores bancarios, a pesar de la intervención de las autoridades para limitar las consecuencias de la repentina quiebra de Silicon Valley Bank.
El índice paneuropeo STOXX 600 cerró la jornada con un descenso del 2,3%, y los valores bancarios, financieros y de aseguradoras, junto con los energéticos, sufrieron las mayores ventas.
Los valores bancarios europeos cayeron un 5,7%, registrando su peor caída en dos días desde que estalló la guerra entre Rusia y Ucrania a principios del año pasado.
Los movimientos de aversión al riesgo llevaron a las acciones de Credit Suisse a caer un 9,6%, hasta un nuevo mínimo histórico. El alemán Commerzbank se desplomó un 12,7%, el francés Societe Generale y el español Sabadell cayeron un 6,2% y un 11,4%, respectivamente. HSBC cayó un 4,1% después de que el banco británico adquirió la filial británica de SVB por 1 libra, rescatando así a un prestamista clave para las nuevas empresas tecnológicas en Reino Unido.
Con información de Reuters
Los principales índices bursátiles estadounidenses subieron a lo largo de la mañana, con la mayoría de los sectores al alza y superando la fuerza bajista que todavía ejercen las acciones del sector bancario.
El S&P 500 subió un 1% a mediodía del lunes en Nueva York, tras haber perdido casi un 1,4% en su mínimo de la sesión anterior. El índice tecnológico Nasdaq Composite subió un 1,3%, tras revertir el curso, pero el Russell 2000, que sigue a las acciones menos operadas, bajó un 0,3%.
El sector financiero fue el peor parado del S&P 500, con un descenso del 3,1%, seguido de la caída del 0,4% del sector energético. Todos los demás sectores registraron ganancias, encabezadas por el 3% de los servicios públicos.
Los bonos del Tesoro se mantuvieron firmes, ya que sus rendimientos se mantuvieron por debajo del nivel de cierre del viernes.
Las acciones de los bancos iniciaron la jornada con volatilidad en Wall Street, sacudidos por la preocupación de que la mayor quiebra de un banco estadounidense en casi 15 años pueda tener repercusiones en todo el mundo.
Cada crisis genera una oportunidad suele repetirse en el mercado. Pues bien, según explicó Business Insider, “algunos vendedores de eBay han sacado a subasta productos con el logotipo del Silicon Valley Bank tras la quiebra de este banco la semana pasada”.
Las acciones de First Repúblic Bank y las de otros tres bancos pequeños, “regionales”, de los Estados Unidos dejaron de operar hoy en Wall Street. La interrupción de la cotización es una medida habitual de los administradores del mercado de valores de Nueva York cuando los precios de una acción muestran variaciones extremas.
El “llamado a plaza”, como se conoce en la jerga a la detención de las operaciones, busca frenar el derrumbe de un activo para dar tiempo al mercado para digerir noticias potencialmente disruptivas y a las empresas y reguladores a tomar medidas para frenar una corrida, antes de volver a permitir la operación.
Al momento de la detención de los negocios, la acción de First Republic había perdido 75,71% en el día.
El llamado aplaza también abarcó a las acciones de Pacwest Bancorp, que caían 47,53% en la rueda, a Zions Bancorp, perdía 19,98%, y a Regions Financials Corp., que se desplomaba 11 por ciento.
El riesgo de contagio a otros bancos del colapso de Silicon Valley Bank y Signature Bank es lo que están tratando de evitar las autoridades estadounidenses al garantizar todos los depósitos de esas dos entidades.
El presidente Joe Biden dijo el lunes a los residentes en Estados Unidos que los sistemas financieros del país son sólidos, tras la rápida y sorprendente quiebra de dos bancos que hizo temer una convulsión más amplia.
El viernes el Estado de California cerró las operaciones de Silicon Valley Bank (SVB), en medio de una corrida contra sus depósitos. El domingo, el estado de Nueva York decidió los mismo con Signature Bank, otro banco de fuerte impronta tecnológica golepado por la marea de desconfianza.
Al momento del cierre de sus operaciones, SVB manejaba activos por USD 209.000 millones. Por su parte, Signature Bank controlaba USD 118.000 millones. Se trata, en ese orden, del segundo y tercer mayor fracaso de la historia financiera estadounidense. Y ambos ocurrieron en pocas horas.
Para encontrar una quiebra más grande en el sistema financiero americano hay que remontarse a una fecha que da escalofríos a los inversores -y a los gobiernos- de todo elm mundo. El mayor banco en caer fue Washington Mutual, en plena crisis subprime de 2008, con activos por USD 307.000 millones en su momento.
Los mercados de Argentina caen de manera generalizada este lunes por una fuerte ola vendedora, en línea con el derrumbe de las plazas externas tras la especulación con mayores alzas en las tasas de interés estadounidenses por datos de empleo.
Los bancos lideraron las caídas del mercado bursátil estadounidense en las primeras operaciones, ante la preocupación de los inversores por las consecuencias de la quiebra del Silicon Valley Bank y los esfuerzos de los reguladores por apuntalar el sistema bancario.
El índice S&P 500 perdía alrededor de un 0,6% poco después de la apertura, y sólo los sectores más defensivos, como la sanidad, los bienes de consumo básico y los servicios públicos, registraban ganancias. El Nasdaq Composite, con un fuerte componente tecnológico, bajaba un 0,5%.
Las acciones de los bancos regionales sufrieron fuertes caídas. La caída del 65% de First Republic, el desplome del 39% de Zions Bancorporation y el desplome del 32% de Comerica fueron los tres peores resultados del S&P 500.
Los bancos más grandes, como JPMorgan Chase, Bank of America y Wells Fargo, cayeron entre un 2% y un 7%.
El rendimiento de los bonos del Tesoro de los Estados Unidos se desplomó. La tasa de los bonos a 10 años cayó al 3,48% el lunes por la mañana, mientras que en la parte delantera de la curva de rendimientos, los rendimientos a dos años, cayeron al 4,17 por ciento.
Las turbulencias del mercado a raíz de la quiebra del Silicon Valley Bank (SVB) llevaron a los inversores a especular con la posibilidad de que la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) no suba las tasas de interés en 50 puntos básicos este mes. La atención se centrará ahora en los datos de inflación del martes para calibrar hasta qué punto es probable que la Reserva Federal se muestre agresiva.
El mercado estima ahora en casi un 60% la posibilidad de que la Fed mantenga su tasa actual y en torno a un 40% la posibilidad de una suba de 25 puntos básicos. En cambio, antes del colapso del SVB, el mercado valoraba en un 70% la posibilidad de una suba de 50 puntos básicos.
Los analistas de Goldman Sachs fueron explícitos en esto. Dijeron el domingo que ya no esperan que la Fed suba las tasas de interés en su reunión del 22 de marzo próximo, a la luz de las recientes tensiones en el sector bancario.
Goldman esperaba con anterioridad una suba de 25 puntos básicos en la reunión de marzo, mientras que el consenso del mercado apuntaba a una alta probabilidad de que la suba fuera de 50 puntos básicos.
Los reguladores estadounidenses informaron el domingo de que los clientes de Silicon Valley Bank y Signature, dos bancos que fueron cerrados en las últimas horas, tendrán acceso a todos sus depósitos a partir del lunes, y crearon un nuevo mecanismo para que los bancos puedan acceder a fondos de emergencia. La Fed también facilitó a las entidades la obtención de préstamos en caso de emergencia.
Los analistas de Goldman dijeron que esperan que las medidas adoptadas por los reguladores proporcionen una liquidez sustancial a los bancos que se enfrenten a salidas de depósitos y mejoren la confianza entre los depositantes.
Las monedas de refugio, como el yen japonés y el franco suizo, se beneficiaron de las repercusiones del SVB.
El yen se apreció un 1,5%, hasta 133,03 por dólar, su nivel más alto en casi un mes, mientras que la divisa estadounidense cayó un 0,8% frente al franco, hasta 0,9140.
Por su parte, el euro subió un 0,29%, hasta 1,0670 dólares, tras haber alcanzado un máximo de casi un mes, 1,0737 dólares, antes de la reunión de política monetaria del Banco Central Europeo del jueves.
El gobierno de Estados Unidos afirmó este domingo que rescatará a los depositantes pero no al banco Silicon Valley que quebró la semana pasada luego de una serie de maniobras financieras.
Las acciones de bancos europeos recibieron un duro castigo este lunes, a la espera de la apertura de Wall Street, como resultado del colapso de Silicon Valley Bank (SVB) en Estados Unidos. Credit Suisse encabeza las bajas con un desplome que llegó al 14%, después de varios trimestres de malos resultados, pero también entidades consideradas más sólidas sintieron el golpe.
El Dollar Index, que mide el valor del dólar estadounidense frente a una canasta de divisas como el yen japonés, la libra esterlina, el dólar canadiense, la corona sueca y el franco suizo, cayó un 0,58%, hasta 103,54, después de que dos importantes bancos estadounidenses, el Silicon Valley Bank y el Signature Bank, se hundieran dejando varados miles de millones en depósitos en riesgo.
La debilidad del valor de la moneda estadounidense a nivel global impulsó al alza a valores de materias primas, como el petróleo. El crudo Brent, de referencia internacional, cotizaba a 83,03 dólares por barril a las 9.59 hora local (0659GMT), un 0,30% por encima del precio de cierre de 82,78 dólares por barril de la sesión anterior.
Al mismo tiempo, el West Texas Intermediate (WTI), referencia estadounidense, cotizaba a 76,91 dólares el barril, un 0,29% más que el cierre de la sesión anterior, a 76,68 dólares el barril.
El descenso del valor del dólar estadounidense contribuyó a la subida de los precios del petróleo al hacer más atractivas las operaciones para los compradores de crudo que utilizan otras divisas.
La caída del Silicon Valley Bank (SVB), que es la primera de una entidad desde 2008 y está considerada la segunda más importante en la historia norteamericana, despertó todas las alertas.
El presidente de EEUU, Joe Biden, se comprometió este domingo a hacer “rendir cuentas” a los responsables de la quiebra del Silicon Valley Bank y de una segunda institución financiera, Signature Bank, al tiempo que trató de tranquilizar a los estadounidenses sobre la seguridad de sus depósitos.
Bitcoin y otras criptomonedas se dispararon el lunes, más que recuperándose de las pérdidas registradas desde fines de la semana pasada en medio de una crisis de confianza en todo el sector bancario de Estados Umidos.
El precio de Bitcoin subió un 7,5% en las últimas 24 horas hasta acercarse a los USD 22.100, su nivel más alto desde principios de la semana pasada.
Bitcoin se había desplomado hasta los USD 19.600 en las operaciones de los últimos días, impulsado a la baja por el temor generalizado a la inestabilidad financiera global después de que el gobierno estadounidense cerrara el Silicon Valley Bank el viernes y la stablecoin USD Coin (USDC) perdiera su vinculación al dólar durante el fin de semana.
La criptomoneda número uno retomó las alzas el domingo, incluso después de la noticia de que Signature Bank también había sido cerrado por los reguladores, el segundo gran banco de la criptoindustria que se pierde en una semana tras la quiebra de Silvergate Capital el 8 de marzo.
El banco HSBC, el mayor de Europa, compró este lunes la filial británica del Silicon Valley Bank por un precio simbólico de una libra, rescatando así a un actor clave para las empresas tecnológicas emergentes en Reino Unido y ayudando a frenar las consecuencias de la mayor caída bancaria desde la crisis financiera de 2008.
Estados Unidos anunció que protegerá totalmente a los clientes del colapsado Silicon Valley Bank (SVB). El objetivo es “garantizar la confianza pública en el sistema bancario de Estados Unidos”, destacó la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, en un comunicado conjunto firmado también por el presidente de la FDIC, Martin J. Gruenberg, y el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell. “Los depositantes tendrán acceso a todo su dinero a partir del lunes 13 de marzo”, se afirma en el texto.