Como en cada temporada de invierno, los destinos patagónicos y cordilleranos se preparan para el arribo de miles de turistas nacionales y del mundo, especialmente de Brasil, principal origen de viajeros para el turismo receptivo argentino, 21% del total de ingresos de mayo, según datos oficiales del Ministerio de Turismo y Deportes.
El atractivo de la montaña reside en los paisajes montañosos regados de nieve y todos los deportes y actividades que sólo pueden realizarse durante el invierno. Destinos como Bariloche, Ushuaia y Mendoza suelen ser de los más populares durante el receso de mitad de año, y como consecuencia pueden ser los más costosos.
En el turismo, como en cualquier otro rubro, el vaivén entre la oferta y la demanda juegan un rol importante en las tarifas, tanto de los hoteles, alojamientos, excursiones, actividades y en los precios de los pasajes de avión, uno de los gastos más significativos para el bolsillo de los turistas. Por ello la anticipación es importante, cuanto antes se adquieran los tickets, más barato saldrán y el gasto global del viaje será menor.
Un informe detalla que los precios de los pasajes hacia los tres destinos mencionados anteriormente (Bariloche, Mendoza y Ushuaia), que son a la vez los más buscados para vacacionar durante el invierno, aumentaron significativamente entre abril y mayo pasados. Tal como lo detalla Viajala, los boletos aéreos para estas ciudades aumentaron entre un 34% y un 71%.
Los precios promedio de los pasajes hacia Bariloche (ida y vuelta desde Buenos Aires) durante mayo, el destino estrella de la última temporada de verano y que ya se posiciona como uno de los más populares durante el invierno, es de $22.346 pesos, un aumento del 42% en relación a las tarifas promedio de abril.
En cuanto a Mendoza, el precio promedio de los pasajes en mayo es de $15.000, lo que representa un 71% de incremento de las tarifas en relación al mes de abril.
Por último, los pasajes ida y vuelta a Ushuaia se ubicaron en promedio en los $34.010, un aumento del 34% en comparación con abril.
“Las vacaciones de invierno se vendieron con mucha anticipación”, detalló Julián Gurfinkiel, co-fundador y CMO de Turismocity, y confirmó que una buena parte de las reservas para la temporada invernal se hicieron durante enero y febrero, “por lo tanto los precios durante abril y mayo fueron bastante altos”, dijo el experto.
Fuentes del sector explicaron a Infobae que los aumentos en los precios de los pasajes aéreos no se deben únicamente a la estacionalidad y a la proximidad de las vacaciones de invierno, sino que hay otros tres componentes que habría que considerar.
En primer lugar está el “exceso de demanda”, que se explica a su vez por tres factores. El primero es el creciente interés de turistas extranjeros en vacacionar en Argentina, un país que por su situación cambiara tan dispar con el dólar, se vuelve barato para los viajeros internacionales; por otra parte detectan un fuerte interés de argentinos por vacacionar dentro del país, inversamente al primer motivo, desincentivados por los altos costos de viajar fuera del país, eligen los destinos nacionales; por último están los argentinos que utilizaron Previaje y cuentan con una tarjeta con crédito para utilizar en la cadena turística.
El segundo componente del encarecimiento es el tipo de cambio desfavorable en sí, ya que encarece los servicios dolarizados para los bolsillos argentinos, tal es el caso de los pasajes aéreos que se venden tanto en el país como en el resto de la región y el mundo.
Por último, explicaron que el faltante de combustible, y su consecuente encarecimiento, también provoca que las tarifas de los pasajes aéreos suban, ya que se encarece toda su operabilidad, desde los vuelos en sí, hasta todos los servicios en tierra relacionados.
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