Los datos del mercado laboral de la última parte del 2022 muestran que el año terminó con números positivos pero que, al mismo tiempo, crece el peso del monotributo como modalidad de los nuevos puestos de empleo, que en noviembre representaron más de la mitad de trabajo creado.
El Ministerio de Trabajo dio a conocer los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) que toma en consideración las declaraciones de aportes que hacen las empresas de sus empleados registrados. Como número central, la cartera laboral marcó que los puestos de trabajo registrados crecieron en 47.825, lo que significó un 0,4% de mejora mensual y de 5,1% interanual. En números: 630.759 puestos de trabajo más que en noviembre del año anterior.
En un informe paralelo, con un alcance menor ya solo toma en cuenta la información de un grupo específico representativo de empresas -las que tienen más de 10 empleados a cargo- y de conglomerados urbanos particulares, pero que tiene un rezago menor, con los datos de diciembre Trabajo concluyó que el 2022 finalizó con un avance del empleo registrado de 2,2% a lo largo del año.
De todas formas, ese mismo informe también advirtió el primer número mensual negativo en casi dos años, con un -0,3% para el último mes del año. El SIPA, que funciona como el dato “definitivo”, mostrará cuál fue la cifra final del 2022 en su informe de marzo.
Un elemento sobre noviembre que marcó un informe de la consultora LCG es que la mayor parte de los puestos de trabajo creados fueron independientes, es decir, que no son en relación de dependencia. “Fueron los principales impulsores del aumento mensual con 27.000 puestos (más del 55% del incremento total)”, apuntó.
“Al interior, se destacaron los monotributistas con un aumento del 1,6% mensual sin estacionalidad (31.400 puestos), mientras que los autónomos solo crecieron en 0,1% mensual (+289 puestos en el mes). En contraposición, los trabajadores bajo el régimen de monotributo social registraron una contracción de más de 4.600 puestos (-0,8% mensual)”, aseguró LCG en base a los datos oficiales.
El peso que tienen las modalidades de trabajo independientes dentro del universo de empleo registrado fue en crecimiento en los últimos años. En ese sentido, LCG recopiló que desde febrero de 2020 la cantidad de monotributistas creció en más de 310 mil, mientras que en el mismo período los trabajadores en relación de dependencia lo hicieron en poco menos de 263 mil.
Pero además a los 310 mil del monotributo se suman otros 185 mil de monotributistas sociales. Más atrás, el empleo público creció en 173 mil personas y hubo dos caídas en ese lapso de casi tres años: 23 mil trabajadoras menos de casas particulares y casi 8 mil menos de autónomos.
“Desde el año 2012 se observa una pérdida continua de participación de los asalariados privados sobre los puestos registrados totales, pasando del 55,9% en enero de 2012, al 48,1% actual (-7,6 puntos porcentuales). En este sentido, durante el mismo período de análisis, los asalariados del sector público pasaron de representar el 23,3% del total en enero de 2012 al 26,1% en la actualidad (+2,6 puntos), reflejándose la pérdida de peso de los sectores tradicionales sobre la generación de empleo en el país”, mencionó LCG.
Por otra parte, la consultora mencionó que “durante el 2022, el crecimiento de la actividad en la primera parte del año y el marcado ajuste de las remuneraciones (-1% real contra diciembre) favoreció el crecimiento del empleo formal. No obstante, para el resto del año esperamos que los datos exhiban cierta ralentización de esta dinámica, sobre todo en el caso del empleo asalariado”.
Un informe del Centro de Política Económica Argentina (CEPA) analizó el dato de noviembre por sectores, con rubros con luz verde y otros en alerta. “En relación con los sectores de actividad, en el mes de noviembre diez de los catorce sectores incrementaron la cantidad de personas trabajadoras”, recopiló.
“Particularmente en dicho mes la recuperación estuvo impulsada por Comercio (+5 mil), Construcción (+3,8 mil) e Industria (+3,5 mil). El resto de los sectores mostraron un crecimiento desestacionalizado muy leve y, como venimos observando, Agricultura sigue siendo uno de los de peor desempeño, buena parte explicada por la sequía y la cosecha de trigo menor a la esperada”
“Hasta noviembre, la recuperación económica siguió presentando rasgos heterogéneos, pero cada vez de menor magnitud. Los sectores dinámicos continúan comandando la creación de empleo, mientras que los sectores en recuperación se consolidan y aquellos que meses atrás estaban en crisis, hoy han comenzado a crecer. Es posible que en los próximos meses las heterogeneidades comiencen a reaparecer”, anticipó.
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