El Banco Central siguió comprando bonos ajustados por inflación para sostener su precio y auxiliar a Martín Guzmán

A la par de la licitación de deuda, el BCRA jugó fuerte para intervenir y ayudar a la estrategia del ministerio de Economía

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FOTO DE ARCHIVO: Peatones caminan frente a la fachada del Banco Central de Argentina en Buenos Aires, Argentina, 8 enero, 2018. REUTERS/Agustin Marcarian
FOTO DE ARCHIVO: Peatones caminan frente a la fachada del Banco Central de Argentina en Buenos Aires, Argentina, 8 enero, 2018. REUTERS/Agustin Marcarian

Los mercados tuvieron ayer una rueda intensa y volátil que terminó con el dólar firme, aunque por debajo de los máximos del día. No hay que olvidar que a fin de junio es cuando las empresas necesitan más pesos para el pago de sueldos y aguinaldo.

“El contado con liquidación aguantó en el máximo todo lo que pudo, pero a dos horas de la rueda hubo un reversal importante de los bonos que comenzaron a subir por una toma de ganancias en el contado con liquidación. No hay que olvidar que hace un mes valía $210 y ahora las empresas pudieron venderlos a $255 antes del cierre”, señaló Nicolás Rivas, trader de Buenos Aires Valores (BAVSA)

De esta manera, cuando los precios de los AL30 y del GD30 pasaron de una caída de 3% a una suba de 3%, el MEP subió $1,36 (+0,6%) a $243,07 y el contado con liquidación, $3,85 (+1,6%) a $250.

El “blue” aprovechó la demanda minorista para aumentar $7 a $239, récord absoluto. En el mes acumula alzas de 16%, es decir que en pocos días se aproximó a la inflación de los últimos 3 meses. La distancia con el dólar solidario que terminó en $214,09 y vuelve a alentar el “puré”, como se denomina a la operación de comprar el cupo de USD 200 dólares que tienen los clientes de los bancos para revenderlos en el “blue”. Esta operación hoy deja una ganancia de $20 por dólar o sea $ 4.000. No extrañaría que el Banco Central, en su afán de reprimir toda la salida posible de dólares del sistema, suprima esta operación.

En la plaza mayorista, el dólar aumentó 16 centavos a $124,88 y el Banco Central fue el único comprador porque no autorizó las operaciones de los importadores. De esta manera, se hizo de USD 150 millones que sumados a los USD 3.980 millones que transfirió el FMI, hicieron que las reservas subieran USD 4.018 millones a USD 42.139 millones. En el medio hubo un pago de USD 100 millones para energía.

En tanto, el Central siguió comprando bonos CER para mantener su precio. Es la ayuda que le pidió el ministro Martín Guzmán al titular del Banco Central, Miguel Pesce. De esta manera, la entidad empapela de pesos la plaza a cambio de bonos indexados. Con esos pesos, los organismos oficiales, principales vendedores de bonos al Central, se presentaron a la licitación de títulos del Tesoro donde se recaudaron $248.078 millones.

Para Christian Buteler, analista financiero, “el resultado de la licitación fue muy bueno teniendo en cuenta el contexto donde los bonos en pesos no dejan de bajar y el Banco Central tiene que salir a sostenerlos. En el mes el Tesoro termina con un 106% de renovación que tal vez pueda tranquilizar al mercado”.

Si se analiza la licitación, el 82% de lo licitado vence a fin de año. Son pocos los que quisieron ir más allá. Por otra parte, no hay que olvidar que para poder pagar el total de $600 mil millones que venció en junio, el Banco Central contribuyó, a través de la compra de bonos, con el 60% de ese monto.

En tanto, los bonos de la deuda siguen padeciendo el desarme de dos fondos del exterior que no quieren saber más nada de los activos argentinos. Hubo bonos con legislación extranjera como el GD41 que bajaron casi 6%. De esta manera, el riesgo país aumentó 78 unidades (+3,2%) a 2.508 puntos básicos.

Este derrumbe constante de los bonos hace replantearse cuál es el piso porque hay títulos que valen menos de 20 dólares y cortan cupones de 2% semestralmente. Cada cupón significa el 10% del valor del bono. Si alguien se anima a comprarlos, puede tener un retorno en dólares superior a 40%. El problema es que estos títulos no tienen grandes vencimientos en el corto plazo, pero sí más adelante.

La Bolsa negoció $1.641 millones, un monto elevado. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, subió 2,89% en pesos y 1,3% en dólares. Los papeles más destacados fueron los de la cementera Hargor (+7,09%), Aluar (+6,39%) y Banco Macro (+5,85%).

Los ADR’s -certificados de tenencias de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una rueda con predominio de bajas. MercadoLibre (-7,3%), y Globant (-5,1%) fueron los más afectados.

Para hoy se espera otra rueda con firme intervención del Banco Central para sostener los bonos CER. Lo curioso es que los mantiene en alza a costo de emitir más dinero que provocarán más inflación y encarecerán la deuda del Tesoro, que está indexada en más de un 80%.

El dólar seguirá al acecho porque sabe que pasado el fin de mes aumentará la demanda y que hay empresas que están reteniendo sus productos a la espera de una decisión sobre su ingreso en el futuro al mercado mayorista para obtenerlos a precio oficial. Si eso no sucede, se verán ajustes de precios que seguirán la parábola de los dólares financieros.

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