La producción del mes de julio, ajustada por estacionalidad, mostró una caída de 2,9% en la comparación con el mes anterior, según un informe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL). De esta forma, se encadenan dos meses de retracción. “La actual fase que se desarrolla desde octubre del año pasado, alcanzó el mayor nivel de actividad entre los meses de abril y mayo pasados. Los indicadores que permiten monitorear la sostenibilidad de la fase han mostrado un deterioro. El crecimiento industrial desacelera desde abril pasado, y en julio el ritmo de avance resultó inferior al de la tendencia de largo plazo”, explicaron desde FIEL.
El Índice de Producción Industrial (IPI) de FIEL registró en julio –de acuerdo a información preliminar‐ un avance interanual de 1,9%. Este crecimiento de la actividad fabril registrado en el mes es el menor (excepto por el freno en enero pasado) desde comienzos de 2021, antes del rebote respecto a los meses de la cuarentena en 2020.
La producción metalmecánica –uno de los sectores que venía liderando la recuperación‐, tuvo en julio el primer retroceso interanual luego de 18 meses
En julio pasado, y en comparación con julio de 2021, la industria automotriz tuvo un importante aumento de la producción, en parte explicado por las paradas de planta llevadas a cabo un año atrás. Junto con el avance de la producción de algunos bienes intermedios, como los productos de las industrias metálicas básicas, los minerales no metálicos y la refinación de petróleo, la mejora del bloque automotriz compensó la caída en la metalmecánica.
Precisamente, la producción metalmecánica –uno de los sectores que venía liderando la recuperación, tuvo en julio el primer retroceso interanual luego de 18 meses. Con todo, en el acumulado para los primeros siete meses de 2022, la industria recorta su ritmo de crecimiento a 4,4% en la comparación con el mismo periodo de 2021, según los datos de FIEL.
“La mejora interanual de la producción industrial de julio da cuenta de un recorte en la dinámica de la actividad. El avance se sostuvo fundamentalmente en el aumento de la producción automotriz y otros intermedios que compensaron la caída en la metalmecánica. En la medición desestacionalizada, la actividad acumula dos meses de retracción”, resumió el informe de FIEL.
Para agosto, los faltantes de partes y piezas en la industria automotriz a causa de los problemas logísticos globales y el acceso a las divisas, derivaron en nuevas paradas en algunas de las terminales, mientras que el conflicto en el sector de neumáticos continúa prolongándose. “Para la actividad industrial en su conjunto se anticipa otra merma en la dinámica de la recuperación”, anticiparon.
Para la actividad industrial en su conjunto se anticipa otra merma en la dinámica de la recuperación, anticiparon desde FIEL
Esta semana, la Fundación Observatorio PyME (FOP) presentó sus perspectivas para la segunda parte del año. Algunos de los puntos que destacaron:
- En el conjunto de PyME manufactureras que son importadoras directas, se estima una caída promedio del 13% de la producción con relación a lo planeado por las empresas para el segundo semestre del año.
- Los precios de las manufacturas PyME evolucionaban a mitad de camino entre el dólar oficial y el paralelo hasta el primer trimestre del año, pero aceleraron en el segundo, acercándose al MEP. El tipo de cambio oficial está rezagado también en términos de los precios industriales PyME.
- Se mantiene la restricción en la oferta productiva, relativamente más afectada por las dificultades para importar bienes e insumos intermedios, la restricción puede presionar los precios al alza.
En tanto, según los datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la producción de la industria manufacturera pyme subió 1,7% interanual en julio en términos reales, y tuvo una retracción de 0,9% en la comparación mensual (contra junio). En el acumulado de enero a julio, presentó una variación interanual positiva de 2,8%.
“El uso de la capacidad instalada de las empresas de la muestra se ubicó en 71,4%, es un 1,8% por debajo de junio, con el nivel más elevado en Maderas y Muebles (77,1%) y el más bajo en Papel, Cartón, Edición e Impresión (68,1%). Solo un sector, Productos químicos y plásticos, aumentó el uso de sus instalaciones en el mes del relevamiento, mientras que el resto de los ramos registraron disminuciones”, detalló el informe de CAME.
Las industrias pymes debieron enfrentar la agudización de algunos problemas que ya formaban parte de la coyuntura, como las demoras en el abastecimiento de insumos, falta de valores de referencia, subas de precios
“El mes de julio fue muy complejo en la operatoria cotidiana del empresario industrial pyme, porque estuvo marcado particularmente por cierta incertidumbre más de tipo de política, generada a partir del recambio de funcionarios con injerencia en materia productiva. En este marco, las industrias pymes debieron enfrentar la agudización de algunos problemas que ya formaban parte de la coyuntura, como las demoras en el abastecimiento de insumos, falta de valores de referencia, subas de precios que, entre otras cuestiones, obstaculizaron la producción”, dijeron.
“En este contexto, la mayoría de los sectores relevados mejoraron en la comparación interanual y la mitad de ellos, también lo hizo en la confrontación intermensual. Sin embargo, desde el pico registrado en marzo 2022, se observa una marcada reducción de la dinámica de crecimiento de la industria pyme generando cierta preocupación sobre el sostenimiento de esta tendencia”, indicaron.
En el rubro de alimentos y bebidas, la producción cayó un 2,2% interanual y 4,6% intermensual en julio. Los faltantes y la suba de precios de insumos fueron algunos de problemas planteados por las empresas. “Aumentaron exponencialmente, todos los costos de manera constante a lo largo del mes”, manifestaron desde una pyme dedicada a la elaboración de productos de panadería y confitería de Ciudadela, provincia de Buenos Aires. “Estamos suspendiendo producciones porque tenemos graves problemas para conseguir café”, dijo la responsable de una empresa productora de cápsulas de café de la ciudad de Mar del Plata. Una situación similar planteó un productor de cerveza artesanal de Entre Ríos, frente a la escasez de lúpulo.
En indumentaria, la fabricación bajó 10,6% anual y 4% mensual en julio. Uno de los problemas de este sector fue el incremento de los costos de insumos, que en julio siguieron la dinámica del dólar blue, según algunas firmas consultadas. “La producción debería haber sido mejor, hubo un aumento de 30% en la materia prima del que solo trasladé 5% pero igual la venta se resintió”, dijo la propietaria de una fábrica de ropa deportiva de Godoy Cruz, en Mendoza.
En productos químicos y plásticos, la producción trepó 1,3% anual, pero declinó 7,4% mensual. La mayoría de las empresas consultadas declararon dificultades para comprar insumos y demoras en las habilitaciones para importar. En el acumulado del año, el ramo contabilizó un incremento de 1,7%. “No pudimos comprar 20 toneladas de goma y de continuar este inconveniente vamos a tener que parar la fábrica”, advirtieron desde una firma de Posadas, en Misiones. En tanto, en Paraná, Entre Ríos, desde una fábrica de envases plásticos manifestaron que tienen “serios problemas para cancelar deudas en el exterior ya sea para compra de materias primas e insumos, como de repuestos y maquinaria”.
El índice elaborado por CAME mide mensualmente la evolución de la facturación de la industria manufacturera pyme; la muestra es de 370 casos de 22 provincias y CABA.
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