Fue una tarea ardua para la mesa de operaciones del Banco Central. Tuvo que cubrir demasiados frentes para contener la suba de los dólares financieros. Los negocios por USD 266 millones, 57% más que la rueda anterior, muestran la puja entre los privados y la autoridad monetaria.
“Siguieron con la presión sobre el dólar en un mercado pesimista de corto plazo que busca cobertura y, por otro lado, con cierta convicción por ser constructivo a mediano plazo con posicionamiento en acciones y bonos. La Bolsa local operó al alza medida en dólares al igual que la de Brasil, a contramano de las acciones de las Bolsas de Nueva York y las europeas. Pareciera haber un fenómeno global de apetito por emergentes -por encima de las Bolsas más importantes de Estados Unidos y Europa- particularmente por la Argentina en vísperas del calendario electoral”, señaló el analista financiero Franco Tealdi.
El dólar MEP, en estas circunstancias perdió $1,87 (-0,5%) a $351,98 y el contado con liquidación subió $5,06 (+1,7%) a $365,99.
“El foco lo pusieron en el dólar MEP y dejaron correr al contado con liquidación. Si bien el MEP fue intervenido casi toda la rueda, sobre el final colocaron una orden de USD 4,9 millones de bonos para levantarlo. Al dejar correr al contado con liquidación quedó la sensación de que no tienen municiones para atacar a ambos dólares. Esto deja una mala señal: el año recién comienza y el Gobierno ya está sufriendo la suba del dólar con una brecha que amenaza impactar de lleno la inflación”, señaló el trader Esteban Monte.
Fue tan agitada la jornada que las pantallas marcaban la volatilidad de ambos dólares y el trabajo a destajo del Banco Central. “En los últimos 30 minutos el MEP bajó $3 y el contado con liquidación $1,5. La última orden para marcar el precio fue del GD30D por USD 3,3 millones nominales”, detalló Salvador Vitelli, analista financiero y especialista en agronegocios.
Lo cierto es que el AL30D, el bono que se utiliza para intervenir al MEP, terminó con una suba de 1,3% y el GD30D que se relaciona con el contado con liquidación cerró con una baja de 0,2% y la versión C (cable) bajó 0,97%. Por su parte, el dólar libre siguió su camino al alza y aumento $2 a $383 y se colocó tan solo a $3,50 del dólar tarjeta.
En la plaza mayorista, el dólar aumentó 34 centavos a $185,04%. El Banco Central tuvo que vender USD 56 millones a los importadores y las reservas cayeron USD 175 millones a 42.480 millones.
A los controles sobre las cuentas bancarias para evitar las operaciones de “puré” (comprar dólares MEP y revenderlos en el “blue”) se sumó la dificultad operativa por la cantidad de billetes que se necesitan para cada una de estas operaciones. Por caso vender USD 2.000 necesitan de 8 fajos de $100 mil. Y, por más grande que sean los que operan en el mercado, necesitan de una infraestructura para llevarle los billetes a los clientes ya que ahora, no hay que ir a las cuevas, sino que hay servicios delivery para clientes.
Los bonos tuvieron una rueda equilibrada que hizo que el riesgo país subiera apenas 9 unidades (+0,5%) a 1.834 puntos básicos.
Pero además del problema cambiario, el Gobierno va a enfrentar el de una inflación alta en enero por la suba de los precios de la carne. Según Vitelli, en 10 días a partir del 13 de enero el novillo aumentó 22%; el novillito, 24% y la vaquillona, 18%. Por eso no extraña que los cálculos de las consultoras ubiquen la suba de precios del mes en más de 6%.
La Bolsa tuvo una buena rueda, aunque con menor volumen que los días anteriores. Las operaciones sumaron $5.630 millones y el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, aumentó 3,15% en pesos, pero bajó 2,6% en dólares por la fuerte suba del contado con liquidación.
Los bancos fueron uno de los ganadores de la rueda -detrás de las empresas de electricidad- y revirtieron la baja inicial cuando apareció con fuerza el rumor de que las tasas de pases pasivos que perjudicaban a los plazos fijos y favorecían a los fondos de inversión iba a ser bajada desde 98,1% efectiva anual a 77,8%.
Los ADRs -certificados de tenencias de bonos que cotizan en las Bolsas de Nueva York- negociaron $6.583 millones y tuvieron una rueda ampliamente favorable donde se destacaron las alzas de Edenor (+10,3%), Banco Supervielle (+7,8%) e IRSA (+7,3%).
La otra novedad, pero que esta vez no genera tensión, es la licitación de mañana de Bonos del Tesoro. Los vencimientos son de $106 mil millones y se cubrirán con facilidad. Se licitan Letras de Descuento con vencimiento en abril mayo y junio y bonos dollar linked atados a la evolución del dólar mayorista con vencimiento en abril. Todos los bonos vencen antes de las PASO y están formando un congestionamiento que parece insoluble.
El plan “ganar tiempo” perdió fuerza. Enero le mostró la peor cara de la economía, porque evaporó el objetivo de bajar la inflación, le hizo perder reservas y no pudo solucionar la demanda de dólares del mercado. El tema es que desde febrero no hay tiempo para ganar porque la tensión aumenta a medida que se acercan las elecciones.
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