El ex ministro de Economía Hernán Lacunza -hoy parte del equipo económico que acompaña la candidatura de Horacio Rodríguez Larreta- señaló que el dilema entre shock y gradualismo hoy es “abstracto” porque la Argentina no tiene crédito. Y también recordó las discusiones con Alberto Fernández luego de las PASO y durante la difícil salida del Gobierno de Mauricio Macri.
“Gradualismo versus shock, si no tenés crédito no es un dilema, es abstracto. No podemos seguir así. La inflación promedio de la democracia es 75%, sacando la híper, y la pobreza promedio del 33% a 34%, un tercio por debajo de la línea de pobreza. No podemos seguir así con más de lo mismo”, dijo en declaraciones a Radio Rivadavia.
“Horacio Rodríguez Larreta dice que de nada le va servir gobernar para el 51% y mandar a hacer reformas con un voto a la madrugada y que después le tiran 14 toneladas de piedra. Así pasó en el Gobierno de Mauricio Macri cuando los mercados se preguntaron si los argentinos quieren hacer las cosas bien una vez o las van a seguir haciendo a los piedrazos”, recordó el ex ministro.
“No gastar más de lo que ingresa todo el tiempo es sentido común y hay que transmitir esto, si los argentinos quieren seguir pagando una cuarta parte de lo que cuesta la luz, si vamos seguir en esta ficción”, dijo Lacunza. “La historia económica argentina se parece bastante a un via crucis; hay que empezar a hacer las cosas distintas”.
Sobre las discusiones entre oficialismo y oposición sobre la herencia y sobre las “bombas” que se dejan hacia adelante, aseguró que las terminan sufriendo los ciudadanos. “Me parece que el daño cultural del kirchnerismo, en general, es la decadencia del debate público. Vale mentir. Empezó tempranamente con el Indec en 2007 y mentir con las estadísticas públicas y eso se trasladó a toda la arena de la discusión política”, dijo.
“Vale decir cualquier cosa; la discusión es sorda y es muy poco edificante. Siempre la culpa es del otro. Durante tres años la culpa fue de Mauricio Macri y ahora la culpa es del que va a venir. O la culpa de la inflación es la guerra en Ucrania”, ironizó Lacunza.
Durante la entrevista, Lacunza recordó la crítica salida del Gobierno de Mauricio Macri luego de perder las PASO en agosto de 2015. “El dólar subió de $40 a $60 y el riesgo país pasó los 3000 entre el viernes 9 y lunes 12, se derrumbaron los mercados y la Argentina pierde el crédito y no tiene capacidad de renovar su deuda. Es contundente; los mercados somos todos tomando decisiones pero en la decisión de millones de personas se le quitó la confianza a la Argentina”, recordó.
Sin embargo, hizo una autocrítica: “Una economía no puede ser vulnerable a un resultado electoral. El esquema no era robusto. Si tu programa es vulnerable a lo que diga cualquier marmota, como Lacunza, en la radio. Siempre las crisis no son simultáneas a sus orígenes, se fue incubando después de acumular deuda por un gasto muy superior al que podíamos pagar”, se sinceró.
En esos momentos, Lacunza recordó que le planteó al ex presidente Mauricio Macri que no había dos opciones -ganar o perder- si no que también estaba la opción de que tuviera que abandonar el Gobierno antes de finalizar su mandato. “Eso último no puede suceder, es una crisis institucional superior de la cual Argentina no vuelve, en términos políticos. En términos económicos, se elige lo menos malo. Inflación, problemas con los depósitos, más pobreza, no pagar la deuda, se va ordenando y se elige lo menos malo”, enumeró.
“El entonces presidente Macri me dijo ‘no quiero una nueva ronda de devaluación e inflación que la sufren los pobres’. Fueron medidas no graciosas, el cepo, reperfilamiento, pero es lo menos malo que puede pasar porque podíamos ir a una hiperinflación o que se duplique de 50% a 100% anual”, aclaró.
“El cepo es una anormalidad, no se puede vivir un cepo permanente porque se muere de trombosis; pero si te estás desangrando lo necesitas. Pero el cepo dura dos meses mientras recomponés los factores que te hicieron sangrar”, reflexionó luego de la decisión de poner cepo a la salida de dólares durante el final del Gobierno de Macri.
Sobre el rol de la oposición durante los meses finales del Gobierno macrista señaló que fue un mix, entre declaraciones que empeoraron la situación y otras que no. “Hablé con Alberto Fernández en su momento, cuando había ganado las paso y le dije dos cosas: hay 16.000 millones de reservas y quiero dejar lo más posible pero con cada declaración se pierde más y no jodamos con los depósitos. Ahí Alberto salió a decir lo del dólar a $60″, recordó. “Pero cuando el candidato de la oposición dice que va a pagar las jubilaciones con Lelia genera desconfianza. Fue una campaña mixta”.
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