En medio de un verano en Europa fuertemente marcado por el cambio climático, con temperaturas que superaron los promedios históricos, el ministro delegado de Transportes francés, Clément Beaune, pidió que se restrinjan los vuelos de jets privados debido a su importante contribución negativa a la huella de carbono, abonando a un debate que desde hace semanas está en el ojo de la tormenta de París.
“Sin recurrir a la demagogia o lanzar ataques ad hominem, hay algunos comportamientos que ya no son aceptables”, dijo Beaune, cercano al presidente Emmanuel Macron, al periódico Le Parisien durante el fin de semana. “Creo que deberíamos actuar para regular los vuelos de jets privados”, aseguró
“Hay razones urgentes, imperativos económicos, pero no puede ser un modo individual de viajar cómodamente, mientras que la movilización general iniciada por el presidente exige un esfuerzo de todos”, dijo el ministro de Transportes francés.
Según el periódico, el ministro estaría considerando aplicar incentivos para frenar el uso de aviones privados e incluso la aplicación de impuestos especiales. Sin embargo, tras las declaraciones de Beaune, su entorno aclaró en France Télévisions que no se trataba de prohibir los vuelos privados, ya que “la aviación de negocios es una actividad económica importante en Francia”, sino más bien, “definir las reglas a nivel europeo”, tal como detalló Le Monde.
Políticos de la izquierda francesa y de los partidos “verdes”, que conforman el mayor bloque de oposición en la Asamblea Nacional desde las elecciones de junio, han pedido una prohibición total del uso de aviones privados por parte de líderes empresariales y personas ricas-tal como indicó Financial Times-, y dicen que quieren proponer un proyecto de ley en los próximos meses.
Julien Bayou, secretario general de Europa Ecologie-Les Verts (EELV), se mostró “encantado” en declaraciones a Franceinfo de que el tema esté surgiendo en el debate político, pero pidió medidas mucho más firmes. “Un jet contamina diez veces más que un avión. Por lo tanto, es hora de desterrarlos, porque literalmente nos envenenan”, denunció.
El político “verde” no se siente satisfecho con la tributación como modo de desincentivación. “Si ponemos un impuesto, por ejemplo de 15.000 euros, ni siquiera sería dinero de bolsillo para esta gente”, estimó el secretario general de EELV citando datos según los cuales la fortuna media de los usuarios de aviones privados es de 1.300 millones de euros.
Los vuelos privados producen una huella de carbono por pasajero de 5 a 14 veces mayor que los vuelos comerciales
No obstante, la postura del ministro Beaune es más conciliadora, el funcionario quiere plantear el tema en una reunión de ministros de Transporte de la Unión Europea en octubre y ha dicho que sería más efectivo tener un sistema de impuestos al carbono o regulación de vuelos de aviones privados en todo el territorio de la UE que una solución puramente francesa.
El problema es que el terreno está allanado, las autoridades de transporte europeas deberán crear desde cero una regulación para la problemática de los aviones privados, en un momento donde esta clase de transporte proliferó producto de la pandemia, ya que más clientes buscan evitar cancelaciones de vuelos y estar expuestos a nuevos contagios.
Bots de Twitter
Una de las cuentas de Twitter de rastreo de aviones más célebres del momento es ElonJet, que hace un seguimiento de todas las aeronaves privadas de Elon Musk y los vuelos que realiza, evidenciando la cantidad de viajes que realiza el magante varias veces por semana.
El desarrollador del bot que realiza el seguimiento, el joven estadounidense de 19 años, Jack Sweeney, creó más sistemas automatizados destinados a diferentes figuras reconocidas del mundo, desde importantes empresarios hasta estrellas de la música y Hollywood, como Tom Cruise y Kim Kardashian, entre muchos otros.
Otras cuentas destacadas que realizan seguimientos de personas célebres y adineradas, son iflybernard (60.000 seguidores en Twitter) y Laviondebernard (75.000 seguidores en Instagram y 31.000 en Twitter), ambos perfiles franceses y enfocados en los cielos y personalidades de Europa. El nombre Bernard, surge de Bernard Arnault, el francés de 73 años ostenta el puesto de ser el hombre más adinerado de Europa y tercero de todo el mundo, según la lista de Forbes, y fue la primera persona a la que comenzaron a rastrearle sus vuelos los mencionados sitios.
Según Le Monde, el sector aéreo es responsable del 2 al 3 por ciento de las emisiones globales de carbono, no obstante, según un informe de Transport & Environment publicado en mayo, los vuelos privados producen una huella de carbono por pasajero de 5 a 14 veces mayor que los vuelos comerciales y 50 veces superior a los trenes.
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