Las acciones brasileñas cotizaron con bajas en la apertura del lunes antes de repuntar y pasar a números levemente positivos. Los sacudones se daban mientras los actores del mercado se preparaban para una nueva semana de volatilidad después de que miles de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro asaltaron edificios gubernamentales en la capital, haciéndose eco de la insurrección estadounidense del 6 de enero de 2021.
El real brasileño se debilitaba alrededor de un 0,7% frente al dólar, que avanza a 5,26 reales en las operaciones al contado, mientras que el índice bursátil de referencia, el Bovespa de la Bolsa de Valores de San Pablo, se recuperaba de un descenso de 0,4% para pasar a ganar 0,29% tras el mediodía, en lo que podría calibrarse como impacto leve en los indicadores financieros si se considera la magnitud y gravedad de los disturbios.
En Wall Street las acciones de la petrolera estatal Petrobras restaban un 0,5%, a 10,23 dólares. Los títulos de la minera Vale caían 1,3%, a 17,43 dólares
“Con la situación contenida, esperamos un efecto limitado en los activos brasileños, a pesar de la fuerte repercusión negativa”, indicaron los analistas de la correduría XP Investimentos en una nota de investigación.
Entre los inversores todavía se mantienen las dudas por el aumento del gasto público dispuesto por Lula da Silva
La invasión coordinada del domingo por la tarde, que abrumó a las fuerzas del orden público y dejó el edificio del Supremo Tribunal Federal y otros lugares en Brasilia con graves daños internos, sorprendió a los observadores, incluidos muchos en la industria financiera.
“Nos sorprendió el nivel de violencia”, dijo a Reuters Matheus Spiess, analista de Empiricus. “La Bolsa de Valores de Brasil se había desprendido de ese ruido sobre una posible ruptura institucional, por lo que definitivamente podemos ver algunos efectos negativos”.
Economistas de JP Morgan y Capital Economics dijeron que las implicaciones de la violencia serían a corto plazo y principalmente políticas, aunque señalaron que el presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva y la agenda de su nuevo gobierno podrían fortalecerse.
“Los disturbios podrían resultar en una prima de riesgo duradera sobre los activos financieros del país, particularmente si hacen que el presidente Lula redoble su agenda económica”, comentó a Reuters William Jackson, economista jefe de mercados emergentes de Capital.
El real y el Bovespa, que tuvieron un mejor desempeño que otros mercados emergentes en América Latina durante la mayor parte de 2022, ya se habían visto afectados por turbulencias en los primeros días después de la toma de posesión de Lula el 1 de enero por preocupaciones sobre el aumento del gasto público.
El viernes, ambos habían tenido una buena sesión después de que Lula dijo que la economía del país podría crecer mientras las finanzas del gobierno se mantienen bajo control.
“A medida que el presidente se fortalece y la oposición se debilita, se podría ver una mayor radicalización de la izquierda, tal vez empujando la agenda más allá de lo que uno pensaría”, dijo Emy Shayo Cherman, estratega de acciones para América Latina y Brasil de JP Morgan.
Mariano Machado, analista principal para América de la empresa de inteligencia de riesgos Verisk Maplecroft, afirmó que los eventos en Brasilia socavarían la frágil confianza del mercado en Brasil y señaló que los inversores deberían prepararse para la volatilidad que se avecina.
Algunos analistas dijeron que cualquier reacción negativa del mercado a los últimos eventos podría ser temporal
El lunes, cientos de policías brasileños con equipo antidisturbios y algunos a caballo se concentraron en un campamento de simpatizantes de Bolsonaro cerca del cuartel general del Ejército de Brasilia. Lula ha prometido llevar ante la justicia a los responsables de la violencia del domingo.
“Dado que la situación parece estar bajo control en Brasilia, esperaría que cualquier impacto en la clase de activos sea de corta duración”, dijo Alejo Czerwonko, director de inversiones para Mercados Emergentes de América en UBS Global Wealth Management.
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