La Bolsa argentina mostró tendencia alcista este lunes, cerca de su nivel máximo histórico en pesos, por una vigente ola compradora frente a precios en pesos considerados atrasados ante la inflación y la devaluación.
El índice S&P Merval de la Bolsa de Comercio porteña ascendió un 2,5%, a 207.054 puntos al cierre, luego de anotar su récord intradiario en pesos en las 208.209 unidades. Entre las acciones más rendidoras del día destacaron Edenor y Transportadora Gas del Norte (+6,8%), Cresud (+5,1%) y Telecom (+4,8%).
Esta Bolsa acumuló un fuerte ascenso del 142% en 2022 en pesos, por encima de una inflación estimada en torno al 95% anual, y rendimientos en torno al 43% en dólares, lo que la convirtió en una de las inversiones mundiales con mejor retorno, en un contexto adverso para las acciones por las presiones inflacionarias y las alzas repetitivas de tasas de interés.
Solo en diciembre pasado tuvo una mejora del 19,9% en pesos.
Los bonos en dólares estuvieron operados con mínimas variantes, debido a que un feriado en los EEUU restringió el volumen de negocios local, ante la falta de referencia de Wall Street. El riesgo país de JP Morgan se mantenía sin movimientos, en los 2.213 puntos básicos para la Argentina.
La Bolsa acumuló un fuerte ascenso del 142% en el año y con rendimientos en torno al 43% en dólares, lo que la hizo destacar en el sistema financiero global
Entre los acontecimiento que movilizaron al mercado en el transcurso del año se encuentran los cambios en el Ministerio de Economía, con la llegada de Sergio Massa en lugar de Silvina Batakis, a comienzos de agosto. Antes, tras lograr un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y acordar con el Club de París, Martín Guzmán presentó su renuncia.
Los analistas de Research for Traders precisaron que “el mercado local de acciones cerró el año 2022 con una importante alza, a diferencia de los mercados externos que finalizaron en baja por temores a una recesión mundial generada por las políticas monetarias de muchos bancos centrales para controlar la inflación. Esto se dio en un contexto de cobertura de varios inversores frente a la elevada inflación minorista local y alto déficit fiscal. Además, el mercado anticipa un cambio de gestión en el gobierno en 2024″.
Luego de ese suceso, y por un tiempo breve, el mando fue asumido por Silvina Batakis, quien intentó acomodar la situación macroeconómica. Finalmente, Sergio Massa tomó las riendas y utilizó los recursos a su alcance para cumplir las disposiciones del FMI y mantener a flote la economía local”, evaluó Priscila Bruno, analista de Rava Bursátil.
“Repasando lo sucedido en Argentina, el 2022 prácticamente inició con el acuerdo firmado junto al Fondo Monetario Internacional -FMI- y éste marcó buena parte del desenvolvimiento de la economía a través de metas trimestrales. Con un reordenamiento del Ministerio de Economía y medidas especiales, como el Dólar Soja, el país ha logrado cumplir con las revisiones por parte del FMI y habilitar los desembolsos de dólares pactados”, describieron los expertos de TSA Bursátil.
“El 2023 se presenta como un año electoral, con un crecimiento económico que probablemente continúe desacelerándose y cuente con escasas reservas internacionales, que se ven amenazadas por malas perspectivas sobre el sector agroexportador. A estos factores, se suma la situación inflacionaria, que probablemente cierre el 2022 muy cerca de +100% e inicie un enero con cifras correlativas. Sin dudas, el panorama para el año entrante podría señalarse como frágil y sujeto a varias restricciones”, añadieron desde TSA Bursátil.
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