Audiencia pública por las tarifas de luz: pese a la resistencia del Gobierno las empresas plantearán un aumento cercano al 40%

Este jueves se llevará a cabo la reunión para comenzar a definir el incremento del 2022. Nación propone una suba del 20% y avanzar con la quita de subsidios por zona residencial

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Qué pasará con las tarifas
Qué pasará con las tarifas de luz

Este jueves se llevará a cabo la audiencia pública para comenzar a definir el incremento que tendrán las tarifas de luz en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Las empresas piden incrementos por arriba del 40%, mientras que el Gobierno busca limitarlos a la mitad y avanzar con la quita de subsidios.

La reunión que se llevará a cabo de manera virtual fue convocada por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) para hoy a las 8 de la mañana. Se expondrá el Régimen de Transición Tarifaria 2022, propuestos por Edenor y Edesur para los precios de referencia en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), el transporte y la distribución por parte de las concesionarias del servicio que operan en el AMBA.

La audiencia no es vinculante, con lo cual no se definirá el aumento. Las partes argumentarán su posición con respecto al incremento que se debería aplicar y luego será el Gobierno el que defina el porcentaje final que impactará en las tarifas de luz.

Las empresas aún no hicieron público su planteo. No obstante, analistas del sector privado consideran para mantener estable o reducir los subsidios en términos reales -y comenzar a cumplir con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI)-, es insuficiente el aumento de 20% en el precio al usuario que anunció la Secretaría de Energía. Debería ser en torno al 35% o 40%, sobre todo luego de que en los años de gobierno de Alberto Fernández las tarifas de luz residenciales solamente subieron 9%.

El Gobierno busca limitar las
El Gobierno busca limitar las subas y avanzar con la quita de subsidios (Franco Fafasuli)

En diálogo con Infoabe, Julián Rojo, especialista en el sector energético, “para mantener los subsidios constantes hay que duplicar el precio de la energía eléctrica y aumentar 75% el precio del gas que pasa a la factura final. Esto tiene un impacto de (al menos) 40% promedio en la factura final solo por aumentar precio de la energía, y sin tocar cargos de transporte y distribución”.

En ese sentido, consideró que “para bajar subsidios, los aumentos en los precios deben ser mayores y por lo tanto el impacto en la factura. Siempre sin tocar cargos de transporte y distribución. De manera que un aumento final del 20% es insuficiente, incluso si fuese todo explicado por precios, si no aumentan los cargos de transporte y distribución”.

Para reducir los subsidios, el Gobierno buscará avanzar con la segmentación de tarifas de los servicios de electricidad y de gas, según la zona de residencia de los usuarios.

Los barrios porteños que perderían
Los barrios porteños que perderían los subsidios

Este esquema contempla una quita de subsidios a 487.000 usuarios residenciales del AMBA, un 10% del total. La mayoría —más de tres cuartos— se encuentran en la Ciudad de Buenos Aires en los barrios de Puerto Madero y en zonas de Recoleta, Palermo, Belgrano y Núñez, una parte de Colegiales, algunas manzanas de Villa Urquiza, Retiro, Saavedra y Villa Devoto y una zona de Caballito.

En el Gran Buenos Aires son 67.800 usuarios ubicados en la zona denominada “el bajo” en los partidos de Vicente López y San Isidro. Y 48.000 usuarios de 466 countries y urbanizaciones cerradas.

En estos barrios se retirarían los subsidios y los usuarios pasarían a pagar la tarifa plena, tanto para electricidad como para gas. Según se estima las tarifas sin subsidio podría llegar al 100% de aumento con respecto al valor actual.

En tanto, según estimaciones del sector energético, si se quitan los subsidios completos el precio mayorista de la electricidad sube cinco veces (tomando los precios de 2021). Este costo mayorista de la energía representa un 65% del costo total de la factura de electricidad, al que luego se suman los costos de transporte y distribución. Estos cálculos anticipan que la tarifa final podría aumentar hasta por tres.

El ENRE indicó que “la recomposición transitoria” se dará bajo la premisa de sostener “la necesaria prestación de los servicios públicos de transporte y distribución de electricidad, en condiciones de seguridad y garantizando el abastecimiento respectivo, así como la continuidad y accesibilidad de dichos servicios públicos esenciales”.

Así, los regímenes de transición que resulten de la realización de la audiencia pública en materia de transporte y distribución de energía eléctrica regirán hasta tanto se arribe a un acuerdo definitivo de renegociación. En este marco, el incremento se aplicará por única vez hasta diciembre.

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