El ministro de Economía, Sergio Massa, parece estar atado a un destino que impone obstáculos a sus principales medidas. Si bien desde hoy y hasta el 31 de diciembre comienza a regir el dólar soja a $230, con lo que espera alcanzar una recaudación adelantada de USD 3.000 millones que le permitirán cubrir el bache entre diciembre y marzo, cuando la escasez de dólares se verá acentuada por la sequía.
Además, las noticias que llegan de China pueden golpear a las reservas internacionales. Si bien los yuanes no son de libre disponibilidad, integran la mitad de las reservas. Las manifestaciones del domingo en Shanghái, ciudad de 25 millones de habitantes, contra la política de covid cero que los ha mantenido confinados los últimos meses, preocupa a la economía mundial. Xi Jinping, firmó el decreto de confinamiento por temor al colapso de los hospitales.
Otras ciudades chinas padecen confinamientos más largos, pero la manifestación de Shanghái conmovió el valor del yuan que se devaluó 0,35% frente al dólar y va a afectar a las reservas argentinas.
Pero antes del dólar soja el Gobierno deberá enfrentar hoy una licitación clave de la Secretaría de Finanzas que debe recaudar lo más que pueda porque entre hoy y fin de diciembre necesita hacerse de medio billón de pesos y solo lleva recaudado $33.500 millones. Lo llamativo es que en esta licitación no hay bonos CER. Son letras a tasa donde la de mayor plazo es la que vence en abril y títulos atados a la evolución del dólar oficial (dollar linked) con vencimiento en abril y julio próximos.
¿Misión imposible?
Parece misión imposible, por eso Massa está hablando con intendentes para que sus fondos del presupuesto en lugar de tenerlos depositados a plazo fijo le compren una letra del Tesoro a 90 días. De esta manera, quiere cerrar el déficit del Tesoro en los términos convenidos con el FMI.
En tanto, lo que preocupa del dólar soja es que, si se recaudan los UDSD 3.000 millones esperados, dará lugar a una emisión de alrededor de $700 mil millones, de los cuales el excedente por el valor de privilegio, representa una emisión adicional de casi $200 mil millones que si no son absorbidos de alguna manera, presionarán contra la inflación y el valor de los dólares alternativos.
Salvador Vitelli, analista financiero experto en agronegocios, no ve tan simple el panorama. “Yo no creo que el Gobierno recaude USD 3 mil millones por el nuevo dólar soja porque los que tenían que vender ya vendieron para calzar las ventas de soja con la compra de insumos. Es decir, el sector está hecho. Por otra parte, este dólar a $230 es más bajo que el de $200 de setiembre porque por la inflación debería haber estado en $237. Este es otro obstáculo para el éxito del programa”, señaló.
Ruido en Brasil
El otro problema que tiene la Argentina es Brasil. Allá por la incertidumbre que está generando Lula, el presidente electo, hay salida de capitales. La Bolsa perdió el viernes 2,55% y el real se devaluó 1,68% y cerró a 5,41 por dólar.La Argentina siguió el camino opuesto y sus bonos en dólares subieron y el riesgo país bajó 36 unidades a 2.370 puntos básicos. Cabe aclarar que este movimiento se hizo con escasos negocios debido a que los mercados norteamericanos funcionaron apenas 3 horas tras el feriado del Día de Acción de Gracias.
Por eso tampoco hay que considerar el movimiento de los dólares alternativos, donde el contado con liquidación comenzó a normalizar la estrecha brecha que lo separaba del MEP al subir 41 centavos a $323,02. El MEP bajó $3,22 a $316,07 y ahora la brecha entre ambos está en 2,20% contra 1% del jueves. El “blue” aumentó $1 a $320 y el dólar mayorista subió 38 centavos a $165,60 y se estima que terminará octubre con una devaluación de 6,75%. El Central tuvo que vender USD 40 millones y las reservas perdieron 87 millones y quedaron en USD 37.534 millones.
La semana promete ser intensa y habrá que observar no solo el resultado de la licitación, sino el comportamiento de los dólares alternativos porque continúa la dolarización de carteras.
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