El Gobierno confirmó que buscará subir un 40% los valores del transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires, congelados desde 2019. Así lo anticipó ayer el jefe de Gabinete Juan Manzur en su exposición ante el Senado.
Si todo termina como prevé el gobierno, el boleto mínimo, que hoy cuesta 18 pesos, pasará a valer 25,20 pesos, y el más usado, que contempla entre 3 y 6 kilómetros, irá de 20 a 28 pesos.
Los otros tramos de boletos del transporte público también aumentarán en la misma proporción. Así, el que cubre de 6 a 12 kilómetros de 21 pesos a 29,40 pesos; el que cuesta actualmente 22 pesos (de 12 a 27 kilómetros) pasará a costar 30,80 pesos, mientras que el segmento más largo, de 27 a 45 kilómetros que hoy se paga 23 pesos tendrá un costo de 32,20 pesos.
Con todo, a pesar del aumento analizado, los valores del AMBA seguirán siendo los más baratos del país: casi un 70% menos que lo se paga en Bahía Blanca, unos 76 pesos, y 10 pesos más que el segundo más caro, en La Rioja ($35), según un relevamiento del ministerio de Transporte.
Hay tres capitales de provincia en las que el pasaje vale 60 pesos (Corrientes, Posadas y Río Gallegos). Y después, otras que lo superan: Neuquén, con $61,4; Santa Fe, Rosario y Córdoba, $69,5; Mar del Plata, con $74,38; y la mencionada Bahía Blanca en el tope de la lista de precios.
El secretario de Transporte de Nación, Diego Giuliano, confirmó hoy en entrevistas radiales que “el aumento de tarifas de colectivos en el AMBA se viene conversando hace mucho tiempo, analizamos la estructura de costos y es un sistema que está congelado hace 3 años, es decir, sin aumentos. Eso no ocurrió así en las demás jurisdicciones”.
En este sentido, sobre el aumento de tarifas en el Área metropolitana, Giuliano manifestó que “vamos a llevar adelante un incremento para el boleto de colectivos en el Área metropolitana que estaría aumentando 7,20 pesos, alcanzando la cifra de 25,20 pesos”.
Además, a nivel nacional, el funcionario sostuvo: “Estamos llevando adelante un debate sobre las asimetrías que existen en todo el país, el monto que se paga en el AMBA en relación al interior del país. En el Gobierno anterior se eliminó prácticamente el subsidio al interior que generó una asimetría profunda en la Argentina”.
“Por decisión del Presidente Alberto Fernández y el Ministro Guerrera aumentamos un 600 por ciento el subsidio al interior del país, y estamos en conversación con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para traspasar las líneas que le son propias a su jurisdicción y que quedaron en un lugar diferente respecto de todo el resto de la Argentina. La Ciudad Autónoma de Buenos Aires tiene que asumir la responsabilidad que le corresponde en su propio transporte”, puntualizó Giuliano.
Finalmente sobre los beneficios de la tarjeta SUBE, que en el AMBA durante abril impactaron positivamente en alrededor de 3 millones de personas, el funcionario nacional remarcó que “vamos a mantener los descuentos y los atributos sociales que se generan con la tarjeta SUBE, que son muy importantes y que aborda la Nación. En total es un 55 por ciento de descuento de la tarifa para los sectores de la sociedad que tienen más dificultades como son por ejemplo los jubilados y pensionados”.
Desde Transporte destacaron además que las tarifas del interior tienen diferentes particularidades que impactan en el número final que decide la jurisdicción. Por ejemplo, Córdoba fijó una tarifa gratuita para estudiantes, pero ese descuento lo traslada al boleto general; o Rosario que estableció la gratuidad para diferentes ONG locales.
¿Cuál debería ser el precio porteño?
Según un cálculo de la Fundación Libertad y Progreso, actualizar la tarifa en cuestión por inflación, daría como resultado un boleto mínimo de 68,87 pesos
“En términos reales, la tarifa vigente solo representa un 26% del valor en marzo del 2019 y, en consecuencia, el costo operativo de las empresas es financiado con transferencias del Estado. El dinero gastado en subsidios al transporte ascendió de $7.550 millones en marzo de 2019 hasta los $44.031 millones en abril de este año. Si lo miramos de manera anual, la suma del 2021 asciende a $ 304.298 millones y representa el 0,7% del PBI. Con esto, se puede ver que forzar un precio a situarse por debajo de su valor real, implica la utilización de herramientas distorsivas (subsidios en este caso), que a la larga terminan siendo insostenibles”, explicaron Lautaro Moschet y Eugenio Marí, economista de Libertad y Progreso.
“Pero la distorsión es doble, porque además los subsidios se concentraron en la región del AMBA, donde se congeló la tarifa mínima en $18, mientras que en el resto del país su valor es hasta 4 veces más. Por ejemplo, en las ciudades de Córdoba, Santa Fe y Rosario, el boleto mínimo es de $69,50, con la actualización del 23 de mayo. Algo superior es el precio en Mar del Plata, donde el mínimo cuesta $74,38, mientras que los trayectos más largos tienen un costo de $118,03 (frente a los $23 del AMBA)”, detallaron.
Según los economistas, la última vez que se actualizó el esquema de tarifas del transporte público fue en mundo donde no existía el coronavirus, un dólar se podía comprar con $42 y el litro de nafta valía $39,6. Fue en marzo de 2019, cuando culminó el último proceso de actualización de tarifas, impulsado por el entonces ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Con ese ajuste, el boleto mínimo de colectivo pasó a costar $18, desde los $13 que valía en diciembre de 2018. Luego transcurrieron 27 meses sin modificaciones.
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