La nueva suba del dólar libre hasta $ 378 lo dejó prácticamente al mismo nivel de la cotización conocida como “turista”, es decir la que se aplica cuando los argentinos usan tarjeta para pagos en el exterior o a la hora de comprar pasajes, que ayer terminó en $ 379. ¿Podría ser un techo al menos temporal para la escalada cambiaria?
El dólar libre acumula una suba de prácticamente 8% en lo que va del mes, teniendo en cuenta que había cerrado el 2022 clavado en $ 350. Con los recientes ajustes de la cotización, acumula en los últimos 12 meses un aumento que roza el 81%, contra una inflación acumulada del 95%. Esto significa que el valor venía relativamente atrasado en relación a los precios y que en los dos últimos meses vino recuperando terreno, aunque todavía sigue abajo del promedio de suba de precios del último año.
Al ser consultado por Infobae en un reportaje el fin de semana, Sergio Massa lo atribuyó al dólar turista, también conocido como “dólar Qatar” porque se definió semanas antes del inicio del Mundial. Lo que hizo este nuevo tipo de cambio, al fijarse una nueva percepción de 25% de bienes personales, fue encarecer adicionalmente los gastos con tarjeta en el exterior. También la compra de pasajes para viajar fuera de la Argentina.
“Hay más de 350.000 argentinos que viajan al exterior y ahora prefieren comprar dólares en el mercado informal porque es más barato que utilizar la tarjeta. Y además no queda registración”, explicó sin tapujos el ministro de Economía.
El encarecimiento del tipo de cambio para el turismo tenía como objetivo que los argentinos gasten sus propios dólares en vez de demandarle al Banco Central, con el consiguiente impacto en las reservas. En la visión del Gobierno, esto provocó una presión adicional sobre el mercado informal, sumado a que hay menos liquidación de divisas por parte del turismo que ingresa al país (porque ahora cuando usan la tarjeta ya les toman el tipo de cambio financiero y no el oficial).
Pero con el dólar libre a $ 378, ahora ya prácticamente es indiferente llevar dólares billete al exterior o usar la tarjeta. Y además quienes gastan con el plástico podrán recuperar las percepciones de Ganancias y Bienes Personales, aunque recién a partir de mayo de 2024.
Aunque Massa dio a entender que el tope para el dólar libre era la cotización del tipo de cambio turista. Sin embargo, no está que este “techo” se mantenga como tal por mucho tiempo.
La creación de un nuevo dólar turista antes del Mundial de Qatar y a pocas semanas de las vacaciones de verano buscó que la gente que viaja al exterior lo hiciera con sus propios dólares en vez de usar la tarjeta. La consecuencia fue la esperada: mayor demanda de billetes en el mercado informal, provocando una suba de 8% este mes
El dólar turista ajusta según la cotización del tipo de cambio oficial, que viene aumentando casi ahora a un ritmo de 5,5% mensual. Se trata de un ajuste bastante parecido al de la inflación mensual. No sería extraño que el dólar libre también vaya ajustando de manera bastante parecida a la evolución de los precios, sobre todo ahora que corrigió buena parte del “atraso” de los últimos meses.
El dólar libre sigue manteniendo una distancia considerable con los otros tipo de cambio financieros. El dólar MEP, por ejemplo, había subido ayer hasta $ 354 pero luego con intervención de organismos estatales en el mercado de bonos lo bajaron hasta $ 342. De esta forma, se consolida como el valor más barato para aquellos que buscan dolarizarse, pero a través del mercado formal.
La distancia entre el tipo de cambio libre y el MEP ya es del 10%, algo inédito en el mercado local. La intención del Gobierno con la intervención es frenar indirectamente la escalada del blue, aunque por ahora no lo viene logrando.
Además, la escasez de divisas que sufrirá el Central por la sequía también le saca poder de fuego para mantener bajo control a los distintos dólares que hoy existen en el mercado.
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