Según un estudio realizado por el portal de empleos Bumeran y la organización Grow, Género y Trabajo sobre Diversidades en el trabajo, el 35% de las personas sufrió algún tipo de discriminación laboral. La encuesta Diversidades en el trabajo, que contó con la participación de 539 personas que respondieron a las preguntas en el transcurso de mayo de forma online, arrojó que si se desagregan los datos por género, se observan grandes diferencias: mientras que el 41% de las personas de otras identidades de género, el 38% de las mujeres, y el 30% de los varones respondieron haber sufrido discriminación en su lugar de trabajo.
Los resultados del estudio, difundido en el Día Internacional del Orgullo LGBT+, permiten afirmar que las personas de otras identidades de género y las mujeres experimentan con mayor frecuencia que los varones situaciones de discriminación en el ámbito laboral.
De acuerdo al relevamiento, el 24% de las personas que recibieron algún tipo de discriminación afirmaron que fue por motivos de género. El 40% de las mujeres, el 25% de las personas de otras identidades de género, y el 6% de los varones manifestaron este motivo.
Asimismo, el 13% aseguró haber sufrido discriminación por su orientación sexual. En este caso, afecta al 25% de las personas de otras identidades de género, el 17% de los varones y el 7% de las mujeres, según revela el informe.
En ese marco, un 11% de los varones y un 5% de las mujeres atribuyeron la discriminación al color de piel, un 9% de los varones y un 5% de las mujeres a una discapacidad, y un 8% de varones y las mujeres a la edad. Ninguna de las personas de otras identidades de género respondió haber sufrido discriminación por estos motivos.
De estos números se desprende que en el ámbito laboral las cuestiones de género y de orientación sexo-afectiva son los motivos de discriminación más frecuentes.
“La alta preponderancia de discriminación por razón de género en las mujeres se debe a un complejo entramado que se vincula tanto a la asignación de tareas según género, los dobles estándares, como a la asociación de las mujeres al ámbito doméstico y a la realización de tareas de cuidado, o a estereotipos que limitan su acceso a espacios de liderazgo. Se sostienen desigualdades que naturalizan múltiples discriminaciones”, explicó Georgina Sticco, cofundadora de Grow.
Y agregó: “La discriminación por orientación sexual es experimentada en mayor medida por varones. Esto lo podríamos asociar a mandatos de masculinidad que afectan a los varones y a la libertad con la que pueden vivir su sexualidad. En relación a las personas de otras identidades de género los motivos de discriminación son variados”.
La alta preponderancia de discriminación por razón de género en las mujeres se debe a un complejo entramado que se vincula tanto a la asignación de tareas según género, los dobles estándares, como a la asociación de las mujeres al ámbito doméstico y a la realización de tareas de cuidado, o a estereotipos que limitan su acceso a espacios de liderazgo (Sticco)
La encuesta indicó además que si bien un 35% afirmó haber sufrido algún tipo de discriminación en el mundo laboral, el número de personas que dice haber presenciado una situación de este tipo asciende al 40%. El 50% de las personas de otras identidades de género, el 43% de las mujeres y el 34% de los varones contestaron de esta manera.
En tanto, en la mitad de los casos afirmativos, la discriminación presenciada se debió al género o la orientación sexual con un 30% y un 20%, respectivamente.
Cómo responden las organizaciones ante la discriminación
Más de la mitad de las personas entrevistadas creen que hay oportunidades de mejora en el tratamiento que le dan las empresas a las temáticas de diversidad.
En ese sentido, el 25% cree que se hacen cosas pero sin llegar a comprometerse con la causa, y el 37% directamente no ve cambios y considera que las empresas son conservadoras. Asimismo, un 19% ve un cambio positivo y otro 19% cree que se está en buen camino, pero faltan políticas y educación.
Respecto a si se implementan medidas para desarrollar un ambiente más inclusivo, el 56% considera que no y un 44% que sí. Mientras que si se desagrega por identidad de género, perciben menos avances las personas de otras identidades (63%) y las mujeres (59%) que los varones (51%).
Ocultar la identidad de género
El 53% de las personas de otras identidades de género que participaron en la encuesta tuvo que ocultar su identidad de género en el trabajo, según se desprende del relevamiento. Las causas principales por las que respondieron haber tenido que ocultar su identidad de género son por miedo a sufrir discriminación en un 50% o a perder su empleo en un 40 por ciento.
Con respecto a la orientación sexoafectiva, el 17% de las personas respondió que tuvo que ocultarla en el trabajo. En este caso, el 44% lo hizo por miedo a sufrir discriminación y el 40% por miedo a perder el trabajo. Además, esto le sucedió al 47% de las personas de otras identidades de género, al 18% de los varones y al 12% de las mujeres.
“Más allá de la existencia de leyes anti discriminación, de identidad de género, de matrimonio igualitario y de identidades no binarias, entre otras, se sostiene un entramado de violencia y discriminación que hace que las personas LGBTIQ+ vivan atemorizadas ocultando su identidad o su orientación sexual para evitar situaciones de violencia en el ámbito laboral o por temor a perder su trabajo”, analizó Sticco.
Y concluyó: “Estas respuestas demuestran la necesidad de llevar adelante medidas en las organizaciones que permitan a todas las personas vivir su género y su orientación sexo afectiva de manera libre, sin miedo a sufrir discriminación o a perder su trabajo por ello”.
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