El arranque de la segunda etapa del dólar soja contribuyó a duplicar el monto operado en el segmento de “contado”, que alcanzó este lunes los USD 594,1 millones, mientras que los ingresos por exportaciones del agro a un tipo de cambio de $230 por dólar ascendieron a USD 292,3 millones y representaron la mitad del volumen operado.
El Banco Central informó que el dólar al público es negociado este lunes a $173,66 para la venta en el promedio de bancos de la City porteña. Con una carga tributaria que duplica este precio para los consumos con proveedores del exterior, el dólar turista o también llamado “Qatar” asciende a los $344,32 para la venta, que lo convierte en el más caro entre todos los segmentos del mercado.
El billete ofrecido en el reducido mercado paralelo recorta dos pesos en su precio de venta, a $318, con una brecha cambiaria de 90,8% respecto del dólar mayorista, a 166,65 pesos. El dólar “blue” anota una ganancia de 28 pesos o un 8,8% en noviembre, mientras que desde que empezó el 2022 la ganancia alcanza el 52,9 por ciento.
Las posturas de venta en el segmento mayorista del dólar se acomodan este lunes en los $ 166,65, con un incremento de 1,06 peso o 0,6% en el día. El tipo de cambio oficial mantiene un alza de 6,8% respecto de los $156,02 del 28 de octubre último.
Con el arranque a partir de hoy de la segunda versión del dólar soja, Sergio Massa busca fortalecer las reservas del Banco Central y así ponerle un freno o al menos suavizar la escalada del tipo de cambio. Pero esta medida tiene efectos colaterales que también habrá que seguir de cerca: la emisión monetaria adicional por la compra de divisas a $230 versus un dólar oficial de 170 pesos.
La comercialización de granos por parte de los productores siempre es un tema que atrae la atención de los gobiernos de turno, sobre todo en épocas donde escasean los dólares.
La nueva edición del programa de liquidación anticipada de exportaciones, más conocido como “dólar soja”, servirá para que la economía recupere una pequeña fracción de los miles de millones de dólares que perdió por ventas externas en los últimos diez años, a medida que desalentó y frenó el desarrollo del complejo sojero con una altísima carga tributaria y normas que desincentivaron el desarrollo tecnológico del sector y direccionaron inversiones hacia los otros países del Mercosur.
Media docena de funcionarios del Ministerio de Economía viajarán este lunes por la noche a Washington para mantener a lo largo de la semana reuniones técnicas con el staff del Fondo Monetario Internacional. El Gobierno busca cerrar la tercera revisión trimestral de metas del acuerdo firmado con ese organismo y recibir, antes de Navidad, el último desembolso de este año por unos USD 5.900 millones.
Con el cierre del viernes, el Banco Central ya acumula en noviembre ventas por USD 1.000 millones, ritmo que despertó el nerviosismo en la plaza cambiaria y que alentó la suba de las cotizaciones financieras del billete.
En los últimos cuatro meses el ritmo importador se redujo desde un pico de USD 8.500 millones en junio hasta poco más de USD 6.000 millones en octubre. En el medio, sucedieron distintos acontecimientos, algunas relacionados a medidas directas del Gobierno para cuidar las reservas del Banco Central, y otras, con mayor peso, a factores estacionales, que explicaron el recorte del 40 por ciento.