La consultora Ey Argentina, en conjunto con el Instituto Argentino de Finanzas (Iaef), presentó los resultados de su decimonovena encuesta anual sobre la inversión y financiación con la participación de 70 empresas líderes del país.
Frente a un escenario de alta inflación e incertidumbre cambiaria, los ejecutivos de finanzas prevén una desaceleración en el crecimiento de sus ventas y en la rentabilidad de sus empresas para el 2023. Además, el 60% de los responsables de negocios anticipa que sus inversiones se mantendrán constantes o caerán.
En lo que respecta a las inversiones, los empresarios sostuvieron que decrecerán con respecto al 2022. “Este año estuvieron enfocadas principalmente en activos fijos, incorporación de tecnología y aumento de capital de trabajo. Sin embargo, el 56% afirmó que estas inversiones no generaron la necesidad de nueva mano de obra”, destacaron el el informe de la encuesta.
“Las respuestas nos indican una muy alta utilización de la capacidad instalada”, dijo Pablo De Gregorio, socio de EY Argentina.
Acerca de las fuentes de financiación que emplearon las empresas para sus proyectos, el 31% afirmó que se autofinanció, el 27% que lo hizo a través de entidades bancarias y el 19% con sus proveedores. Luego, el 11% dijo que lo hizo con la casa matriz, el 7% con el mercado de capitales y el último 6% con entidades financieras del exterior.
Mientras tanto, los agronegocios, la energía y la infraestructura continúan siendo los sectores con mayor potencial para impulsar el crecimiento y la exportación, según destacan en la encuesta que se les hizo a los ejecutivos de empresas.
“El nuevo contexto geopolítico que enfrentamos producto de la guerra en Europa es visto como una gran oportunidad, y parece haber consensos sobre lo que hay que cambiar para aprovecharlo”, agregó De Gregorio.
Por otra parte, los ejecutivos destacaron que la principal acción que podría ejecutar el Estado para mejorar la competitividad y facilitar sus planes de inversiones, sería la “simplificación tributaria y administrativa” y “un acuerdo gobierno-sindicato-empresas”.
En cuanto a las medidas que podrían favorecer la confianza para decidir sobre una nueva inversión, los ejecutivos de las setenta compañías participantes de la encuesta pidieron por un plan económico claro y sustentable en un 30%, una política cambiaria estable en un 25%, una reforma tributaria que estimule la inversión en un 19%, leyes de protección de la inversión en un 9%, acuerdos sindicatos-gobierno en un 7%, acuerdos sectoriales en un 5% y acuerdos internacionales 2 por ciento.
Además de esto, los ejecutivos consultados manifestaron algunas de sus prioridades donde se debería focalizar “para concretar un país con éxito y futuro”. En primer lugar destacaron que Argentina debe ser uno de los grandes proveedores de alimentos al mundo con un 26% de las respuestas, ser líderes en la producción y exportación de gas no convencional y energías renovables también con un 26% de las respuestas, liderar la exportación del sector de la economía del conocimiento con un 19%, ser un gran jugador en el mercado de la minería, producción de litio y otros minerales con un 15%, agregar valor a los productos de las economías regionales con un 10% y por último, con el 3% de las respuestas, liderar el desarrollo del ecosistema emprendedor y tecnológico de América Latina.
“Tenemos una parte del camino recorrido. Sabemos hacia donde deberíamos ir y en lo que tenemos que cambiar. Solo necesitamos de protagonismos y consensos para que esta transformación pueda convertirse en realidad”, concluyó De Gregorio.
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