Silvina Batakis avanza sobre la cúpula del Banco Nación y nombró a tres directores de su confianza. Se tratan de funcionarios que la acompañaron en su breve paso por el Ministerio de Economía.
A través del Decreto 518/2022, publicado este viernes en el Boletín Oficial, el Gobierno Nacional designó como nuevos directores del BNA a los licenciados en Economía, Martín Miguel Di Bella y Martín Alberto Pollera; y al abogado José Miguel Ballesteros. Los dos primeros “para completar un período de ley que vence el 30 de diciembre de 2023 y el restante hasta el 14 de enero de 2024.
Según trascendió, ni bien se confirmó que Batakis pasaría a ser la nueva titular del Banco Nación, en reemplazo de Eduardo Hecker, en el marco de la última reestructuración del Gobierno Nacional tras la turbulenta salida de Martín Guzmán del Palacio de Hacienda, habría conseguido la promesa de Alberto Fernández de poder hacer las designaciones en el directorio de la entidad.
Por pedido expreso de la economista, el Poder Ejecutivo comenzó a exigir la renuncia a todos los directores del BNA. De esta forma, lo que comenzó como un rumor con el correr de los días se fue concretando. Desde la Secretaría de Legal y Técnica de Presidencia de la Nación empezaron a llegar los pedidos de dimisión.
Semanas atrás, fuentes oficiales se lo confirmaron a Infobae, aclarando que hasta el momento los pedidos habían sido solo tres y que el resto del directorio “tiene apoyos propios”, además de que no tiene intenciones de renunciar. “Hubo algunos pedidos de renuncia desde Presidencia, es verdad. Lozano, entre ellos”, destacaron el pasado 9 de agosto.
En efecto, los pedidos llegaron para Claudio Lozano, Federico Sánchez y Guillermo Wierzba, y sus salidas fueron confirmadas a las horas.
En una charla de “transición” que mantuvieron Batakis con Hecker, la economista le habría pedido que le comunique al directorio que debían presentar la renuncia. Hecker no accedió y los directores avisaron que no iban a renunciar, pese a que los trascendidos indicaban que Alberto Fernández le habría concedido otorgarle a Batakis la posibilidad de designar todo el directorio como “premio consuelo” por su fugaz paso por el Palacio de Hacienda y por lo desprolija que fue su salida -de parte del Gobierno Nacional- para que Sergio Massa asuma como “superministro”.
Este viernes se oficializaron las designaciones de tres hombres del riñón de Batakis, quienes la acompañaron esas tres semanas que fue ministra de Economía: Di Bella, fue secretario de Hacienda; Pollera, fue secretario de Comercio Interior; en tanto, Ballesteros es ex titular de la secretaría Legal y Administrativa. Todos ellos habían puesto a disposición su renuncia cuando se confirmó que Massa reemplazaría a Batakis. El decreto publicado esta madrugada confirmando el arribo de los tres funcionarios al Banco Nación lleva la firma del presidente Alberto Fernández y del propio Massa.
Uno de los focos de resistencia que se encontró Batakis en el BNA fue Claudio Lozano, quien lanzó duras críticas cuestionando el procedimiento mediante el cual se efectuó su salida del directorio de la institución. “Estoy preocupado porque Batakis fue un error en Economía y para compensarlo, se comete un segundo error, que es descabezar un Banco que recibimos vaciado y hoy pudo revertir esa situación“, indicó el economista, que es además líder del partido Unidad Popular, uno de los sellos que integran el Frente de Todos como alianza.
Luego de presentar su dimisión, el exdirector del Banco Nación, reconoció públicamente que le pidieron la renuncia pero “no hubo motivo” ni “argumentos”. De hecho, indicó que recibió un llamado desde Casa Rosada: “Había una instrucción presidencial de pedir mi salida y la de otros directores”.
Ante el contundente pedido, Lozano remarcó que aceptó, pero pidió que sea el Presidente, el jefe de Gabinete o el secretario general de la presidencia quién se lo confirmara. Es así que fue Julio Vitobello quién finalmente le informó la decisión vinculada a su salida.
Frente a los cambios ocurridos en las últimas horas en la institución, sostuvo que se trata de un “grado de ineptitud evidente”. De hecho, apuntó contra Batakis: “Pidió la renuncia a todo el mundo, cuando no tiene facultades para eso. Resultó poco entendible”.
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