La sobre-oferta de unidades en venta que tiene Buenos Aires sumó una nueva joya edilicia: salió recientemente a la venta el departamento que está en un edificio que habitó toda una familia que tiene lazos con la nobleza de Italia. El departamento está sobre Juncal al 700, frente a una icónica construcción: el Palacio Estrugamou.
El departamento súper lujoso que se ofrece esté en un edificio de 9 niveles con fachada de ladrillo visto, de estilo industrial, combinando toques inglés e italiano, está en una de las cuadras más francesas de Buenos Aires, en el barrio de Retiro.
La propiedad encierra varios secretos. El edificio fue proyectado por el arquitecto Alberto Benvenuto de la constructora Graziani Hnos (compañía que llevó adelante más de 35 obras hasta principios de los ´70 en distintos barrios porteños y del Gran Buenos Aires, entre ellos la Escuela Técnica dependiente la de la fábrica Ford en la localidad de Pacheco, partido de Tigre). Su labor también llegó hasta Mar del Plata.
Este inmueble, informaron los actuales propietarios a Infobae, se inauguró en 1950 y fue hecho por encargo de Francisco Prati, italiano de origen que había llegado a nuestro país en 1910, emparentado con la nobleza italiana (por línea heráldica el apellido “Pratti” nació en la región del Piamonte y así se escribe en la península itálica).
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Uno de los descendientes de Prati contó que su abuelo nació en la localidad conocida hoy como Castel Colonna (en la provincia de Las Marcas (Le Marche en italiano), cerca del mar Adriático, de San Marino y de Ancona (la capital provincial). Antiguamente era Tomba di Senigaglia (Tumba de Senigallia).
Francisco se casó con María Cristina Spada, argentina (hija de italianos) y tuvieron 3 hijos: María Victoria “Bimbi” Prati (1917/2013) casada con Amaro Fernández; Carlota “Tita” Prati (1920/2000) casada con Alberto Benvenuto y Leonardo “Leo” Prati (1922/2014) casado con Elena Scotto.
Lo cierto es que quien encargó el edificio lo hizo pensando en sus descendientes: hizo construir un departamento para cada integrante de su familia. Qué todos vivan en un piso distinto, pero siempre cerca.
“Lo más importante es el sentido con el que se hizo el edificio. El abuelo quería un lugar para que viviera toda su familia y 5 pisos para renta para que sus hijos tuvieran un ingreso superior y no pasen problemas económicos. Por eso también pensó en hacer un local comercial en la planta baja (aún vigente) y una oficina que fue sede de una compañía. Ambos inmuebles también otorgaban una renta que se distribuía entre todos los familiares. Luego, los embates económicos de nuestro país fueron complicando el camino y los departamentos se fueron subdividiendo para su venta”, comentó uno de los descendientes de Prati.
“El abuelo quería un lugar para que viviera toda su familia y 5 pisos para renta para que sus hijos no pasen problemas económicos” (descendiente de quien hizo construir el inmueble)
Su fachada de estilo industrial de rasgos ingleses e italianos contrasta con lo francés del Estrugamou (el edificio ilustre de enfrente) hecho por los arquitectos Eduardo Sauze y Auguste Huguier), de diseño ecléctico influenciado por el barroco galo y que desde su esquina de Juncal y Arroyo proyecta una imagen “parisina”.
Algunas particularidades que tiene el edificio es que posee su recepción al fondo y no al frente. Calefacción central por aire caliente y la puerta del ascensor principal posee cierre automático, algo original en 1950, cuando se inauguró.
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Otra de sus vistas da al Palacio San Martín (la sede de la Cancillería argentina) que fue construido por la familia aristocrática Anchorena, y por eso también se lo conoce como Palacio Anchorena.
Cómo es
En el edificio histórico se vende un departamento que fue totalmente reciclado en una cuadra donde la impronta de Europa está presente en toda su extensión.
Posee 372 metros cuadrados con 8 ambientes, una cochera y baulera. Sale USD 750.000 y allí se abonan $56.000 por expensas.
“Se compone de un amplio hall de recepción y toilette. El recibidor es la antesala del resto de la vivienda. En su alrededor se desemboca al living con tiraje de chimenea y al comedor de manera separada, con vista a los jardines de la Cancillería”, dijo Sofía Moñino, experta del mercado inmobiliario.
La cocina tiene doble circulación y una gran espacio de comedor diario y lavadero independiente. “Dentro del área privada, encontramos un playroom, 3 dormitorios que tienen 2 baños y la master suite con un amplio vestidor con su baño que tiene ducha y bañera, todos miran hacia el Palacio Estrugamou”, añadió Moñino.
La unidad fue edificada con generosa altura de piso a techo, es luminosa y el auto ingresaba hasta el palier de entrada, situaciones de otra época.
Actualmente los dueños modernizaron cocinas, baños y decoraron el living con accesorios de este tiempo pero mantiene lo señorial de antaño.
Donde antiguamente existían 3 dependencias de servicio hoy funciona un salón íntimo que puede ser una sala de micro cine o biblioteca según lo que estructure el próximo dueño.
Por sus condiciones y estilo racionalista puede ser la casa de una familia numerosa, embajadas, la residencia de diplomáticos, entre otras posibilidades.
De los materiales originales conserva molduras, carpinterías, puertas originales y pisos de roble de Eslavonia.
Sobre el mercado premium y su actualidad, Moñino, concluyó que “en estos momentos hay bastante movimiento y gran cantidad de consultas, en especial porque sobre el tramo final de año se concretan más operaciones. Hay interés de extranjeros en comprar en Buenos Aires que aprovechan la disminución de valores que sufrió el escenario y encuentran joyas como esta que no tienen nada que envidiarle a los departamentos ubicados en otras metrópolis como Londres, París o Madrid”.
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