El fabricante estatal de armas ucraniano Ukroboronprom encontró una forma de intentar restar potencia a la maquinaria de guerra Rusia que castiga en estos momentos al pequeño país europeo que, de resultar exitosa, le permitiría además equipar a sus fuerzas armadas, necesitadas de aeronaves.
El consorcio estatal anunció que le pagaría un millón de dólares estadounidenses a cualquiera que capturara y entregara un avión militar ruso listo para el combate armado. El llamado no se limitó a los ciudadanos y militares de Ucrania, sino que principalmente se extendió hasta “los pilotos rusos que quieran cambiarse de bando”, según detalló Reuters.
“¡A los pilotos de la Federación Rusa listos para participar en el programa, les garantizamos la emisión de la ciudadanía de un país libre!”, dijo Ukroboronprom, mientras que agregaron que “la oferta es válida hasta la victoria, la victoria de la nación más fuerte del mundo: Ucrania”.
Además de ofrecer USD 1 millón a cambio de aviones rusos de combate, la empresa estatal ucraniana dijo que también pagará 500 mil dólares por cada helicóptero militar operativo incautado a las Fuerzas Aeroespaciales Rusas. “Usted y su familia pueden convertirse en personas ricas, que ya no estarán obligadas a cumplir órdenes criminales. Puedes volverte libre y rico”, reza el comunicado dirigiéndose a los rusos y buscando persuadirlos.
La estrategia de la empresa ucraniana es la de tentar a los militares rusos para que se rindan y así, no sólo reducir las fuerzas enemigas sino además incrementar el poderío militar de Ucrania. La misma Ukroboronprom declaró en un comunicado días atrás que pese al ataque de Rusia sobre la mayoría de sus talleres, siguen “fortaleciendo las capacidades de defensa del mejor y más poderoso ejército del mundo: las Fuerzas Armadas de Ucrania”. En el mismo texto declaran estar reparando sus equipos militares así como los “vehículos trofeo” rusos que recuperaron.
“¡A los pilotos de la Federación Rusa listos para participar en el programa, les garantizamos la emisión de la ciudadanía de un país libre!”
Para los pilotos rusos, mientras tanto, la oferta supone la posibilidad de dejar atrás la guerra y empezar de nuevo en otro país. Claro que con una holgada cuenta bancaria para cubrir las molestias.
Ukroboronprom, la empresa militar que realizó esta llamativa oferta, ya había aparecido en la escena cuando fue la encargada de confirmar la pérdida de ‘Mriya’, el avión más grande del mundo, también conocido como el Antonov An-225. La destrucción de este aparato único en su clase fue lamentada no sólo por el Gobierno y pueblo ucranianos, orgullosos de ser los dueños de esa maravilla de la ingeniería, sino por todos los aficionados de la aviación, por tratarse de una aeronave célebre y sin igual.
En su momento y como lo informó Infobae, la empresa encargada del control del complejo industrial-militar que heredó Ucrania de la Unión Soviética (URSS) no sólo confirmó las sospechas de que el An-225 había sido destruido durante una batalla entre helicópteros en el aeropuerto de Hostomel, sino que además aseguró que ya se estaba pensando en su reconstrucción. Según lo que declararon, la misma llevaría más de 5 años de trabajos y una inversión de 3 mil millones de dólares estadounidenses. “Nuestra tarea es garantizar que estos costos sean cubiertos por la Federación Rusa, que ha causado daños intencionales a la aviación y al sector de carga aérea de Ucrania”, sentenciaron desde Ukroboronprom.
Mientras tanto, el conflicto está cerca de cumplir un mes y los bombardeos en Ucrania no cesan. En las últimas horas entró en vigor un toque de queda de 35 horas en la capital Kiev, luego de que proyectiles rusos impactaran contra el centro comercial Retroville y acabara con la vida del al menos ocho personas.
Los muertos de ambos bandos se acumulan y Vladimir Putin continúa sin aceptar el pedido de Volodimir Zelensky de mantener una reunión “en cualquier formato”, crucial, según el presidente de Ucrania, para terminar con el conflicto bélico que tiene en vilo al mundo.
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