Poseer acciones de Tesla este año no ha sido nada fácil para los inversionistas.
Las acciones del productor de vehículos eléctricos cayeron casi 70% desde el inicio del año y están encaminadas a terminar entre las cinco con mayores descensos en el índice S&P 500. En comparación, el índice de referencia ha caído un 20 por ciento.
Aunque las ganancias de Tesla siguen aumentando, las señales de menor demanda y más competencia tienen a los inversores preocupados. Y luego está la adquisición de Twitter por parte de su director general, Elon Musk. Algunas de las acciones de Musk desde que tomó control de la red social, entre ellas eliminar una estructura de moderación de contenido creada para abordar el lenguaje que incita al odio y otros problemas en la plataforma, han desconcertado a anunciantes de Twitter y alejado a algunos usuarios.
Eso avivó preocupaciones en Wall Street de que Twitter quita demasiada atención del multimillonario y posiblemente ofenda a clientes leales a Tesla.
La adquisición de Twitter por parte de Musk provocó una tormenta política y el deterioro de la marca de Tesla y Musk, lo que llevó a una “debacle total para las acciones”, escribió esta semana el analista de Wedbush, Dan Ives, en una nota de investigación.
Musk dijo que planea quedarse como director general de Twitter hasta que encuentre a alguien dispuesto a reemplazarlo.
Pese la estrategia de Musk en Twitter, los resultados de Tesla han sido sólidos este año. La empresa publicó ganancias respecto del año pasado y mayores ingresos en los tres primeros trimestres del 2022, incluso más del doble en sus ganancias del tercer trimestre comparado con el año previo.
Compradores
A pesar del contexto, Bloomberg destacó que la empresa tiene un “núcleo duro” de inversores individuales que siguen confiando en la empresa y en Musk. En medio de la caída, la empresa subía hoy poco más de 6% en Wall Street a las 16 horas de Buenos Aires. Ayer fue una jornada similar.
Según datos de Vanda Research que cita la agencia, esos operadores minoristas han seguido invirtiendo en sus acciones. De hecho, tan fuertes fueron todos los días de este mes, que ha impulsado sus compras netas a máximos históricos tanto en diciembre como en el cuarto trimestre.
La caída en picada está alimentada por el aumento de las tasas de interés que golpeó las acciones de crecimiento, las preocupaciones de que la demandase erosione en caso de una recesión y los temores de que la adquisición de Twitter por parte de Musk desvíe su atención y aumente sus ventas de acciones de Tesla para mantener a flote la empresa de redes sociales.
No obstante, para los acérrimos seguidores de Tesla entre los inversionistas minoristas, los riesgos de la demanda de vehículos eléctricos o la preocupación de Musk con Twitter no han sido suficientes para amargar su confianza en una acción que se convirtió en una de las de mayor valor de Wall Street durante la pandemia.
“Los inversionistas minoristas han comprado más acciones de Tesla en los últimos 6 meses que en los 60 meses anteriores”, dijo Viraj Patel, estratega senior de Vanda, “Para los inversionistas institucionales, es un paraíso del vendedor cuando tienes un comprador que claramente no está leyendo las señales fundamentales”.
El martes, Tesla sufrió una caída del 11% debido a nuevas preocupaciones sobre los planes de suspender temporalmente la producción en su planta de Shanghai y el informe de la semana pasada de que el fabricante está ofreciendo a los consumidores estadounidenses un descuento de USD 7.500 por recibir sus autos antes de fin de año.
Eso alimentó los temores sobre la erosión de la demanda antes de las cifras de entrega del cuarto trimestre que se esperan para principios de enero. Las estimaciones de entregas han bajado en las últimas semana.
Con información de Bloomberg y AP
Seguir leyendo: