El dólar libre profundizó la baja este jueves, para negociarse a $277 para la venta, con un retroceso de cinco pesos o 1,8% en el día. La divisa ofertada en el reducido mercado paralelo volvió a su valor más bajo desde el 15 de septiembre, tres semanas atrás. Por la tarde tocó un piso de 276 pesos.
El billete que se opera por fuera de las restricciones del “cepo” acumula un descenso de once pesos o 3,8% en la primera semana de octubre, cuando ya había perdido dos pesos a lo largo del mes de septiembre, en una tendencia declinante que se confirmó con la llegada de Sergio Massa al Ministerio de Economía.
Iniciado octubre, ya sin el respaldo de las liquidaciones de “dólar soja” a $200, el Banco Central retomó las ventas en la plaza cambiaria por segundo día, en una tendencia previsible dada la estacionalidad del flujo del comercio exterior.
La divisa negociada en el mercado paralelo pierde 2,1% en el día y profundiza la tendencia a la baja del inicio de octubre, con un descenso de doce epsos o 4,1 por ciento. El retroceso, que es acompañado con una baja de los dólares financieros, tiene lugar un día antes de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) apruebe una nueva revisión del programa consensuado con el Gobierno argentino.
El visto bueno del organismo habilita el giro de algo menos de USD 4.000 millones previstos en el cronograma de desembolsos del acuerdo.
La divisa resta tres pesos en el mercado paralelo y anota un descenso en octubre de nueve pesos o 3,1 por ciento. La paridad bursátil que estuvo operada a $310 por la mañana, se reacomoda a la baja, a $304 a través del bono Global 30 (GD30D), mientras que el dólar MEP se pacta a 293 pesos.
El dólar al público -sin los impuestos- cotizó este jueves 6 de octubre a $156,27 para la venta tras avanzar 45 centavos en esta rueda, según el promedio que surge de los bancos del sistema financiero local. En el Banco Nación, en tanto, el billete minorista operó a 155,25 pesos.
Aplicados el Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) del 30% más un 45% como percepción por el adelanto del Impuesto a las Ganancias, el dólar “turista” o “tarjeta” para consumos con proveedores del exterior se ofreció a $273,47 y quedó a menos de siete pesos del dólar libre, negociado a $280 para la venta.
El dólar que se negocia a través de activos bursátiles para acreditarlos en el exterior, el “contado con liquidación”, opera este jueves con ligera tendencia alcista a 310 pesos. Así, este tipo de cambio implícito en acciones y bonos vale 30 pesos más que el dólar libre, a $280 para la venta. La brecha cambiaria entre ambas cotizaciones es inusual, unos 30 pesos o 10,7%, la más amplia desde el 16 de junio de este año, cuando brevemente alcanzó el 12%, a $242 y $216, respectivamente.
La divisa en el mercado paralelo cae dos pesos en su precio de venta este jueves, a $280, su valor mínimo desde el 16 de septiembre. En lo que va de octubre el dólar libre pierde ocho pesos o un 2,7 por ciento. En tanto, desde que empezó 2022 gana 74 pesos o un 34,6 por ciento.
El tipo de cambio oficial asciende 34 centavos en la rueda mayorista, a 149,22 pesos. En el último mes, el billete verde se pacta con un alza de 8,66 pesos o un 6,2%, desde los $140,56 del 6 de septiembre de 2021. En el último año, el dólar mayorista avanzó un 50,8% respecto de los $98,92 del 6 de octubre del año pasado.
La Fundación Getulio Vargas de Brasil informó este jueves que la economía del país vecino registró una deflación de 1,22% en septiembre. En términos mensuales o trimestrales, hay argumentos para considerar que el momento actual que vivimos es el de mayor deflación de la historia brasileña. En efecto, medida por el IPCA, la inflación cayó en julio (-0,68%),en agosto (-0,36%) y por tercer mes seguido en septiembre.
El dólar estadounidense se negocia a 5,21 reales brasileños en promedio, lo que supuso un cambio del 0,4% si se compara con la cifra de la sesión previa, cuando cotizó a 5,18 reales en promedio. Hay que recordar que el dólar en Brasil se pagaba a 5,22 reales hace un mes, lo que refleja cierta estabilización cambiaria tras anotar un máximo de 5,41 reales el 26 de septiembre.
En los últimos siete días, el dólar estadounidense registra una disminución del 4%, por ello en términos interanuales mantiene aún una disminución del 5,2 por ciento. Con respecto a días anteriores, suma dos sesiones consecutivas de ganancias.
La ilusión duró poco. Los inversores del mundo tomaron las ganancias de las últimas 48 horas. Saben que la crisis no terminó y hay que seguir refugiados contra tasas más altas y un super dólar. Por eso las Bolsas del planeta -excepto las de Oriente que operan en la noche- terminaron en rojo. La excepción fue Brasil donde el Ibovespa de San Pablo, el índice de las principales acciones, subió 0,83% en reales, pero quedó sin cambio medida en dólares porque la moneda brasileña se devaluó y cotizó a 5,20 por dólar.