Cómo acceder a la vivienda con $50.000 en barrios de CABA y el Gran Buenos Aires

Crowdfunding y opción, son formas de inversión en ladrillos. En qué consisten

Guardar
Render de un proyecto que
Render de un proyecto que actualmente se edifica en Palermo

En el Real Estate hay varias posibilidades para que con poco dinero ahorrado se puede aspirar a la vivienda propia o a obtener un buen retorno de lo invertido.

Una de ellas, la más divulgada en el último tiempo es el crowdfunding, sistema que funciona como una red de financiación colectiva habitualmente online, que a través de donaciones y aportes privados consiguen financiar un determinado proyecto a cambio de recompensas, participaciones de forma altruista, pudiendo operar en distintos rubros de la economía, en este caso en el inmobiliario.

Esta posibilidad permite ingresar con módulos desde el equivalente a USD 100, que se pueden pagar con tarjeta de crédito o mediante transferencia bancaria. Para hacerlo efectivo hay que completar la adhesión al fideicomiso correspondiente bajo el cual quedará asociado al proyecto elegido posterior a la confirmación del aporte, sea en moneda extranjera o en pesos.

Para acceder a esta herramienta financiera hay varios proyectos en obra, tanto en CABA como en el Gran Buenos Aires que aceptan fondos por esta modalidad. “Buscamos la diversificación del tipo de inversión, y al mismo tiempo, de construcción a la hora de hacer arquitectura innovadora. En la zona de Pilar nos dedicamos a la construcción de casas de diseño; en el barrio de Palermo llevamos adelante edificios de baja escala y conexión con el exterior con una visión de exclusividad, los llamamos casas agrupadas”, explicó a Infobae Lucas Ketlun, de Relaciones Institucionales de +i Sumar Inversion.

Buscamos la diversificación del tipo de inversión, y al mismo tiempo, de construcción a la hora de hacer arquitectura innovadora (Ketlun)

El sistema, incipiente en la Argentina, fue impulsado a instancia de Víctor Zabala, CEO de la compañía, que notó el interés de sus allegados iniciales (amigos y familiares) por realizar inversiones que no cubrían la totalidad del costo de un departamento, más bien se asimilaban al valor de un espacio guardacoches.

Las unidades fondeadas a través
Las unidades fondeadas a través del crowdfunding ofrecen terminaciones como cualquier otra construcción moderna

Ketlun amplió que ese interés de la demanda le hizo despertar la intención y la visión de democratizar el sistema de inversión en el rubro, “haciendo factible y alcanzable para cualquier persona con un mínimo caudal de ahorro el sentirse parte y poder ser dueño de un proyecto y co-inversor de una propiedad. Si bien en la Argentina se está desarrollando hace relativamente poco, el sistema está muy bien instalado en varios países de Europa y, también, en Estados Unidos”.

El concepto de módulos tiene que ver con la división del costo de un proyecto (puede ser tanto una casa, un departamento o un edificio entero) en pequeñas partes, a través de las cuales llegan varios inversores.

La primera casa en la Argentina financiada por crowdfunding está diseñada y construida por Víctor Zabala y equipo, y ahora está alquilada con un contrato que reparte una renta mensual en dólares. Y actualmente avanza un edificio en Palermo donde por tickets mínimos un inversor participa del negocio y una vez que se concluya la construcción, y se vendan las unidades, obtendrán un retorno, estimado entre el 25% y 30 por ciento.

En caso de alquilarse, el inversor comparte la rentabilidad que otorgue la propiedad o el pool de renta que se defina si son varias unidades.

“Todos estos proyectos diversifican también el tipo de inversión, pudiendo elegir opciones de renta variable, que estará relacionada con la venta posterior a la construcción, o también de renta fija, los cuales llamamos renting, que ofrecen un retorno mensual en dólares al inversor”, añadió Ketlun.

Pasos para acceder al sistema

Otra posibilidad de apostar en ladrillos con poco dinero la propone G&D Developers a través de una plataforma que permite hacer pequeñas y medianas erogaciones a través de la compra en pesos de una fracción de la propiedad.

Posibilita ingresar a partir de $50.000. Primero: se elije el departamento en el cual se quiere realizar la inversión; segundo, se completa el formulario con los datos personales del inversor, indicando el monto y se validan los datos; tercero: se firma en forma digital la solicitud de adhesión y cuarto: se realiza la transferencia de fondos. Finalmente, el inversor recibe vía mail un certificado con el importe destinado y los metros cuadrados suscriptos.

Luis Hauserman, gerente financiero de G&D Developers, dijo a Infobae que “el monto se convierte a metros según el valor del m2 de la unidad según la fecha de la transferencia. Este se ajusta diariamente por la variación de la UVA que publica el Banco Central de la República Argentina (BCRA), o sea que la operación está protegida de la inflación”.

El monto se convierte a metros según el valor del m2 de la unidad según la fecha de la transferencia, y se ajusta diariamente por la variación de la UVA que publica el BCRA (Hauserman)

El plazo de la inversión es el plazo de obra, si la unidad se vende dentro de ese lapso, el inversor participa de la operación, en proporción a los m2 que suscribió; de lo contrario recupera la inversión actualizada al final del plazo y cobra un premio por permanencia similar a un alquiler por los próximos 24 meses. También se puede retirar en cualquier momento y recuperar su ahorro actualizado.

Las opciones de invertir con
Las opciones de invertir con montos menores al valor total de una vivienda se expanden, sobre todo apuesta la gente joven por nuevas modalidades

La renta exacta dependerá de las condiciones futuras del mercado y cada unidad tendrá un comportamiento propio. En el caso de la unidad 2B del proyecto ubicado en Barracas, que es la primera que estamos lanzando, estimamos una ganancia total para el inversor de 15% a 18%, una vez vendida la unidad. A su vez, el propietario no puede tomar ofertas por debajo del 10%”, explicó Hauserman. La desarrolladora actualmente está adaptando el inmueble en donde funcionó la ex fábrica Bagley, en la esquina de las calles Hornos y Finochietto.

El valor inicial del m2 según el contrato es de $306.000 y este se ajusta diariamente por la variación de la UVA que regula el BCRA, al 8 de marzo de 2022 se ubicaba en 358.708 pesos.

Financiamiento colectivo

En el sector surge el financiamiento colectivo porque acceder a la vivienda propia es difícil con pocas posibilidades de endeudarse a través de un crédito bancario con tasas altas.

Leonardo Pablo Diez, del proyecto Comunicad y analista del sector, comentó a Infobae: “Es crowdfunding o financiamiento colectivo sostenible, tratándose de un concepto propio. Es sistemático, no es aislado como el tradicional de plataforma, ni de inversores como los actuales, sino de consumidores. Lo convierte, potencialmente, en la solución al problema de acceso a la vivienda. Es versátil, es escalable, evita riesgos, minimiza el esfuerzo y maximiza la eficiencia”.

Proyecto que captó a inversores
Proyecto que captó a inversores que apostaron en el crowdfunding

Una vez puesto en funcionamiento el sistema se establece el monto necesario para adquirir una propiedad, se duplica y se divide en aportantes. Por ejemplo: para reunir USD 100.000 deben conseguirse 1.000 aportantes por USD 10 por 10 meses.

“Las variables son ideales, en la realidad cambiarían compensándose. Una parte es para el inmueble y la otra es para generar los beneficios. El primer beneficiario sería el mismo proyecto, para empoderarse y establecer objetivos. El aportante consume en la medida de su economía y finanzas sin afectarlas, pero obtiene beneficios mayores y crecientes hasta incluso ser beneficiario”, añadió Diez.

Por otro lado, desde el sector entienden que dentro del mercado inmobiliario se puede comenzar comprando y vendiendo viviendas usadas para luego pasar a desarrollar. El beneficiario puede ser un inquilino. Se adquiere el inmueble y se puede micro financiar el monto mensual. Puede ser un candidato a propietario. Se adquiere el inmueble y se otorga un crédito más accesible. Puede ser un hipotecado UVA. Se releva el monto adeudado y se establece un nuevo compromiso.

“El aporte no tiene límites mínimos ni máximos, excepto por el contexto. Lo mismo con la escalabilidad en cuanto a montos y a la cantidad de objetivos. Por ejemplo: con 10.000 propiedades crearíamos un unicornio”, ejemplificó Leonardo Diez.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar