A la sobreoferta de inmuebles en venta que tiene Buenos Aires se sumó recientemente una propiedad especial que respira 2x4. Se trata de un petit hotel que data de 1860 y en el que hasta hace poco tiempo funcionó una academia de tango. Está sobre una calle típica de San Telmo angosta y donde hay varias construcciones vecinas que forman parte del patrimonio edilicio e histórico de Buenos Aires.
Es una mansión exclusiva por sus materiales importados y por cómo fue reformada hace un tiempo. Se invirtió bastante para acondicionarla y permitir que allí también funcionara hasta la actualidad un hotel boutique de cuatro estrellas.
Otra particularidad es la gran cantidad de baños que tiene: hay 43. Y lo convierten entre las propiedades que más baños poseen entre las que actualmente se comercializan en la Capital Federal.
Posee 31 habitaciones en total, de las cuales 7 tienen su propio estar y otras 24 son en suite (por eso tiene 43 baños la propiedad, uno por cada habitación y uno o dos por cada salón o área común).
Tiene esa cantidad de baños porque cuando se hicieron las reformas y se estructuró como un hotel boutique y academia de tango a la vez, los propietarios pensaron en dotar de mayor servicios al proyecto. Tuvieron que adaptar cañerías para la ampliación del inmueble, y aunque fue costoso por los trabajos necesarios pudieron concretarlos con eficacia.
Hay baños de distintas superficies y revestidos con cerámicos o mármol, con bañera, algunos con jacuzzi y otros son más simples en cuanto a los materiales con los que fueron culminados. La grifería es importada en algunos casos, y en otros donde no se han conseguido traer desde el exterior, se los reemplazó por piezas nacionales.
En total, el inmueble tiene 1.900 metros cuadrados y está catalogado bajo protección patrimonial.
Su construcción original la hizo un médico del cual poco se sabe de su identidad. En cambio sí llegó hasta nuestros tiempos que por la epidemia de fiebre amarilla que sufrió Buenos Aires y en especial la zona sur de la ciudad (a fines del siglo XIX) el profesional decidió junto a su familia emigrar hacia otro punto de la zona norte cuando allí por entonces predominaban las grandes extensiones de campo.
Cómo el inmueble fue pasando de manos en la década del ‘60 se le hizo un anexo.
Muchos de los Petit Hoteles que perduran en Buenos Aires fueron realizados entre 1870 hasta mitad de 1930, en tiempos de la Belle Époque
Muchos de los petit hoteles que perduran en Buenos Aires fueron realizados entre 1860 hasta mitad de 1930. Actualmente hay varios en venta y otros lamentablemente fueron derribados en distintas épocas para dar paso a torres en altura. Hoy existe más cuidado y los inmuebles con estas características suelen disponer de protección urbanística por el Gobierno porteño, por lo cual para construir sobre o por detrás de la fachada original hay que presentar mucha documentación y planos antes de aprobarse.
Cómo es por dentro
La mansión ubicada en San Telmo se comercializa por USD 2.000.000 y está distribuida en 5 pisos con tres ascensores.
Carolina Dumais, experta del mercado inmobiliario premium, dijo a Infobae que “es un verdadero palacio con eje temático del tango debido a que allí funcionó una academia de Shall we Dance Tango (Vamos a bailar el tango). Que fue el lugar para recibir a los amantes de la disciplina y bailarines eximios enviaban alumnos para perfeccionarse en el lugar”.
Todo el inmueble está decorado con este eje y allí en sus paredes el 2x4 está presente en cada rincón con imágenes que remiten a bailarines, orquestas, murales, cuadros de Aníbal Pichuco Troilo (para muchos el máximo bandoneón de Buenos Aires), figuras de Carlos Gardel e instrumentos que remiten con la música de pura esencia rioplatense.
Al ingresar hay una escalera de mármol muy señorial que conecta con el hall de recepción. Al hotel boutique lo visitan los turistas que luego de las restricciones por la pandemia volvieron a llegar a la ciudad para conocer la zona donde la impronta porteña mantiene fuertes raíces y está próxima con Puerto Madero, el barrio más joven de Buenos Aires.
En la plata baja alberga dos restaurantes uno para 50 y otro salón para 90 personas. Ambos con escenario y pista de baile. También está la recepción y oficina comercial.
Tiene un hermoso patio con jardín andaluz. En el primer, segundo y tercer piso están las habitaciones y en la terraza se encuentra la piscina, solárium y un tercer salón cerca de la lavandería.
En distintas áreas hay presencia de hierros, celosías, madera, mármol, boiseries y grifería revestida en bronce, está construido con materiales muy costosos que en su momento fueron reciclados para que luzcan intactos.
“Se encuentra decorada con muebles de estilo pensados especialmente para cada habitación y maravillosos murales. Algunos con toque de Feng Shui. Y otra cuestión a destacar es que los murales fueron pintados por el el maestro Jorge Abel Magnani quien realizó los del Casino y del Hotel Provincial de Mar del Plata”, contó Dumais.
Magnani, quien falleció el año pasado, realizó 700 murales entre 1960 y 2019.
“El Petit Hotel está en muy buenas condiciones, no se le han realizado reformas recientemente. Es ideal para hotel boutique, una embajada, la sede administrativa de alguna empresa de primera línea, algún museo, un restaurante grande, entre otras opciones”, dijo Dumais.
Está en una zona céntrica que también es parte de lo que ahora se conoce como “Ciudad de los 15 minutos” a pasos de importantes edificios gubernamentales y públicos.
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