Cómo la Argentina pasó del fondo de la tabla del repunte económico en la región a los primeros puestos

La actividad agregada completó una recuperación cercana al 10% en 2021. Para 2022 se espera una desaceleración, atada a lo que suceda en la negociación con el FMI. Factores que explican los puntos de giro

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Tras la fuerte recuperación de 2021, para este año se espera una desaceleración, atada a lo que suceda en la negociación con el FMI. EFE/ Juan Ignacio Roncoroni/Archivo
Tras la fuerte recuperación de 2021, para este año se espera una desaceleración, atada a lo que suceda en la negociación con el FMI. EFE/ Juan Ignacio Roncoroni/Archivo

El nivel del PBI terminó en 2021 con una recuperación que le permitió recobrar prácticamente todo el terreno perdido por el impacto inicial negativo de la pandemia en 2020. La industria y la construcción, por caso, finalizaron con rebotes de 16% y 30% respectivamente, muy por encima de las cifras de desplome que habían tenido un año antes.

Una manera de evaluar el proceso de repunte de la economía argentina es en relación con el resto de los países del continente. En todos los casos la irrupción de la crisis sanitaria implicó un golpe fuerte para su actividad económica, aunque la profundidad, duración y recuperación posterior fue heterogénea. Para 2022, en tren de comparación regional, la Argentina podría tener uno de los crecimientos más moderados según las primeras estimaciones de organismos internacionales.

Durante buena parte del año pasado la Argentina estuvo entre los países con ritmos de repunte más bajos en el mapa del continente

La carrera de la recuperación post pandemia (si bien el coronavirus sigue estando presente, su efecto en la economía es menor a esta altura del desarrollo del virus) fue dispar. Incluso durante buena parte del año pasado la Argentina estuvo entre los países con ritmos de repunte más bajos en el mapa del continente, al tomar en consideración una comparativa contra el 2019, el último año sin impacto de ningún tipo de la crisis sanitaria.

El Gobierno elabora un informe mensual con este tipo de comparaciones de mediciones de actividad económica en la región. En su edición de enero 2022, con datos hasta octubre de 2021, la Argentina se encontraba aún 0,7% por debajo del nivel de producción que tenía en ese mes de 2019, solo por encima de Brasil y México. Un mes después, en el reporte de febrero, la economía argentina saltó a uno de los principales puestos con un avance de 5,6% entre noviembre 2021 versus noviembre 2019, y quedó por debajo solo de Chile y Ecuador entre los países sudamericanos.

La Argentina, con datos de octubre, todavía estaba entre los países con recuperación más baja al comparar con la prepandemia (Fuente: CEP XXI)
La Argentina, con datos de octubre, todavía estaba entre los países con recuperación más baja al comparar con la prepandemia (Fuente: CEP XXI)

¿A qué se debió ese salto tan grande de un mes a otro? Según explicaron fuentes oficiales a Infobae, la razón que explica esa diferencia es que en octubre de 2019 había una base de comparación “alta” (el EMAE creció 1,9% intermensual ese mes), mientras que octubre de 2021 no había sido un mes de avance importante de la actividad, ya que disminuyó 0,8% en relación con el mes anterior.

De la misma forma, noviembre de 2019 configuró una base “más baja” de comparación (cayó 1,7% la actividad económica ese mes) y noviembre de 2021 “fue muy bueno, de fuerte recuperación”. El EMAE marcó un 1,7% de repunte. “En resumidas cuentas, tenés mejora entre octubre-noviembre de 2021 y empeoramiento entre octubre-noviembre de 2019″, explicaron. Con ese efecto de bases comparativas, la Argentina pasó de estar casi al fondo de la tabla de recuperación económica regional a ser el tercero de América del Sur y sexto de todo el continente.

Sólo un fenómeno estadístico, provocado por el cambio de base de comparación, posibilitó un cambio sustancial en los resultados comparados

El informe en cuestión es elaborado por el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo. En su última actualización afirma que “las economías más grandes de la región (México y Brasil) fueron las únicas con bajas: se trata de países con un sector industrial fuertemente insertado en las cadenas globales de valor, las cuales están presentando cuellos de botellas en la adquisición de suministros y servicios de transporte internacional”, remarca.

“Chile aceleró su suba (15,4% vs 2019, en parte por la baja base de comparación que dejaron los conflictos sociales de fines de 2019) y fue la de mayor crecimiento de la región, mientras que Argentina se recuperó de forma notoria en noviembre (5,6%) y fue el país que más mejoró su registro respecto al mes anterior”, explicó.

Un mes después, el país saltó a las posiciones más altas de la región (Fuente: CEP XXI)
Un mes después, el país saltó a las posiciones más altas de la región (Fuente: CEP XXI)

Por otra parte, considera el análisis del CEP XXI que la recuperación regional “dista de ser homogénea y dependió tanto del manejo de la situación sanitaria como de las particularidades de la estructura económica de cada país. Se observa por ejemplo, que la región centroamericana, está liderando el crecimiento de la región gracias a la gradual recuperación del sector de turismo y hotelería (actividad con una representación relativa elevada en la economía de esos países)”. Por esa razón naciones como Honduras, República Dominicana y Guatemala aparecen tan arriba en los ránking.

Gran parte de los sectores en la Argentina se encuentra operando en niveles por encima de la prepandemia (CEP XXI)

“Según los datos disponibles de indicadores mensuales de actividad para noviembre, gran parte de los países creció en el comparativo con 2019 y mejoró su registro respecto a la variación de octubre”, continuó el CEP XXI. “Chile fue el país americano que más creció en base a 2019 (15,4%) asociado en parte al bajo nivel de comparación producto del estallido social que desembocó a fines de año y paralizó gran parte de las actividades económicas. Asimismo, Argentina, Colombia y Paraguay fueron otros de los países dentro de América Latina que crecieron y con registros mejores a los observados el mes anterior”, siguieron.

Para el caso argentino en particular, cita el estudio que “gran parte de los sectores se encuentra operando en niveles por encima de la prepandemia con variaciones destacables en la construcción (13,1% vs febrero), la industria 8,8%) y el comercio (10,8%). Así, la actividad económica en su conjunto se posicionó 3,7% por sobre los niveles de febrero 2020″, concluyó.

Según Cepal, la Argentina tendría este año una expansión de 2,2% (EFE)
Según Cepal, la Argentina tendría este año una expansión de 2,2% (EFE)

El mes próximo se tomarán en consideración los datos de diciembre. En ese caso la posición argentina podría volver a mejorar, ya que en el último mes de 2019 tuvo según el EMAE un avance de solo 0,2% respecto al mes anterior y en diciembre 2021 fue de 1,7 por ciento.

Tendencia para el corto plazo

Las perspectivas para este año todavía son materia de discusión: para el Gobierno en un principio se mantiene en 4% de expansión del PBI, algo que las estimaciones privadas y de organismos internacionales ponen en duda, y cómo máximo la ubican en 3%. Entre otras cosas, estará atado a la suerte que corra la negociación con el Fondo Monetario Internacional y, sobre todo, el cumplimiento de las metas del nuevo programa, aunque el 10% de crecimiento del año pasado deja un efecto de arrastre positivo relevante.

Al hablar de perspectivas para este año las estimaciones privadas muestran a la Argentina con un crecimiento apenas por encima del promedio. Así lo dio a conocer hace pocos días la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). “La región de América Latina y el Caribe desacelerará su ritmo de crecimiento en 2022 a 2,1%, luego de crecer 6,2% promedio el año previo”, mencionaron.

El mes próximo se tomarán en consideración los datos de diciembre. En ese caso la posición argentina podría volver a mejorar, ya que en ese mes de 2019 el EMAE subió solo 0,2% respecto al mes anterior y en diciembre 2021 fue 1,7 por ciento

Además de la desaceleración, la peor parte se la llevará América del Sur, empujada por una proyección muy pobre para Brasil, la principal economía regional. “El Caribe crecerá 6,1% (excluyendo Guyana), América Central 4,5%, mientras que América del Sur lo hará 1,4%. En tanto, en 2021 la región mostró un crecimiento superior al esperado, promediando 6,2%, gracias a la baja base de comparación que constituyó el 2020, la mayor movilidad y el favorable contexto externo”, afirmó el organismo que conduce Alicia Bárcena.

De punta a punta en el 2021, según Cepal la Argentina creció 9,8%, superado por Perú (13,5%) y Chile (11,8%), lo que la ubica por encima del promedio sudamericano de 6,4 por ciento. En un sentido similar, el Fondo Monetario también ubicó a la Argentina entre los países con recuperaciones más robustas el año pasado: fue según el organismo de 10%, solo por debajo de Perú (13,3%), Chile (12%) y Colombia (10,8 por ciento).

El FMI no es mucho más optimista que Cepal para la economía latinoamericana este año, ya que también pronosticó una desaceleración. “Para 2022, prevemos que el crecimiento disminuirá a 2,4 por ciento, una rebaja respecto del pronóstico de 3% de octubre de 2021″, destacó en un informe presentado, entre otros, por Ilan Goldfajn, nuevo director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario, considerado un ortodoxo en su pensamiento económico.

“La desaceleración es inevitable a medida que las economías retoman los niveles del PBI previos a la pandemia. Pero la rebaja del pronóstico refleja otras dificultades, como el enfriamiento de las economías china y estadounidense, las continuas interrupciones del suministro de insumos y trabajo, el endurecimiento de las condiciones monetarias y de financiamiento, y la aparición de la variante ómicron”, mencionó.

La desaceleración es inevitable a medida que las economías retoman los niveles del PBI previos a la pandemia. Pero la rebaja del pronóstico refleja otras dificultades, como el enfriamiento de las economías china y estadounidense (FMI)

En medio de la negociación por un nuevo programa financiero, el organismo de crédito internacional decidió elevar la proyección de crecimiento económico para la Argentina, desde 2,5% a 3%. Eso la dejaría, según la última actualización de estimaciones globales, solo por detrás de Colombia (4,5%) y por encima de otras como México y Perú (2,8% en cada caso). Para Cepal, no obstante, el 2,2% que prevé para la Argentina solo queda por encima de Brasil (0,5%) y Chile (1,9 por ciento).

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