Desarrollan en Argentina una app que busca facilitar la navegación en barco

Corría el año 2020 y los 45 millones de argentinos estaban encerrados en sus casas transitando el confinamiento al que obligó la pandemia de Covid-19, entre ellos se encontraba Daniel Raskin, un director comercial de una importante empresa de digitalización y gestión de documentos, y, sobre todo un apasionado por la navegación.

Durante el encierro, lo que más extrañaba del mundo exterior era salir a navegar con su velero, confesó en diálogo con Infobae. En el aburrimiento, el hombre que al día de hoy ya festejó 68 cumpleaños, se la pasó viendo videos de otros navegantes en la plataforma YouTube sobre itinerarios que le gustaría realizar y sobre todo tipo de curiosidades del universo náutico. Navegando las olas del internet, entre redes sociales blogs y foros, se topó con una web destinada a navegantes oceánicos que otorgaba información precisa y bien estructurada sobre la meteorología del lugar donde ocurriría la travesía por el océano.

Esto sirvió de inspiración para que Raskin contactase a su amigo Darío Fernández, un instructor de náutica que dirige uno de los institutos de navegación más importantes de la Argentina, y una persona altamente capacitada en la materia, para contarle lo que había encontrado y confesarle lo que estaba ideando en su cabeza.

“Ya había algo en el inconsciente de Darío -dijo Raskin al recordar cómo fue la génesis del proyecto que en aquel entonces aún no había sido bautizado-, cuando le conté mi idea de hacer una plataforma para el navegante oceánico, él, luego de pensarlo unos minutos, me dijo que quedaría muy limitada, y que lo mejor sería desarrollar una aplicación que cubra todas las variables imprescindibles para salir del puerto, ya sea para hacer una travesía o para dar la vuelta que despunta el vicio de los navegantes”. Y así fue como los dos amigos y socios eligieron Mastersailor como nombre para su proyecto.

Luego de varios meses de trabajo, que inicialmente iban a ser tres o cuatro y terminaron elevándose hasta casi un año y medio, en los cuales los socios establecieron y estructuraron el contenido de la aplicación, formaron la sociedad anónima y trabajaron junto a desarrolladores en la escritura y diseño del software, nace Mastersailor, una app para teléfonos móviles que reúne en un sólo lugar todas las funcionalidades indispensables para los navegantes.

Disponible en dos versiones, una gratuita y otra premium con un precio de USD 50 por año -con una mayor cantidad de funcionalidades y servicios-, los navegantes deben registrar su embarcación con nombre y detalles para utilizar Mastersailor y acceder a estos servicios:

- Cartografía digital y GPS: cartas desarrolladas por Raskin y Fernandez junto a un cartógrafo en las cuales combinaron información hidrográfica para graficar la altura de las mareas en tiempo real, gracias a la información que reciben directamente de un mareógrafo; waypoints y rutas que pueden ser compartidos con otros usuarios de la app; y más de 20 derroteros precargados con información precisa.

- Meteorología en tiempo real y pronóstico: weatherpoints -puntos de interés para el navegante-, meteorología y pronóstico en tiempo real, ya sea en la posición actual o en la que se elija en la pantalla y alertas meteorológicas que son enviadas por medio de una notificación. Además posee tres días de previsión climática e indicación de de intensidad y dirección de vientos y ráfagas.

- Tidepoints: profundidad real corregida por condiciones meteorológicas en los diferentes puertos y una función de ecosonda virtual que permite determinar la profundidad de manera permanente a lo largo de la ruta activa.

- Sistema de llamadas de emergencia, alertas y números útiles: la app permite hacer llamadas de socorro a la Prefectura Naval y a todos los navegantes del área, enviar alertas a otras embarcaciones cercanas sobre algún peligro, que se viralizarán en las pantallas de de los teléfonos.

Por el momento la cartografía precargada en Mastersailor abarca la zona del Río de la Plata interior y exterior, sus límites serán: hacia el Sur el Puerto de Quequén, hacia el Norte el Puerto de La Paloma, En Uruguay, hacia el Oeste la Provincia de Santa Fe y hacia el Este el mismo límite exterior del río más ancho del mundo.

¿Próximo objetivo? Cubrir toda la Argentina, con todos sus ríos navegables y lagos interiores. Raskin adelantó que ya está trabajando en un derrotero para toda América, si bien aún falta mucho para eso, prevén que avanzarán hacia el Norte, llegando a las costas brasileñas, y luego, poco a poco y con actualizaciones paulatinas, irán cubriendo hacia abajo llegando a la región de Bahía Blanca, con el objetivo de cubrir Tierra del Fuego. “Por eso nos importa remarcar que hasta ahora solo se vio la punta del iceberg, tenemos mucho más por ofrecerle al navegante”, remarcó Fernandez.

Por otra parte los socios coincidieron que el objetivo a corto plazo es el de recuperar el dinero invertido, inicialmente fue de USD 200.000 y estiman que hasta que comiencen a ver flujos de ingresos, deberán agregar otros 20 o 30 mil dólares. Sin embargo no están apurados, son conscientes de que eso podría tardar años, estiman que alrededor de tres, y para generar ingresos prevén incluir publicidades en el servicio gratuito, y la posibilidad a los prestadores de servicios de abonar un monto por aparecer como la primera opción, por ejemplo para astilleros, auxilios náuticos, estaciones de servicio, entre muchos otros.

Pero Fernandez y Raskin, dos emprendedores apasionados por la navegación, emprendieron una travesía que recién comienza. Adelantaron en exclusiva a Infobae que además de todo lo mencionado anteriormente, proyectan una variante de Mastersailor para la navegación deportiva. Esta versión contará con funcionalidades para las regatas, y todo lo relativo a la navegación competitiva.

Pero para ello falta, primero quieren conseguir 10.000 usuarios, y una vez que alcancen ese objetivo se lanzarán a desarrollar la próxima aplicación, que será seguida de otros dos proyectos que tienen en carpeta. Mastersailor zarpó en plena pandemia de Covid-19 y, quién sabe, quizás volverá a tocar puerto una vez que, los dos socios que comparten una pasión, hayan incluido el mundo entero.

SEGUIR LEYENDO