El Gobierno anunció que el sindicato portuario y la administración de la terminal de Rosario llegaron a un acuerdo y que se levanta la medida de fuerza que había paralizado la actividad desde hace más de un mes, aseguraron fuentes del Ministerio de Trabajo.
Tras una reunión este mediodía, el Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) y representantes de la empresa TPR (Terminal Puerto Rosario), cuyos titulares son Vicentín y la chilena Ultramar firmaron un acuerdo que había sido alcanzado de palabra en los últimos dáis para continuar la actividad en la terminal portuaria de Rosario, epicentro de la liquidación de granos.
El origen del conflicto se dio hace más de un mes y fue el despido de 25 empleados, de los cuales 20 ya fueron reincorporados. Los otros cinco fueron notificados “con justa causa”, por lo que formalmente el sindicato no pelea por su restitución, sino por que se les pague una indemnización.
“El acuerdo no comprende a los 25 despedidos sino a 20. La semana pasada llegamos a un acuerdo con la empresa en el que queda claro que son reincoporados 20 trabajadores. Se conseguió una recomposición del 90% al 30 de marzo de este año y se firmó un acta en que nadie puede quedar sin trabajo por problemas de infraestructura o falta de trabajo”, dijo el secretario general de SUPA Rosario César Aybar, en diálogo con Radio Nacional Rosario.
Eel 7 de diciembre pasado el representante de TRP fue desplazado del lugar que ocupaba en el Ente Administrador Puerto Rosario (Enapro), el organismo de control de las terminales concesionadas, según información de Télam. En su lugar asumió un representante de Servicios Portuarios (Sepor), firma que tiene la concesión de los muelles VI y VII del Puerto de Rosario. “Lo importante de todo esto es que la mayor parte de los trabajadores ingresen a sus puestos y la actividad debería ser normal desde el mediodía”, había anticipado esta mañana Aybar.
El acta firmada en el Ministerio de Trabajo apunta a que “en un plazo de siete días” la empresa buscará “evaluar, cuantificar y determinar los daños (directos e indirectos) generados por el presente conflicto, y consensuar un mecanismo de recomposición a largo plazo”, menciona. El acuerdo fue firmado la ministra Olmos, el secretario general de Supa Rosario Aybar, el secretario de Trabajo Marcelo Bellotti, la directora de Relaciones y Regulaciones del Trabajo Gabriela Marcello y por TPR los representantes Raúl Moreira, Mario Pujol y Leonardo Feltrinelli.
La paralización de la actividad -que se dio en la terminal de contenedores pero no impactó en el transporte de granos- impactó en el transporte de carga de insumos de uso difundido, productos perecederos e incluso críticos. Por eso se vieron afectados sectores como empresas alimenticias y farmacéuticas. Además, al ser una de las vías principales del circuito logístico, la situación complica la operatoria de comercio exterior para las empresas locales.
Desde la Unión Industrial Argentina (UIA) habían emitido un comunicado para manifestar su postura respecto a cómo el conflicto sindical está afectando al desarrollo de la actividad productiva.
“Se generan problemas en la producción, por falta de insumos y por deterioro de la mercadería, especialmente en los casos que requieren refrigeración. Tenemos relevado que de los 1.000 containers que no pudieron retirarse, más de 700 fueron identificados como industriales. Estamos urgidos porque se va a comenzar a ver afectado el trabajo”, había asegurado el presidente de la entidad Daniel Funes de Rioja.
Asimismo, la Unión Industrial Argentina había informado que las empresas locales más afectadas por el freno de actividades en Rosario son cerealeras, alimenticias, automotrices y exportadoras de electrodomésticos. “Tienen compromisos de ventas y plazos acordados con clientes del exterior a los que no pueden responder. Esto genera paradas de producción, riesgos de pérdidas de mercados de exportación e incluso sanciones por el incumplimiento de los compromisos asumidos”, agregaron.
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