La alta demanda de viajes que está experimentando el mundo después de la pandemia sigue causando severas disrupciones en el tráfico aéreo internacional y produciéndoles fuertes dolores de cabeza a los viajeros de todo el mundo.
Sobre todo para los pasajeros de KLM Royal Dutch Airlines. La compañía aérea holandesa es la que más problemas está teniendo en Europa, con graves retrasos y cancelaciones de sus vuelos.
KLM canceló el 5,8% de sus vuelos programadas entre el 26 de abril y el 26 de julio de este año, según datos de Cirium, compartidos por Bloomberg. Estos inconvenientes le costaron caro a la empresa que tuvo que recompensar a todos los viajeros afectados.
En total la empresa tuvo que desembolsar 71 millones de dólares en razón de indemnizaciones para los pasajeros afectados únicamente durante el segundo trimestre de 2022, los datos se conocieron cuando Air France-KLM Group publicara su balance de resultados para el período., tal como lo informó Business Insider. A quien no le fue tan mal es a su empresa hermana, Air France, la compañía francesa canceló sólo el 0,9% de sus vuelos durante el mismo periodo.
No obstante, el caso de KLM resalta por la enorme cifra que tuvo que pagar en indemnizaciones, pero todas las aerolíneas del mundo están sufriendo problemas para acaparar toda la demanda acumulada de viajes que tomó fuerza con el fin de las restricciones. Esta situación produjo cancelaciones, demoras y hasta una acumulación de equipajes extraviados en diferentes aeropuertos del planeta.
El principal problema denunciado por KLM y otras aerolíneas es la escasez de personal en los aeropuertos de Europa y Estados Unidos, sin ir más lejos, la compañía holandesa tiene su Hub de operaciones en el aeropuerto de Schiphol de Ámsterdam que, durante julio, tuvo el 61% de sus vuelos demorados y el 5,2% cancelados, según compartió Business Insider con datos de Hopper.
Las jubilaciones
Otro de los problemas denunciados, esta vez por las aerolíneas de los Estados Unidos, es el recambio generacional de los pilotos que se vio acelerado en los últimos tiempos. Según un artículo de Forbes, durante la pandemia muchas aerolíneas jubilaron a sus pilotos frente a la necesidad de recortar sus gastos en un momento en el que directamente no había vuelos.
Las empresas redujeron sus plantillas de comandantes y ahora se vieron en la necesidad de adquirir personas para que conduzcan sus aviones, pero la oferta de nuevo personal no alcanza, debido a que hoy en día es mucho más costoso tener a la aviación como un hobby que lo que era antes, por lo tanto menos personas llegan al oficio “naturalmente”.
Retomando las complicaciones de KLM, la compañía ya anticipó que hasta finales de agosto cancelaría cerca de 20 vuelos por día, además, limitó la venta de sus pasajes más económicos para reducir la demanda en sus vuelos, Lufthansa también tomó esta medida, la aerolínea alemana tiene la segunda peor performance con 3,1% de sus vuelos cancelados durante el segundo trimestre del año.
Lo cierto es que parece que lo que le sucedió a las aerolíneas no estaba previsto. Benjamin Smith, CEO del grupo Air France-KLM, dijo que su empresa se había preparado para cubrir los niveles de la demanda contenida que habría después de la pandemia, pero que las aerolíneas no son inmunes a “grandes desafíos operativos” que ocurren a nivel mundial.
El ejecutivo dijo que mantener a sus clientes satisfechos es una de las principales prioridades de la empresa y que es consciente de que no han podido brindar la calidad de servicio que sus pasajeros esperan. Por ello han debido indemnizarlos con 71 millones de dólares en total.
SEGUIR LEYENDO