Tras el receso vacacional, los empresarios del Grupo de los 6 (G6) volvieron a verse las caras esta semana en la sede de la Embajada de los Estados Unidos. El embajador, Marc Stanley, los esperaba el martes por la tarde para intercambiar visiones de la realidad política y económica del país. La necesidad de generar consensos sobre un conjuntos de políticas de estado que la Argentina requiere para salir adelante sobrevoló durante todo el encuentro, y es ése el objetivo que el G6 busca de cara a este año electoral.
Los empresarios lo plantearon en este encuentro, y lo mismo harán en otras reuniones que irán teniendo con el correr de los meses con distintos actores de la sociedad. De hecho, ya lo expresaron en noviembre pasado, a partir de la visita del ex mandatario español, Felipe González, quien aconsejó al país que “debe buscar un Pacto de la Moncloa antes de 2025″. Fue el propio G6 el que decidió invitarlo, justamente con el propósito de que deje un mensaje contundente que pueda provocar algún efecto en los distintos actores políticos. Por ahora, no tuvo el impacto esperado, reconocen en el empresariado.
Según fuentes privadas, el encuentro con Stanley fue protocolar, pero sirvió para que el embajador exprese su visión sobre el país y que los empresarios también le planteen cómo visualizan la marcha de la economía. El diplomático se mostró con una actitud muy favorable a la Argentina y con mucha predisposición para colaborar, ya que cree que es un país con un enorme potencial. Se refirió en muy buenos términos al ministro de Economía, Sergio Massa, y les contó a los hombres de negocios que, con el fin de ayudarlo, lo conectó con importantes inversores norteamericanos. “Lo valora mucho, dijo que juega muchos partidos de ajedrez al mismo tiempo”, relató una fuente empresaria. Les habló todo el tiempo en inglés.
Como parte de su discurso en favor del potencial que tiene la Argentina, Stanley se refirió a los sectores agropecuario, minero, energético y del litio y también valoró el capital humano que tiene el país. Dijo que el nivel profesional que tiene es muy importante, por lo que se mostró predispuesto a ayudar para lograr cambios. El diplomático dejó bien en claro que la actitud norteamericana es positiva frente a todos los países de la región, que Estados Unidos quiere fortalecer los vínculos con Latinoamérica y que es muy importante el rol del sector privado para que la Argentina pueda avanzar. Se mostró interesado en conocer la visión de los empresarios presentes y todos coincidieron en que “se sale con más inversión”. “Nosotros planteamos que hay que arreglar la economía. Pero para eso hay que enfrentar los problemas y este gobierno se los está dejando al próximo”, cuestionó uno de los dirigentes.
La reunión fue organizada por el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, en nombre de todo el G6. También asistieron el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco); Gustavo Weiss; el vicepresidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Eduardo Eurnekian; Jorge Brito, por la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba); el vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Marcos Pereda; y Marcelo Menéndez, por la Bolsa de Comercio.
“La idea del G6 es tomar contacto con la mayoría de los actores importantes. Entendemos que sin un acuerdo general mayoritario de ciertas políticas de Estado para que puedan ser consensuadas entre distintas fuerzas empresarias, sindicales y políticas es muy difícil salir de la decadencia. Con ese concepto lo trajimos a Felipe González y tratamos de tener reuniones con actores importantes, transmitiendo esa necesidad”, enfatizó otro empresario del grupo.
Sobre la reunión en la Embajada, dijo que Stanley remarcó la necesidad de dinamizar la actividad privada, liberar los capitales para que inviertan, pero “para eso se necesita la estabilidad de la macro y previsibilidad”, precisó la fuente. La reunión se produjo en simultáneo a que el Indec diera a conocer el dato de inflación de enero del 6%, a las 16, pero no se hizo mención a ese dato puntual. “Hablamos de que hay que arreglar la macro y de que la inflación es insostenible, pero en términos generales”, según una de las varias fuentes consultadas.
Para el G6, de cara al año que recién comienza pero que tendrá un alto contenido de debate por las elecciones, las distintas fuerzas políticas deberían llegar a acuerdos, entre otros puntos, en torno a la cuestión fiscal (orden fiscal, baja del gasto y no suba de impuestos); estabilidad de la moneda para que sea creíble y se pueda ahorrar en pesos; y en quitar la hiper regulación que hoy tiene el sector privado.
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