Lujosos y con impronta de los 80: cómo son los 5 chalets más caros en venta de Buenos Aires

El chalet es un tipo de vivienda que nació en Suiza, sobre todo en zona de montaña, y con el tiempo fue mutando al estilo francés (muchos los llaman chalé) por sus techos y diseños exteriores. Pero nadie puede negar que su impronta es bien europea. También forman parte del mercado inmobiliario argentino y en Buenos Aires están presentes en barrios alejados del centro.

La mayoría se construyeron hace 80 o 90 años. Luego fueron reciclándose aunque varios desaparecieron porque fueron demolidos para dar lugar a edificios.

En otras épocas también se los asociaba con las casas para veranear, por eso se propagaron en distintos rincones del Viejo Mundo y de Estados Unidos. En el país son parte del ecosistema urbano de Mar del Plata, por ejemplo, donde tienen gran presencia.

Se tratan de viviendas unifamiliares que tienen más de una planta y gran conexión con el exterior. Suelen estar rodeados por un jardín o un patio adyacente. Y si es chalet no debería incluir un patio interior entre los ambientes, esa es la gran diferencia con una casa.

En Buenos Aires son buscados por familias numerosas que necesiten de varios espacios y aunque se hicieron en lugares alejados del movimiento vehicular.

Hay un chalet muy famoso que da hacia la 9 de Julio en el cruce con Sarmiento que data de 1927. Se lo conoce como “el Chalecito” y su particularidad es que es el más alto de la Argentina por ser el remate de un inmueble ubicado frente al Obelisco. En 2014 fue declarado patrimonio cultural de la Ciudad de Buenos Aires. Los actuales dueños están tratando de acondicionarlo y allí se hacen eventos. .

En cuanto a la actual oferta de chalets, la mayoría se encuentran en Villa Devoto, Villa Urquiza, Palermo, Floresta, Belgrano, Núñez, Villa Ortúzar, entre otros barrios. A continuación, una lista de 5 viviendas de este tipo que están posicionadas entre las más cotizadas que se venden en CABA.

Tiene 650 metros cuadrados, 5 ambientes, 4 dormitorios, 7 baños y 3 cocheras. Está en una zona de Villa Devoto muy próxima con la Avenida General Paz, casi en el límite entre Buenos Aires y la provincia.

El público que busca este tipo de propiedades necesita de espacios amplios y del confort que también encuentran en una casa. Cómo muchos se reformaron quienes lo compren también acceden a un hogar con pileta, quincho y parrilla, algo muy valorado por la demanda desde que llegó la pandemia.

Leonardo Ramos Couriel, experto del mercado inmobiliario premium, dijo a Infobae que “este chalet dispone de ambientes muy amplios, con gran calidad de terminaciones. Los pisos y escaleras son de mármol botticino italiano. Las habitaciones son en suite y con placares realizados en madera maciza con marquetería. Y los propietarios también reciclaron los 7 baños de la propiedad”.

Los techos de la vivienda poseen detalles en yeso que le agregan un toque muy señorial. Con aire acondicionado central y split en todos los ambientes.

“Al ingresar al chalet se observa la escalera circular que llega hasta al tercer piso toda revestida en mármol. El living y comedor están integrados que conectan hacia el patio, armonizados con un importante hogar realizado en mármol travertino”, detalló Ramos Couriel.

La construcción se hizo en 1985 cuando Villa Devoto era un barrio exclusivo de casas bajas. Fue un chalet famoso y salió en revistas de ese tiempo, incluso los actuales propietarios supieron por vecinos que la vivienda tuvo entre sus huéspedes al cantante español Julio Iglesias.

Hay una kitchenette en cada piso. El quincho además de la parrilla tiene un horno importante y este espacio está conectado al garaje con capacidad para guardar hasta 3 autos o para reuniones de hasta 60 personas ideal para compartir con la familia y amigos. La pileta tiene un sistema de limpieza automático que permite no cambiar el agua en todo el año.

Tiene 350 m2, 8 ambientes, 5 dormitorios y 3 baños. Está en una esquina con el cruce de Gamarra en el barrio de Parque Chas y a una cuadra del límite con Villa Urquiza.

La construcción se dividió en tres plantas y los actuales dueños renovaron toda la fachada que se resolvió con una superficie revocada con molduras que enmarcan los distintos volúmenes. El techo tiene una fuerte pendiente y está revestido con tejas marsellesas.

Daniel Obetko, experto del mercado de alta gama, detalló a Infobae que “los actuales dueños destinaron una inversión importante para reciclar la propiedad, incluso se le agregó un ascensor hidráulico y ahora cuenta con dos cocinas, una en la planta baja y la principal en el último piso, que es el espacio de encuentro, con un family y una gran terraza”.

El chalet posee toilette y el dormitorio matrimonial es en suite, con vestidor y balcón.

En la refacción realizada se cambió la madera por completo del techo, se reemplazaron pisos antiguos por porcelanatos y se agregaron la rejas de hierro.

Sobre el mercado inmobiliario de la zona, Obetko, dijo, que “Parque Chas es un barrio con gran demanda post pandemia para la gente que busca casas o PH y valora el contacto con el verde. Se caracteriza por un diseño único de calles que conforman un verdadero laberinto rodeado de plazoletas con arboles. Notamos por estos días bastante movimiento de gente con intenciones de comprar viviendas”.

Tiene 247 m2, 5 ambientes, 4 dormitorios, 3 baños y 1 cochera. Está en una zona donde casi limitan Villa Ortúzar con Belgrano R, donde aún se aprecian varios chalets al recorrer las calles aledañas.

Desde el mercado inmobiliario informaron que los chalets más buscados deben tener ciertas características para ser del interés de la demanda, como contar con un espacio guardacoches o cochera, un baño para cada habitación, jardín amplio, si tiene piscina mucho mejor, galería para eventos familiares y sobre todo aberturas amplias que permitan el paso de la luz natural.

Ennio Avilia, experto del sector, comentó a Infobae que “hoy existe un público de alto poder adquisitivo que durante la pandemia había decidido irse a vivir a las urbanizaciones a 50 kilómetros de CABA y hoy se dieron cuenta las dificultades que eso conlleva a la hora de trasladarse, los tiempos, los costos, la organización con los niños y la dependencia de contar con varios vehículos. La solución entonces fue buscar casas chalet en la ciudad sin perder la calidad de vida que habían conseguido y disfrutado y de estándares necesarios para que cada integrante de la familia tenga su espacio”.

Al abrir la puerta se encuentra un living comedor amplio con pisos tarugados de madera y vistas hacia el jardín (de 50 m2) y la piscina. También en este nivel se encuentra una cocina comedor diario con muebles blancos que se estrenaron hace poco, hay una galería acristalada que se conecta con el parque y la parrilla en plena ciudad.

“Este chalet, en particular, tiene la ventaja de que no podrán construirle edificios altos a su alrededor. Es la construcción típica que le gusta a las familias argentinas incluso a empresarios y gerentes extranjeros de empresas multinacionales que han preguntado por la vivienda en los últimos días”, amplió Avilia.

Se le han hecho algunas reformas como el alisado en paredes internas, se cambiaron las persianas de madera y se pintó toda la propiedad. Está lista para ser habitada por quien la compre y tal vez renueve el baño principal, algo habitual cuando una vivienda cambia de dueño.

El frente es de ladrillo visto y protección laqueada con detalles de marcos en color negro. Mientras que los techos interiores son de madera que le dan calidez y una estética agradable.

“El público que busca en la zona privilegia un trazado de Buenos Aires que es elegante, tranquilo, de casas bajas, vigilado, pero que a su vez hoy está próximo con áreas de esparcimiento y servicios. Se instalaron muchos restaurantes, parrillas, nuevos colegios, tiendas de servicios y todavía puede estacionarse fácilmente, algo que no ocurre en otros rincones de la ciudad”, precisó Aviliia.

Posee 265 m2, 5 ambientes, 4 dormitorios, 2 baños y cochera. Está en el barrio de Vélez Sarsfield y próximo con Floresta en el oeste de Buenos Aires. Es una propiedad de 20 años de antigüedad.

La vivienda está distribuida en tres niveles y cuenta con sótano. En la planta baja están el living comedor, cocina comedor con muebles blancos que se renovaron hace poco y mucho espacio de guardado. También hay un toilette. Con fondo libre y pileta donde hay una galería cubierta y lavadero.

“Los chalets son ideales para parejas con hijos chicos, en el cual pueden disfrutar de un gran espacio al aire libre. Este tiene todas las comodidades que se pueden exigir para habitar en CABA rodeado de casas de baja altura. Además posee lugar para tele trabajar o estudiar de manera independiente de resto del núcleo familiar”, detalló a Infobae Carlos Alarcón, especialista del Real Estate porteño.

Uno de los dormitorios en suite y los otros tres dormitorios con placares. En la segunda planta está el quincho y la parrilla.

Las luces de la mayoría de los ambientes interiores son LED empotradas. Los pisos son de parqué y el espacio del segundo piso que funciona como sala de estar y de juegos, está equipado con una segunda cocina, parrilla y toilette.

La pileta posee piso corredizo que la protege de la intemperie y se puede disfrutar todo el año.

Alarcón, añadió que “la casa conserva gran parte de su forma original, se le agregó más espacio y funcionalidad al ampliar el segundo piso, la sala de estar y juegos revestidos con pisos de porcelanato. El frente es moderno con paredes lisas. Y el portón de la cochera es automático”.

Tiene 207 m2, 3 dormitorios y 5 baños. La particularidad de esta propiedad es que forma parte del complejo apodado “Los Chalets” ubicado en Palermo, una construcción casi centenaria que se asemeja con las propiedades que se edificaban por entonces en Mar del Plata.

Desde 2013 está declarado por el Gobierno porteño como inmueble de patrimonio histórico de Buenos Aires, bajo el nivel de protección estructural e incorporado al catálogo del Código de Planeamiento Urbano.

El complejo de viviendas en donde está el chalet que se vende fue construido por el arquitecto Maximino Gasparutti. En la fachada sobre la parte de arriba se observa el pan de bois, un recurso ornamental que se aprecia mucho en la arquitectura marplatense. Muy empleado por la corriente que se conoce como pintoresquista.

Ezequiel Villamayor, experto del mercado de alta gama, contó a Infobae que “hoy la propiedad se encuentra desocupada y anteriormente funcionó un centro médico. Al lado del inmueble que se vende hay locales de indumentaria masculina que dan hacia la calle. Además de acondicionarse para una familia numerosa es ideal para centros estéticos, medicinales o educativos, aunque puede ser para otros usos”.

Consta de 4 plantas con acceso independiente y es apto profesional. El subsuelo tiene 3 ambientes con dos baños y el lavadero, donde se encuentran los dos termotanques y la caldera individual para los radiadores. Desde la calle se ingresa a un pequeño hall, para luego entrar a otro gran hall de distribución con una importante escalera de madera, donde hay 3 ambientes más y un toilette.

En la planta alta hay 2 ambientes, uno de ellos con balcón a la calle, placar, baño privado y un segundo baño, cocina, comedor diario con salida a un balcón interno luminoso.

“Al altillo, que no es parte del plano original se accede por la escalera de madera que nace en la planta baja a un ambiente con mucho lugar de guardado y otro baño. Son aproximadamente 40 m2 más. Todos los baños y cocina están impecables y reciclados”, amplió Villamayor.

Quien lo compre no tendrá que hacer una gran inversión para refaccionarlos. Los pisos en gran parte son de pinotea original con algunos sectores de cerámicos.

Villamayor, concluyó: “Las ventanas de madera están muy bien conservadas con doble vidrio manteniendo el estilo original. Cuenta con aires acondicionados para mantener fresca la propiedad que en su principio perteneció a Virginio Luchetti (según consta en los planos iniciales), aparentemente dedicado a la fabricación de ladrillos que tenía sus hornos en el cruce de las avenidas Albarellos y De los Constituyentes, en Villa Urquiza”.

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