Los mercados bursátiles de Argentina se decantaron por números muy negativos este lunes, mientras que los agentes apelaron a persistentes desarmes de posiciones en busca de cobertura, dadas las dudas sobre las negociaciones del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los temores por una posible invasión de Rusia a Ucrania que golpearon a los mercados globales.
A las 17 horas, mientras que Wall Street exhibía bajas en torno al 2%, los ADR argentinos caían hasta 7% en dólares al cierre de la Bolsa porteña. Las acciones argentinas tocaron un piso de precios desde el 4 de agosto pasado, mientras que los bonos en dólares alcanzaron nuevos mínimos desde su salida a cotización hace más de 16 meses.
Mientras que los índices de Wall Street recortan entre 5,4% y 11,4% en 2022, el índice Merval cede un 11,2% en dólares
El índice líder S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires perdió 3,1%, en las 81.004 unidades, tras acumular una baja del 2,2% en pesos y de 7,8% en dólares la semana pasada, encabezada por la tendencia de acciones financieras. Entre los ADR y acciones argentinas operados en dólares en Wall Street destacaron los retrocesos de 6,4% para IRSA y 6,2% para Banco Macro.
No obstante, Wall Street tuvo un notable rebote de precios en la última hora de negocios, para terminar con todos sus indicadores en positivo, una corriente de la que quedó afuera la Bolsa argentina, que cierra una hora antes que la plaza norteamericana.
“La mirada durante la semana estará en cualquier indicio de avance en las negociaciones o de referencias al pago del viernes que, de realizarse, configuraría una buena señal en cuanto a la voluntad de cerrar un acuerdo”, indicó el Grupo SBS en un reporte de mercado.
Los bonos soberanos retomaban las caídas. Los títulos Globales del canje restaban a las 17 horas otro 2,5%, con un riesgo país de JP Morgan que se incrementaba en 46 unidades para la Argentina, a 1.962 puntos básicos. Por la tarde, el indicador tocó los 1.972 puntos, en máximo intradiario desde la reestructuración soberana.
El riesgo país tocó nuevos máximos desde el 9 de septiembre de 2020, cuando -previo a la incorporación de los bonos reestructurados al índice- alcanzó los 2.120 puntos. El índice se reinició el 10 de septiembre de 2020 en la zona de los 1.083 puntos tras el gigantesco canje de deuda con acreedores privados por más de 100.000 millones de dólares.
“El aumento de la aversión al riesgo en los mercados financieros por un posible conflicto entre Estados Unidos y Rusia en Ucrania, el cambio de política monetaria por parte de la Reserva Federal y la desaceleración económica en Estados Unidos han ocasionado que el dólar se fortalezca frente a sus principales contrapartes y frente a divisas de mercados emergentes”, dijo a Reuters Alexander Londoño, analista de ActivTrades.
La Unión Europea está preparada para defenderse de cualquier posible ciberataque ruso si Moscú invade Ucrania, dijo Josep Borrell, máximo diplomático del bloque comunitario.
“A las incertidumbres domésticas se suma un inoportuno negativo clima externo, y así es que se profundiza la debilidad en los ADR y en los bonos, toda vez que los operadores en este clima de cautela y volatilidad se inclinan a la reducción de riesgo en las carteras”, comentó Gustavo Ber, economista del Estudio Ber.
El Tesoro argentino debe abonar el viernes al FMI un vencimiento de unos USD 730 millones y el 1 de febrero otros USD 365 millones, antes de un abultado vencimiento de otros USD 2.900 millones en marzo.
Los bonos soberanos operados en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) se desplomaron un 1,8% en su promedio en peso, con retornos en dólares que superan el 25%, tras acumular una baja del 1,1% durante la semana pasada. Operadores señalaron que algunas emisiones pierden más del 10% en lo que va del año.
El BCRA compró USD 40 millones en el mercado
El dólar libre revirtió la baja inicial de un peso y terminó negociado a $219 para la venta en el reducido mercado paralelo, en su precio máximo histórico alcanzado el viernes. Durante la semana pasada, la divisa informal avanzó 9,50 pesos o 4,5%, mientras que en enero gana once pesos o 5,3 por ciento.
El dólar mayorista finalizó transado a $104,53, unos 19 centavos arriba del cierre del viernes pasado y una brecha cambiaria de 109,5% respecto del “blue”.
En la plaza mayorista se negociaron USD 203,5 millones en el segmento de contado (spot), mientras que el “BCRA comenzó la semana con compras netas por unos USD 40 millones y en el mes supera nuevamente los USD 100 millones”, estimó Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio.
Un informe del StoneX Group señala que “mirando el tipo de cambio de convertibilidad que surge de dividir los Pasivos Monetarios por las Reservas Internacionales, un precio de 223 pesos no es para nada descabellado, por lo que la presión al alza podría continuar”.
En los segmentos alternativos, el bursátil “contado con liquidación” se operó en la zona de los $222, y el “dólar MEP” transó al cierre a 218,57 pesos.
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