Empieza la semana más complicada desde que asumió el gobierno: el mercado no quiere bonos en pesos ni en dólares

El equipo económico, ahora con la participación de Daniel Scioli, se verá forzado a estrechar el cepo para cuidar las reservas del Banco Central

Scioli, Pesce y Guzmán, tres a cuidarse, y a cuidar los dólares del Banco Central

Si hay que ponerle fecha a la debacle, es el 8 de junio pasado, cuando los inversores dejaron de creer en los bonos que ajustan por CER. El Tesoro perdió entonces el único crédito disponible: el nominado en pesos.

Los ahorristas comenzaron a rescatar sus colocaciones en fondos de inversión de los bancos y el Banco Central tuvo que salir a comprar bonos para que no se desplomara su precio. El resultado, en lo que va del mes entre compra de bonos y financiamiento al Tesoro, fue una emisión de $700.000 millones, 20% de la base monetaria.

Al desplome de los bonos en pesos le siguió el de los títulos en dólares. En los primeros días de junio vencen intereses de bonos de la deuda por USD 600 millones que el Central no tendrá problemas en pagarlos porque esta semana recibe USD 4.000 millones del FMI, pero el mercado está inquieto.

De todas maneras, el viernes ante la fuerte caída de los bonos de la deuda, el riesgo país se disparó 115 unidades (+ 5%) a 2.400 puntos básicos el nivel más alto post default. Desde la salida del default a principios de setiembre de 2020 la paridad de los bonos con ley extranjera cayó más de 50 por ciento. Solo en lo que va de este año, perdieron 45 por ciento.

Los que se tentaron en su momento con precios de USD 30 dólares y recompraron, se quemaron con leche y ven a la vaca y lloran. Por eso venden los bonos y no los recompran en estos pisos.

Volver al pasado

Los precios de algunos bonos son similares a los que tenía el país cuando entró en default. El AL30D vale USD 20,90 y rinde 43,2 por ciento. Es uno de los bonos con los que se operan los dólares financieros que el viernes tuvieron leves retrocesos de $1,36, a $230,87 en el MEP, y de 96 centavos, a $236,36, en el contado con liquidación.

El Banco Central intervino activamente para hacer subir a los bonos con CER atento a la licitación de mañana por $230.000 millones de los títulos del Tesoro para los que preparó un menú de emergencia que sirve para tomar aire antes de sumergirse.

Se incluye una Lelite que paga una tasa efectiva de 61,72% anual que vence el 29 del mes próximo. También se reabren Letras de Descuento que vencen en agosto, octubre y noviembre con tasas de hasta 70,80% efectiva anual.

Además, se reabren Lecer con precios máximos de suscripción que y garantizan 2,75% sobre inflación y vencen en abril de 2023 y abril de 2024.

Mercado desorientado

Foto de archivo - Operadores en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Argentina. Sep 26, 2018. REUTERS/Marcos Brindicci

Según Christian Buteler, analista financiero, “el mercado está desorientado por la política monetaria del Banco Central. Hace dos semanas era contractiva, elevando la tasa de interés para retirar pesos del mercado y días después lanzó una política expansiva comprando bonos y emitiendo pesos. Esa conducta si fuese por no más de 72 horas frente a una caída puntual para estabilizar al mercado, se puede entender porque puede volver a vender esos bonos al mercado y recuperar los pesos. Pero ya es algo recurrente y lo va a sostener en el tiempo. Es contradictorio con la suba de tasas que hizo cuando la política era de contracción de pesos. Entiendo la importancia de mantener la deuda en pesos, pero en la situación inflacionaria que está en la Argentina, el Banco Central tiene que limitarse. No puede abarcar todo. Tiene que priorizar la lucha contra la inflación. Por acá pasa el punto de la crisis de confianza del mercado”.

“El mercado está desorientado por la política monetaria del Banco Central. Hace dos semanas era contractiva, elevando la tasa de interés para retirar pesos del mercado y días después lanzó una política expansiva comprando bonos y emitiendo peso” (Cristian Buteler)

Lo que no dijo Buteler es que el rumor que corre entre las mesas, es que la vicepresidenta trabaja para desplazar a Alberto Fernández y eso es lo que le restó la confianza que quedaba a los bonos en pesos. El Boncer 2026 perdió 7,26% y el Boncer 2024 cedió 6,49%.

El otro tema preocupante es la caída de reservas. El viernes el Central vendió USD 95 millones y perdió USD 79 millones que dejaron a las reservas en USD 38.004 millones.

Desde hoy habrá un cepo encubierto para todas las empresas que necesiten dólares para importar. Los dólares financieros van a estar más demandados porque las empresas que conseguían dólares en el mercado mayorista tenían prohibido acudir a esa plaza.

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