Las reservas internacionales del Banco Central terminaron el lunes con un descenso de USD 228 millones y acumularon una caída de USD 681 millones en la última semana para cerrar en los USD 42.637 millones. El dato resulta negativo para las perspectivas de cumplimiento de las metas fijadas con el FMI, ya que la acumulación de reservas es uno de los ejes centrales del programa acordado por el Gobierno con el organismo.
Fuentes oficiales confirmaron a Infobae que la caída de las reservas registrada en las últimas jornadas responde a la devaluación del yuan, la moneda de China, como así también a la depreciación del oro. Cabe recordar que prácticamente la mitad de las reservas de la entidad monetaria están conformadas por yuanes en virtud del swap de monedas que ambos bancos centrales tienen en vigencia.
La caída se registró a pesar que la autoridad monetaria finalizó la jornada de hoy con un saldo positivo de 40 millones de dólares y a que el segundo trimestre del año es, estacionalmente, el de mayor liquidación de divisas por parte de los agroexportadores. Por ello, es el momento del año en que el Banco Central puede comprar dólares en el mercado con mayor intensidad.
“La caída reciente en las reservas brutas no se debe a que el Banco Central esté perdiendo divisas en el mercado de cambios, sino principalmente a un ajuste contable. Casi la mitad de las reservas en el Banco Central corresponden al swap con China por 130 billones de yuanes. Tras la depreciación del tipo de cambio del gigante asiático -3,5% desde que comenzó el mes, 3% desde el lunes pasado- la entidad monetaria perdió casi USD 600 millones por la mera valuación contable de esta partida”, dijo a Infobae Juan Pablo Albornoz, de la consultora Ecolatina.
Y agregó: “También pierde aproximadamente USD 100 millones por la caída en el precio del oro, entre otros motivos. En gran medida, esto explica que los aproximadamente USD 200 millones que compró desde el lunes pasado no hayan reflejado en un aumento de las brutas”.
El dólar libre reafirmó que terminó el “veranito” tras tocar un piso de $195 la semana pasada y comenzó un ciclo alcista que lo llevó a cerrar este lunes en los $205,50. De esta manera, la brecha con la divisa mayorista superó el 78% y alcanzó el nivel más alto en lo que va de abril
El director de la consultora Invenómica, Pablo Besmedrisnik, dijo que persisten las restricciones cambiarias y a pesar de una leve baja en el blue a principios de año, el dólar seguirá subiendo. “Esto pasa porque la Argentina en el corto y en el mediano plazo debe enfrentar restricciones cambiarias por las exigencias del acuerdo con el FMI de aumentar las reservas”, consideró.
Besmedrisnik agregó que el dólar paralelo “es probable que siga subiendo porque el mercado cambiario está muy complicado, no se termina de asentar en forma clara y rotunda el terreno fiscal, hay un marcado déficit en el sector energético que requiere divisas tenemos salida de divisas en el sector turismo que está repuntando”.
Asimismo, los dólares financieros también siguen en niveles altos. En la rueda de hoy en el mercado financiero el contado con liquidación avanzaba sobre el cierre a $210,37 y el MEP retrocedía a $208,37 en el tramo final de la rueda.
Cabe destacar que la semana pasada el dólar MEP registró un salto de más de $18 o 9,5% y el Contado con Liquidación (CCL) subió más de $15 o 8,2% a lo largo de la última semana. De esta manera, cerraron la jornada del viernes en $209,08 y $206,24, respectivamente.
“Hay múltiples factores que explican las subas de los dólares libres. La semana pasada fue muy mala en términos financieros a nivel internacional por la aversión al riesgo, el fortalecimiento del dólar, la suba de las tasas de los bonos americanos y eso pegó en los mercados emergentes y hubo salidas. Las monedas latinoamericanas que venían con fuerte apreciación se dieron vuelta. Por otro lado está sorprendiendo la inercia inflacionaria de abril. Se habla de un piso de 5,5% en abril y eso genera mucha presión sobre los tipos de cambio libre”, dijo a Infobae Diego Martínez Burzaco, Head of Research en Inviu.
En ese sentido, agregó que además hay algo estructural de fondo que tiene que ver con la misma raíz. “El Gobierno sigue aumentando el gasto público con todos anuncios de política fiscal expansiva y el BCRA no ha podido acumular reservas internacionales en lo que va del año. Estamos ingresando en un trimestre de estacionalidad alta de liquidación de divisas. El mercado está muy atento a esto”, remarcó.
En tanto, la cotización del dólar oficial finalizó hoy en $119,78, con una suba de nueve centavos en relación al viernes. En el segmento mayorista, la cotización de la divisa estadounidense registró un incremento de 45 centavos respecto al cierre previo, en un promedio de $114,68.
“Las mayores preocupaciones, originadas por el clima externo junto al interno, se ven reflejadas en el repunte reciente de los dólares financieros que repentinamente se despertaron y ello activa dudas sobre la vigencia del carry trade -local e incluso también regional a partir de la depreciación de dichas monedas- de prolongarse la búsqueda de cobertura ya que rápidamente podrían evaporarse los elevados retornos en dólares construidos en los últimos meses”, analizó el economista Gustavo Ber.
Así, el dólar con el recargo de 30% -contemplado en el impuesto PAÍS-, marcó un promedio de $155,71 por unidad, y con el anticipo a cuenta del Impuesto a las Ganancias de 35% sobre la compra de divisas, $197,64.
En tanto, el volumen operado en el segmento de contado fue de USD 249 millones, en el sector de futuros del Mercado Abierto Electrónico (MAE) se registraron operaciones por USD 29 millones y en el mercado de futuros Rofex se transaron USD 293 millones.
“La corrección de los precios del dólar mayorista en el inicio de la semana compensó, como siempre, la falta de actividad durante el fin de semana. La oferta de divisas exhibió un flujo importante, dando pie a una intervención oficial que finalizó la jornada con saldo positivo, llevando el acumulado del mes a superar por poco los USD 210 millones, quedando cerca ahora de poder superar la marca del mes anterior”, dijo Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio.
A pesar de la liquidación de exportaciones récord en los primeros tres meses del año y de la caída en el nivel de brecha cambiaria, el Banco Central no pudo en el primer trimestre acumular reservas por fuera del desembolso inicial de dólares que hizo el Fondo Monetario Internacional en el marco del nuevo programa financiero.
Según estimaciones de la consultora Quantum, la pérdida en el colchón de divisas que experimentó la autoridad monetaria fue de casi USD 3.300 millones al quitar de la cuenta el envío inicial de divisas que hizo el organismo internacional.
Durante los primeros tres meses del año, entonces, el BCRA acumuló reservas internacionales por USD 3.475 millones, lo que incluye el desembolso neto de amortizaciones del FMI por USD 6.750 millones. Por lo tanto, dejando de lado al FMI, el BCRA perdió USD 3.277 millones entre enero y marzo.
La Bolsa comenzó la semana en rojo
El índice S&P Merval retrocedió 0,61% y cerró la jornada en 91.154,43 puntos. Entre las acciones que más cayeron figuran las de Telecom Argentina, con un descenso de 3,6%, seguidas por las de Transportadora de Gas del Norte, con una merma de 2,2 por ciento.
Entre las alzas se destacaron las acciones de Sociedad Comercial del Plata, con un aumento de 6,9%, seguidas por las de Cablevisión Holding, con una suba de 2,9 por ciento.
Asimismo, las acciones de empresas argentinas que cotizan en Wall Street operaron con mayoría de bajas. Éstas fueron encabezadas por los papeles de Ternium (-4,6%) y las de Telecom Argentina (-4,1%).
Por su parte, los bonos en dólares terminaron la rueda con alzas de hasta 3,2%. Fue el caso del GD35D, mientras que entre los bonos más operadas también subieron el GD30D (2,3%); el AL41D (2,7%) y el AL35D (1,8%).
Esta semana, en tanto, el riesgo país retrocedíó sobre el cierre hasta alcanzar las 1754 unidades.
“Se extiende el tono cauteloso en Wall Street, en una semana cargada de balances y datos económicos, ante lo cual los activos domésticos se ven arrastrados ya que en simultáneo deben soportar los ruidos políticos y económicos que vinieron repentinamente despertando al dólar”, afirmó el analista Gustavo Ber en un informe este lunes.
“El negativo clima externo continúa condicionando la marcha de los activos domésticos, que así quedan rehén de dicha negativa dinámica donde los operadores siguen focalizados en la búsqueda de refugio ante la continuidad de la aversión al riesgo global. Aunque desplazados a un segundo plano, tampoco contribuyen a la débil evolución de los ADRs y bonos la incertidumbre política y económica doméstica, aún cuando hasta hace poco los inversores preferían hacer oídos sordos a los ruidos de corto plazo y en cambio focalizarse en el post 2023 ante la expectativa de una mejora en las expectativas”, concluyó.
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